El espejo de mi ser

Misterio y diversión

Narrado por Izumi.

Me levanté, con mucho sueño, y para variar, hoy era el día del examen y no estudié nada, ya que el día anterior llegué cansado a mi casa.
Ayer, Emily y yo fuimos a la biblioteca, en la cual, conocimos a un chico muy agradable a mi parecer que, además, nos invitó a tomar helado.
A pesar de eso, creo que a Emily no le agradó mucho, porque lo único que hicieron fue discutir, me molestó un poco, pero no como para estar enojado con ella, puesto que... la amo demasiado.
Espero que la próxima vez, ella y Cris entablen una conversación pacífica y no como si fuese una especie de guerra.

Dejé de lado mis reflexiones, tomé mi bolso y caminé a la escuela.
Cuando llegué... una desgraciada sorpresa me esperaba.
Ahí... dentro de la escuela, había mucha gente alrededor, como si estuviesen observando un espectáculo o alguna grave situación... y así era, me adentré en medio de la multitud que incluía estudiantes, profesores, directiva, etc.
Y fué cuando ví a Emily, tirada en el suelo, pálida, como un ser inerte...y a su alrededor, un pequeño charco de sangre...
Al verla, las lagrimas me salían involuntariamente, verla en ese estado, me deprimía bastante...
pregunté con desesperación y lágrimas en los ojos lo que había sucedido, pero nadie lo sabía...
en pocos minutos llegó una ambulancia, dos personas se bajaron del vehículo, sosteniendo una camilla, levantaron a Emily con cuidado y la recostaron sobre esta..

Yo, aún llorando.. pedí que me llevaran con ellos, no quiero dejarla sola...
Accedieron y también subí a la ambulancia, salimos de la escuela y nos dirigiamos al hospital...
yo estaba pensando ¿qué podría haber pasado?, quizás la apuñalaron... o golpearon, realmente no sabía, mi cabeza daba vueltas.

-Estarás bien...Emily... yo estoy contigo, le dije a la vez que acariciaba su cabello y le daba un beso en la mejilla.
Ella obviamente no despertó, pero yo sabía que se recuperaría... ya que aún podían oirse sus latidos... y además, yo y ella compartimos un lazo muy especial, algo que jamás sentí con otra persona...es como mirarme en un espejo y...ver mi propio reflejo.

Llegamos finalmente al hospital, era muy amplio, con bastantes habitaciones, todo de color blanco y en el entorno se podía percibir un aroma a medicina.
Llevaron a Emily a una habitación vacía, me ordenaron que esperara afuera, en una banca que se extendía a lo largo del pasillo.
Transcurrió mucho tiempo, vi enfermeras y médicos entrar y salir de las habitaciones de demás pacientes... lo que llamó mi atención.. fué una persona que estaba de pie apoyada en la pared, no distinguí si era mujer u hombre, puesto que traía una capucha puesta.
Decidí ignorarlo, y justo en ese momento se abrió la puerta, me dijieron que Emily no tenía nada grave, por lo que me alegré, entré y le di un gran abrazo...

-¿Te sientes mejor? le dije--.

-Sí, gracias por venir...Izumi.

-Si se trata de tí no lo dudaría, dije sonriendo.

-Q...que lindo...

Justo en ese momento el médico habló, dijo que darían a Emily de alta, le entregaron una nota, que indicaba la medicina que debía tomar, la ayudé a levantarse y nos dirigimos hacia la salida...
esa noche decidí quedarme en su casa para hacerle compañía.

Al día siguiente, por la mañana, le sugerí que visitáramos un parque de diversiones para animarla y hacerle olvidar lo que pasó ayer, a lo que me respondió que sí, con unos ojos de felicidad.

Estabamos listos para partir, pero antes, Emily levantó el teléfono y llamó a Cata, preguntándole si quería venir al parque de diversiones con nosotros, no se escuchó ninguna respuesta de su parte... en ese momento tocaron la puerta, ella colgó el teléfono y fué a ver quien era, sorprendentemente ahí estaba Cata, algo agitada y ruborizada por haber corrido desde su casa hasta acá en sólo un santiamén.
Le dí una copa de agua, la cual devoró en segundos, luego de ese descanso, caminamos rumbo al parque.