35. ¿Celos?.

1.3K 71 7
                                    

—¡Lisa! ¡Lisaaa!

Murmura alguien en mi oído pero al creer que simplemente es un sueño lo ignoro por completo.

—¡Tssss! ¡Tssss!. Bien él sonido era más insoportable ¿es qué acaso uno ya no puede descansar en paz?.


Abro un ojo y me encuentro con él rostro de Cameron a centímetro, bueno en realidad milímetros estaba tan cerca que podía ver su pequeño grano a un lado de su nariz. Me quede embobada y aún con mi mente en otra galaxia. Él me observa como si fuera una especie de otro mundo. ¿Acaso tan fea soy recién levantada?.

—¡Llevo llamándote por.—Interrumpe lo que dice y se fija en su reloj dorado y continua.—POR QUINCE MINUTOS Y NO HE OBTENIDO RESPUESTA ALGUNA.

—¿Ah?—Respondo aturdida tras semejante grito.

—¿Cómo es que no te despiertas luego de que literal haya gritado en tu oído por minutos?.

Vaya, ¿tan pesado tenia él sueño?.

—Mm. Yo no lo sé, osea escuche gritos pero pensé que solo soñaba. Ya sabes lo extraordinarios y raros que son los sueños, así que imagine que estaba en uno de ellos.—Respondí reincorporándome en él asiento.—¿Por cuánto tiempo dormí?.

—Treinta o cuarenta minutos, de eso no pasabas. Pero vaya que coges él sueño bien rápido, eh. Si así de rápido captaras las materias ya hasta presidenta fueras.—Sonrie burlón.

Me ofendo con su comentario ¡Él acaba de llamarme holgazana y estúpida!. Lo de holgazana no me sorprende pues si lo soy, y a mucha honra. ¿PERO ESTÚPIDA? SI REALIZARÁN UN CONCURSO DE ESTUPIDEZ A EL NO LO ACEPTARÍAN POR SER MUY PROFESIONAL.

—¿Me acabas de llamar estúpida Alexander?—Remarco su segundo nombre.

—Pues no solo lo digo yo, lo dice toda la población que sepa de tu existencia Walker.—Sonrie de nuevo mostrando sus perfectos dientes.

Maldito desgraciado, quien puede tener una sonrisa tan linda.

—No sé porque me llamas estúpida a mi, si él que siempre saca notas del 1 al 5 eres tú cariño—Guiño él ojo.

Él entreabre sus labios y no obtengo respuesta alguna. Era divertido verlo así, ya que no tenia que refutar nada. Porque era cierto él siempre obtiene las bajas notas, no yo.

—¿Qué dices Cameron?. Lo siento no he escuchado tu respuesta, ah cierto no tienes nada que decir.—Sonrio y le doy un beso en la mejilla.—Sabes que es broma bueno lo de las notas no porque eres un completo pendejo. Él se ríe junto a mi y golpea suavemente mi brazo.

—Pues si tanto te burlas de mi estupidez deberías enseñarme algo de matemáticas, quimica y física Walker.—Enarca una ceja.—Oh y ahora que lo recuerdo Anatomía tampoco me va bien.—Mueve las cejas con rapidez.

¡Asqueroso animal!

—¡Siempre con tus comentarios fuera de lugar Alexander!—Hago una muerca de disgusto.

—Pero admite estos comentarios te sacan sonrisas.—Sonrie de lado.

—Aunque me sorprende que te vaya mal en Anatomía, si haz explorado los cuerpos de toda la población femenina.—Viro los ojos.—¡Cuantas no habrán estado sentadas aquí!—Señalo él asiento de copiloto. Cameron me observa ofendido pero luego su expresión cambia a una de picares.

Nunca te enamores de Cameron Dallas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora