- ¡Mi señor, mi señor! ¡La reina ha dado a luz!
El Rey, entusiasmado corrió detrás del partero y entró a la habitación dónde yacía su esposa y su recién llegado hijo.
- ¿Qué fue? ¿Una adorable niña? ¿O un fuerte varón?
La Reina con sus movimientos débiles le mostró a su hijo, dejándolo en sus brazos.
- ¡Es una niña!.- Gritó el Rey felizmente antes de ser interrumpido por su Reina. - No es una dama, es un varón.
El Rey rió burlón y se rascó la nuca mientras observaba al bebé.
- ¿Cómo le llamaremos?
La Reina Mikoto le preguntó a Fugaku, el Rey.
- Sasuke..
- ¡Oh vaya! Es un hermoso nombre para alguien de la realeza.
- ¡Tenemos que dar la noticia de que éste bebé ha llegado al mundo! ¡Anda Gerald, trae mi ropa elegante y ayúdame a reunir a todo el reino!
Fugaku salió apresurado a dar la noticia, mientras que Mikoto se quedó en cama junto al bebé.
///
Nueve años después.
- ¡Señor, la Reina está muy mal!.
Gerald apareció en el gran salón y Fugaku consiente de la enfermedad de su esposa, fue corriendo hacia la habitación.
- Mi hombre..
Mikoto levantó con dificultad su mano y sostuvo la de su marido.
- Estoy a punto de partir..llama..llama a Sasu..ke
En ese momento entró el niño, asustado por ver a su madre moribunda.
- ¿Mamá?
- Cariño..Cuida a tu padre y a nuestro..reino..éste es tu futuro..y no olvides que te amo..
- Yo también te amo mamá.
Con esas últimas palabras, Mikoto pudo morir en paz, dejando caer su mano.
- ¡¡Mikoto!! ¡Abrid los ojos!
Fugaku abrazó a su esposa y acarició repetidamente sus mejillas.
- ¡¡No me puedes dejar solo, piensa en nuestro hijo!!
Sasuke, lloró junto a su padre, pero Gerald retiró al niño de su madre para que no estuviese más con la pena.
Pasaron dos meses del entierro de Mikoto, y hubo una terrible guerra en las afueras del reino, los extranjeros querían ganar territorio, pero Fugaku tuvo que ir a dar la cara para detenerlos.
Al terminar la guerra, Fugaku fue avisado que un par de carretas se habían quedado en el campo, y que al parecer había esclavos allí dentro.
Fugaku montó en su caballo y fue a los campos. Efectivamente, dentro de una carreta había un par de cadáveres, y en la segunda carreta había una mujer a punto de morir.
El Rey, rápidamente llevó a la mujer a su Castillo y le dio cuidados hasta que logró mejorar..Tan pronto la mujer estuvo de pié, Fugaku le pidió matrimonio. Pues se había enamorado de sus encantos, de sus ademanes, de su belleza, tan pura y hermosa.
En ese mismo día, la boda se hizo, y toda la gente del reino asistió a la Iglesia. Algunos, molestos por la mala obra del Rey, y al contrario.
Una vez terminada la boda, Sasuke fue al salón para charlar con su madrastra, la cual, en cuanto lo vio entrar, no hubo otra mirada más que una de envidia.
- ¡Tu, niño! ¡Venid aquí!
Sasuke se acercó a ella y sonrió con inocencia. La mujer, con sus largas uñas acarició el rostro del chico, y con odio le indicó que se alejara de ella.
- Espejito, espejito..Dime quién es la más bella del reino.
Kaguya susurró frente a su espejo de oro. Éste no era un espejo común, estaba embrujado.
- Tu mi hermosa reina, eres la más bella de éste reino...pero cuidado, que dentro de un tiempo más, puede que alguien supere tu belleza.
- ¡¿Qué estás diciendo!? ¡Dime de quién se trata!
- En este caso..es un hombre. Tan lindo, tan amable y dulce.
El espejo no dijo más, y volvió a la normalidad.
Kaguya, la reina, enojada y desesperada por saber quién sería su rival. Arañó con sus largas uñas los muebles y golpeó unas cuantas cosas, despejando su mente.- ¡Sasuke!
La Reina, había acertado en su suposición, pues el niño era hermoso, su belleza alcanzaba un nivel superior a la de ella.
- ¡Encerrien al niño en las celdas del calabozo!
El Rey no se opuso a esa decisión, pues estaba embrujado por Kaguya, y aceptaba todas sus órdenes, a tal grado de que ella se quedó con el trono, dejando al Rey sin rastro de autoridad sobre el reino, y a su hijo, encerrado en el calabozo.
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Blanca Nieves Y El Cazador. (ItaSasu)
FanfictionEspejito espejito ¿quién es la mujer más bella de éste reino? *Belleza, odio, muerte.* Era lo que pasaba por la cabeza de aquella mujer frente al espejo. Su hijo tenía la belleza que ella creía tener. ¿Qué debía hacer? Su solución más fácil.. Fue d...