𝙇𝙊𝙎𝙏 𝙃𝙀𝘼𝙍𝙏 / 𝙃𝙔𝙐𝙉𝙇𝙄𝙓

[ 𝙎𝙀𝙄𝙎 ]

Hyunjin estaba decidido a encontrar un nuevo trabajo, así que se pasó la semana entera enviando su currículum a muchas empresas y fue a varias entrevistas, pero no hubo buenas propuestas para él. Eso le frustraba bastante, ya que quería conseguir un trabajo lo antes posible. Después de varias horas finalmente regresó a casa, se adentró al departamento quitándose su corbata y vio a su hermana sentada en el sofá viendo televisión.

—¿Y cómo te fue? —dijo viéndolo expectante.

—Fatal —soltó un suspiro.

—No te desanimes —le dio unas palmaditas en el hombro—, ya lo conseguirás.

—¿Y tú? —la miró de la cabeza a los pies— ¿Por qué estás tan elegante?

—Digamos que… También tengo una entrevista de trabajo hoy —sonrió—, pero quería verte antes de irme.

—Espero que te vaya bien —la abrazó—, porque comenzaré a cobrar las expensas por el uso del sofá.

—Idiota —lo golpeó.

Sunhee se fue dejándolo solo y el castaño se puso cómodo en el sofá para luego encender su laptop y revisar sus correos. No pudo evitar deprimirse al ver que varios de ellos no tenían respuesta.

[...]

Por otro lado, el rubio se hallaba regando las plantas fuera del local y Lenna estaba terminando de arreglar los pedidos que faltaban por despachar. Su jefa no había ido a trabajar una vez más y las tareas sólo aumentaban con el paso de los días. El móvil de la chica sonó y ella no tardó en contestar.

—Hola.

Felix se fue al depósito para darle privacidad y guardar la regadera que había utilizado. Unos minutos después se volteó para regresar al local y se encontró nuevamente con Lenna, ella se veía algo triste y sus ojos estaban cristalizados.

—¿Qué sucede? —preguntó preocupado.

—Soy la nueva encargada —se sentó en la silla que se hallaba junto a la puerta.

—Eso es algo muy bueno —el chico sonrió tomando su mano— ¿Por qué estás llorando?

—No quiero ser la jefa —admitió—, no estoy lista para ello.

—Serás una jefa increíble —insistió—. Además, ya estuviste a cargo estos días y es lo mismo.

—Pero es mucha responsabilidad —lo miró—, y no quiero convertirme en Ciara, sabes de lo que me refiero.

—Escucha, ponte a prueba una semana —acarició su cabello—, y si al final de la semana no te gusta tu puesto… Le dices a Jisung.

—Está bien —Lenna asintió.

—Tenemos que festejar tu ascenso —caminó hacia la entrada del depósito—. Esta noche cenaremos en mi casa y no aceptaré un no por respuesta.

[...]

Hyunjin llevaba una hora actualizando la página y esperando pacientemente, pero no llegaba ningún correo nuevo. Cerró la laptop y se puso a ordenar el departamento para intentar despejar su mente de los rechazos de esta semana. Observó el piso de madera y se encontró con ropa, zapatos, productos de belleza y entre otras cosas desparramadas por toda la sala.