Ahora eran azules como el cielo...
Mis seres queridos muertos, mi cuerpo cambiando, ya no tenía nada salí corriendo hacia el bosque descalza, las ramas me arañaban mis brazos y mis piernas temblaban pero no podía dejar de correr hasta que el cansancio me pudo y tuve que parar fue cuando de mis adentros solté un grito esto ya era demasiado para mí las lágrimas no salían a la superficie ya que de tanto llorar solo sentía frustración y miedo, mire a mi alrededor estaba en el bosque pocos rayos de sol entraban era un lugar oscuro y frio camine un poco más adelante y vi ruinas antiguas a lo lejos había una especie de arco pero le faltaban algunas piedras de arriba me acerque más a ella pero unos ojos amarillos aparecieron por los lados y gruñidos empezaron a sonar me gire y empecé a correr todo lo que mis piernas me permitían y un dolor fuerte apareció en mi tobillo haciendo que cayera cuando lo vi era un animal enorme con ojos amarillos y pelaje marrón que me miraban con furia, era un lobo, tres más me rodearon mientras que el lobo marrón me arrastraba hacia donde había venido, el dolor era fuerte y aunque le daba patadas el lobo no hacía nada mientras que los otros se acercaban, así iba a acabar mi vida asesinada por unos lobos...
Y de repente una bola de fuego atravesó la noche oscura derribando al lobo marrón que me tenía atrapada el cadáver desapareció al instante y mientras los otros se ponían alerta yo salí corriendo hacia fuera del bosque esta vez sin mirar atrás
Ya estaba viendo el fin del bosque y mi corazón latía fuertemente- un poco más y estaré a salvo- y de repente algo me tiro al suelo cuando levante la cabeza había un lobo gris mirándome enseñando todos sus colmillos apunto de atacarme pero cuando se me iba a abalanzar encima otra bola de fuego lo atravesó haciendo que con ella se desvaneciera, yo atontada no sabía que estaba pasando y encima a la caída me golpeó la cabeza haciendo que todo se me nublara, alguien me agarro por los brazos haciendo que me levantara pero estaba demasiado débil como para aguantarme
-ya te tengo princesa- su voz era dulce y fina pero feroz al mismo tiempo, me agarro a lo modo recién casados y fue cuando me di cuenta que nunca me había sentido tan a salvo así que con todas mis fuerzas pude preguntar
-¿Quién eres?
-Soy tu ángel guardián y he venido a rescatarte
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Destinity
FantasyEl pasado es la peor arma de destrucción La venganza una manera de aliviar su dolor La libertad es encontrar aquello por lo que luchar Un juego de reyes en medio de un juego de amor Ellos... almas destinadas a estar juntas... Pero el pasado siem...