El amor es un sentimiento extraño, te pone el mundo a revés, te confunde pero también te aclara; a veces enamorarse es como suicidarse accidentalmente, es de un momento a otro, no lo sabes y cuando te das cuentas ya es tarde, pero no te arrepientes de nada.
Recuerdo aún aquel día, tenía 9 años, entraba a mi nuevo salón y me sentía rara, cambiar de profesor y de amigos me resultaba extraño, en esos momentos entraba a 3er grado, me acuerdo que pensaba que ya era toda una niña grande.
Cuando me enteré de mi nueva clase, 3ro B, fui hacia allá, cuando cruce la puerta me encontré con mi nueva profesora, ella era francesa, pero hablaba bien el español. De pronto lo vi, era de piel clara, tenía el cabello de un rubio tirando a castaño parecido al mío y sus ojos, a mí siempre me habían atraído los ojos verdes o azules, pero estos ojos cafés avellana, me cautivaron desde el primer momento, llámenme loca, pero fue amor a primera vista, tal vez no correspondido, pero yo sí me enamore de aquel muchacho.
El nombre del chico que me cautivo era Francisco, Francisco, Francisco, hasta su nombre era tan hermoso como él. Desde ese día es el único que tiene mi corazón
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Ojos marrones (EDITANDO)
Short StoryTodos dicen que los ojos claros son los más hermosos, pero ¿qué unos ojos marrones no pueden enamorar?
