Caminaba por los viejos pasillos con una sonrisa, veía el color crema de las paredes y intentaba desviar mi atención, pero... No podía escapar del pasado, recuerdos pasaban como flashes a mi mente.
Sentia un escosor en mis ojos, no podía evitar sentir dolor al recordar el pasado; un dolor punzante en mi pecho prevenía lo inevitable, mis ojos estaban empañados, solo veía como un espejismo dos siluetas abrazadas.
Dos siluetas que no estarían juntas nunca más... Respiré y aspiré profundamente, solté todo el aire como si en ese aire estuvieran mis penas, Sonreí tranquilamente y caminé hacia el patio de la institución.
Todo se sentía tan vacío, recordaba las risas, abrazos y cumplidos...
Mi sonrisa comenzaba a fallar, todo el patio se encontraba lleno de estudiantes reencontrándose; abrazos, risas y bromas estaban presentes. Sin embargo en mis oídos todo sonaba como estática, mientras que mi mente reproducía el pasado como si fuera la peor de mis torturas...
Peor tortura es la de tener a alguien importante odiandote, esa tortura te carcome desde el pasado al presente; retrata la tristeza y la impotencia de no poder hacer nada.
El saludo fugaz de alguien a mi lado me reincorporó a la realidad, solo era una adolescente con el corazón roto ¿a quien no le ha pasado eso?.
Conversaba con mis viejos amigos, las preguntas sobre el pasado me dejaban con una sensación agridulce apegándose a mi paladar y a mi corazón.
Y, como si fuera el peor de los castigos vi su silueta acercándose, mis sentidos fallaban, mi cerebro me enviaba recuerdos; no sabía si llorar ahora mismo. Así que solo reí como si solo fueras un amigo, un saludo fugaz y un abrazo de cortesía.
Mis recuerdos pasaban y me hacían llegar las memorias de tu calor, de tu sonrisa, tus sombríos ojos que llegaban a brillar cuando me veías, de tus abrazos que me llenaban de paz.
Caminé hacia el pasillo y me senté en una esquina, nadie pasaba, estaba sola.
Buenas tardes, soy nueva, espero llevármela bien contigo y con los demas jeje es un placer conocerlos -Mi rostro palideció y en mi garganta sentía un dolor inmenso, los recuerdos fueron mi tortura por mas de media hora-
Mis lágrimas caían de a poco, no acostumbraba a llorar... Me hacia sentir débil, Sonreí mirando un pequeño zorro dibujado en una de las esquinas, mis lágrimas dejaron de fluir y solo miraba el techo como si el tuviera una respuesta...
Limpié mis lágrimas y me levanté sacudiendo la falda que se había ensuciado un poco por el polvo, salí y note que sonreias mientras hablabas con compañeros de nuestro salón, caminé hacia otro lugar intentando esquivarte pero, luego recordé que debías devolverme algo. Preparé mi cerebro y mi cuerpo para la tormenta de memorias y te hablé.
Miré tus ojos intentando ver algo pero solo encontré un color oscuro totalmente vacío de sentimientos, mi mirada decayó y tome los libros con mi mejor sonrisa, no hubo una despedida, el me odiaba... Yo me odiaba..
Me senté en un banco a las afueras de los salones y leí el prologo de los libros.
"Con razón siempre terminas sola" mis dedos temblaban cuando leí la frase resaltada con tinta azul... Escondí mi rostro en mi cabello y solo miré el suelo, inundaba mi cabeza con todas esas frases, esos besos y abrazos, las risas y las lágrimas...
Todo terminaba siendo en vano, guarde mis libros y salí con mi rostro aun siendo tapado por mi cabellera, tu tomaste una dirección distinta a la mía. No volteaste, lo note porque te miraba de reojo.
Todo terminó como empezó, en un instante.
Hubiera sido hermoso si hubiera sucedido como si fuera película antigua,tu volteabas y corrías hacia mi y yo te abrazaba sin importar que, nuestras miradas se cruzarían y sentiríamos una felicidad inmensa el uno por el otro.
Pero...
Solo te perdiste entre otras personas que tambien caminaban, quizás tambien te invadieron los recuerdos.. Eso nunca lo sabré, mis pasos retumban en la acera, cuando tenia la certeza que estabas muy lejos caminando entre una multitud de personas.
El odio supera al cariño incluso, la venganza te carcome y la ira solo te deja huellas...
Quizás haiga sido buena idea haberte conocido, pero no tan buena que tu me haigas conocido..
Mis lágrimas caían como gotas de rocío, nadie iría por el otro.. Así es la realidad.
Nunca vi que te acercaras incluso después de ya haber caminado una cuadra. Solo seguiste con tu vida...
Sólo fui un hoyo en tu vida..
Dos corazones tan distintos y parecidos a la vez, terminaron siendo rotos con la misma estaca.
El fuego es implacable,lo consume todo a pesar de parecer tranquilo y sereno.
El hielo puede ser hermoso o relajado pero puede ser el más egoísta y destruir todo si se expande.
Me recoste en mi cama y vi el techo con la mirada perdida.
Todo terminó, solo quedaron dos corazones destrozados y odio...
El fuego y el hielo no terminarían juntos después de todo...
