°•Parte Única•°

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Mark a la corta edad de 9 años, perdió la vista a causa de un accidente automovilístico en el cual su hermana mayor perdió la vida. Su personalidad dio un giro bastante notable; pasó de ser un niño adorablemente risueño e inquieto a uno completamente tranquilo y callado.

Actualmente Mark se encontraba recostado en su "cómodo" suelo, a sus 17 años, próximo a cumplir su mayoría de edad, pasaba la mayor parte de sus largos días acostado en su cama e incluso en el suelo de su querida alcoba, pensando en todo y nada a la vez.
Mientras navegaba en la oscuridad de sus profundos pensamientos, la puerta de su habitación fue abierta, se incorporó al escuchar el golpeteo que los tacones de su madre hacían al caminar.

A mitad de una charla en la que realmente no era participe, se sentó en su cama para simplemente escuchar como sus padres se tomaban la libertad de decidir por él. Dicho y hecho, en unos cuantos días, el triste joven sería ingresado a un hospital especializado en personas con alguna discapacidad.
El chico, de cierta forma se sentía algo mustio y traicionado. No quería ser encerrado en ese lugar, amaba su habitación y la soledad que lo abrazaba en ella.
Sus padres le dijeron que ahí le harían estudios para saber si existía la posibilidad de recuperar su vista. Eso le animaba un poco, pero no veía la necesidad de quedarse ahí, sentía que se había convertido en un carga para sus padres y por ello le abandonaban en ese sitio.

3 meses habían pasado ya, durante su estadía en aquel lugar, había conocido a un agradable chico, JinYoung era sólo un año menor que él y Mark desde hace aproximadamente un par de días, estaba teniendo una diminuta batalla mental, ya que estaba empezando a sentir algo más por aquel simpático chico. No estaba precisamente asustado por el hecho de que la persona por la cual suspiraba fuera del género masculino, eso realmente no le importaba en lo absoluto, lo que si le tenía mal, era confesarse y no ser correspondido de la misma manera. Le agradaba de sobremanera la presencia de JinYoung, le alegraba los días y le hacía reír, cosa que no hacía hace ya bastante tiempo.

Las pruebas de los exámenes hechos a lo largo de su estancia allí, ya habían dado un resultado y para su suerte estos habían salido positivos, había una posibilidad de que Mark volviera a ver.  Y eso le hacía inmensamente feliz. Se preguntaba si sus padres habrían cambiado mucho en estos últimos 8 años, se preguntaba cómo sería él mismo actualmente y sobre todo, se preguntaba cómo sería el rostro de JinYoung, debido a su nombre y por lo que él mismo le había contado, es asiático, más especifico, surcoreano, tenía curiosidad por su cabello, ¿de qué color sería?, ¿su sonrisa sería igual de bella que su peculiar risa?, ¿sus ojos serían tan rasgados hasta el punto de parecer los tuviese cerrados?, esas y muchas preguntas más volaban por la cabeza del joven. Deseaba volver a ver pronto.

Pasaron los días, meses y no sabía si era que algo realmente malo le sucedería en algún momento de su vida, pero ahora mismo, la vida le estaba regalando tantas cosas buenas que temía pronto recibir una noticia muy mala. JinYoung se confesó a Mark el día en el que este último cumplió su mayoría de edad. No se lo esperaba, ambos se querían de la misma forma y eso no podía hacerlo más feliz.

Un par de años después, Mark se encontraba bastante nervioso, ya que estaba a punto de saber si la operación había dado sus frutos o no. El doctor empezó a quitar la venda que cubría sus pequeños ojos. El impaciente joven quería empujar al doctor y quitarla él mismo, sentía que estaba tardando más de lo normal para darle emoción a la situación.
El doctor le dio unas pequeñas indicaciones antes de retirar ese estorboso trozo de tela. Este siguió cada una de las antes mencionadas indicaciones y al fin, después de lo que pareció una eternidad, poco a poco abrió sus ojos. Su vista era borrosa, muy borrosa, pero podía ver colores, podía ver algo más que un aburrido y feo color negro. Mark no pudo contener las lagrimas mientras el doctor le explicaba que si todo había salido bien, su vista se iría aclarando poco a poco. Y así sucedió, al cabo de unos minutos, Mark pudo ver con total claridad. Sus lagrimas seguían saliendo de sus sensibles ojos. Vio a su madre y padre, ambos notablemente más viejos e igual que él, hechos un desastre debido a las ya tan mencionadas lágrimas. Los abrazó y pasados algunos minutos, se separó de tan reconfortante abrazo, empezó a buscar con la mirada a su adorable chico. JinYoung se encontraba al otro lado de la habitación, justo a un costado del doctor, se acercó a su pareja, este lo esperaba con una preciosa sonrisa y los brazos abiertos. Se abrazaron, Mark en ningún momento había dejado de llorar, su felicidad era demasiada. Se separó un poco y tomó la cabeza de JinYoung con sus manos, lo observó y sonrió ya que era más lindo de lo que había imaginado y unos cuantos centímetros más alto que él. Un "hola" y unas pequeñas risas por parte de ambos bastaron para calmar el alocado corazón de Mark.

Nunca se mencionó, pero JinYoung es sordo, él estaba en ese sitio para aprender a comunicarse verbalmente. Si, era sordo, pero no mudo. Aprendió bastante rápido y así es como JinYoung fue capaz de acercarse a aquel callado chico. Podía mantener una conversación con las personas debido a que sabía leer los labios a la perfección.
Él ya había salido de ese Hospital Especializado, pero conoció a Mark un poco antes y regresaba sólo por él.

Ya habían pasado algunos meses desde que Mark había regresado a su hogar, enormemente agradecido prometió volver a aquel lugar, y así lo hizo, a menudo lo visitaba y ayudaba tanto como podía.
Por otra parte, su relación con el asiático era asombrosa, podía decir libremente que estaba completamente enamorado del pelinegro. Y qué decir del contrario, estaba en las mismas condiciones. Mark aprendió a "hablar" mediante señas con sus manos, eso hizo la comunicación más fácil entre ambos.

No podré decir que todo tuvo un final feliz, ya que la historia de esta peculiar pareja aún tiene un largo camino por recorrer.

•°FIN°•

TE VEO [MarkJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora