bab girl

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-Necesito dinero.
-No te voy a dar nada.
-Pero porque se supone que es tu deber como padre, te separaste de mama no de nosotros.
-La traición de un hijo es difícil de olvidar.
-Superarlo ya han pasado años, eramos unos niños.
-Tenias 13 ya sabias que era bueno y malo era tu deber decirme.
Un ruido hace que ambos volteemos y noto que entraron personas a la oficina, ya sentía como los ojos me picaban.
-Eres un patán y poco hombre cumple con tu deber de padre, solo te digo que ahora dependemos de ti pero algún día las cosas cambiaran el karma existe, con permiso.

Salgo corriendo de la constructora de mi padre, tengo tanta rabia que siento que me va a dar un ataque en el primer callejón que veo me adentro y comienzo a gritar y a patear el basurero, hasta cansarme y terminar arrodillada con la cabeza dentro de las rodillas llorando, no voy a llorar por ese idiota ya vere como hago para salir adelante, comienzo a cinar en dirección donde deje aparcado el coche y marco el número de mamá.

-Ya hable con papa. Trato de sonar lo mas serena posible.
-Y como Salio eso.
- Me sigue culpando.
-Dios lo tiene que superar, me tocara hablar con el.
-No le digas a Nicolás que fui a verlo.

Me subo al auto y comienzo a conducir de camino al apartamento voy tan concentrada en el mar de pensamientos que el ruido de la bocina me hace caer de nuevo en la realidad que veo a un carro que va a toda velocidad contra mi freno de golpe al igual que otro sujeto y ambos coches quedan de frente, me bajo toda molesta y lo primero que hago es ver si le paso algo a mi bebe, compruebo que solo tiene un pequeño rayón que de seguro con una pulida sale, me volteo para ver si el otro coche esta bien y me fijo que un chico me mira con un odio es alto, tiene el cuello tatuado y parte de la cabeza con eso da un poco de miedo y carga unas gafas bajo en dirección a su boca tiene el labio roto y el pómulo inflamado.

-Es que no veías por donde ibas. Le grito enojada.
-Eso te digo a ti, no se porque dejan conducir a las chicas. Me dice en un tono tan repelente.
-Disculpa, tu eres el que casi me mata
-Veras deja el drama a ninguno de los coches le paso nada así que puedes ir a rogarle a tu novio que vuelvan como sea.
-Seras muy Hijo de puta. Que te hace pensar que tengo novio.
- Una muñeca como tu con el maquillaje corrido solo tiene una explicación y es por un hombre.
El ruido de los carros al rededor, hacen que no me de tiempo de contestarle ya que el arranco a toda velocidad y me toca hacer lo mismo de verdad que hoy no es mi día, sólo espero que Steffy ya haya llegado necesitó un trago antes de que mañana empiece con la rutina.

-Teffy. Digo al entrar al apartamento y tirarme en el sofá y ponerme un cojín en la cabeza.
-Veo que alguien no tubo un buen regreso de las vacaciones.
-Necesito un trago con urgencia. Me quito el cojín y veo a la rubia sentada al lado
-Lizandra pero que diablos te paso pareces un mapache.
-Si yo también te quiero nótese mi sarcasmo.
-Hablando de tragos, te acuerdas que te dije que todo el verano salí con un chico bueno al parecer vamos en serio y ya que necesitas un trago porque no nos acompañas esta noche así despedimos como se deben las vacaciones.
-Esta bien pero por favor no quiero terminar en las carreras como el año pasado.
-Nada que ver deberías de empezar a alistarte.

Verán no e dicho quien soy me llamo Lizandra Kingsley odio mi nombre por eso lo mayoría me llama Liz soy alta , morena ojos cafes,cabello largo castaño claro, flaca sin ningun atributo resaltante voy a empezar en el según año de la carrera de leyes hija de padres divorciados cosa que fue un trauma y aun eso me persigue, en el amor no sirvo los chicos se acercan pensando que soy hueca o superficial pero al parecer cuando se dan cuenta de todo lo contrario salen huyendo digamos que tampoco mi carácter ayude mucho.

Opto por hacerme un maquillaje mas elaborado que de costumbre, me coloco un vestido azul con la espalda descubierta y unas sandalias de tacón trenzadas un poco de perfume tomo mi bolso y salgo, veo a la rubia con una falda tubo con un crop top y botines pagando un suschi aunque me encanta pero nunca termino llena, tenemos una tradición de que antes de salir a tomar comemos para que el licor nos nos pegue tan rápido y no terminemos vomitando, me siento en la barra y comenzamos a comer ella contandome de todas las cosas que hizo con su chico en vacaciones , al terminar tomo las llave del coche y comienzo a conducir siguiendo las indicaciones que me da Teffy.