35. Hospital

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- Déjame tranquila, yo estaba feliz hasta que llegaste tú. - Lo señalé mientras miraba Teen Wolf.

- Deja de actuar como una niña, ya hablamos de esto y tú dijiste que aceptabas. - Recordó mientras apagaba la televisión.

- ¡Hey yo estaba viendo eso!

- Levántate y vístete. Te veo en el gimnasio en diez minutos. - Ordenó mientras se levantaba y se dirigía a la puerta.

- ¡Liam soy una chica no puedo estar lista en diez minutos! - Grité aún desde mi sitio.

- Pues será mejor que te apresures. - Recomendó y salió de la casa.

Muy bien les explicó, hace unos días casi roban mi celular en la calle y como soy una chica indefensa lo único que pude hacer fue patear las partes del criminal y huir con mi teléfono.

Días después lo intentaron de nuevo pero gracias a Dios Luke iba unos pasos más atrás y pudo defenderme.

Así que Liam insistió en que tomara clases de defensa propia, obviamente yo me negué, el siguió insistiendo hasta ahora, así que no me queda más que ir a tomar la maldita clase, que por cierto me dará el.

Me levanté del sofá y me dirigí a mi habitación para poder cambiarme, Liam dijo que sería rápido ya que hoy tienen que ir a una firma de autógrafos en la tarde.

Busqué ropa deportiva y opté por un pantalón de licra ceñido una camiseta y mis Reebok, se siente muy raro no andar con mis Converse en realidad.

En un bolso metí otra ropa de cambio y salí de la casa.

Casualmente era justamente en el Centro Comercial en el que busque el traje de Louis y también en el que mandé a Harry a prisión.

Me dirigí allí caminando ya que no quedaba tan lejos.

Al llegar me dirigí al supuesto gimnasio y vi que estaba totalmente vacío, vi a una chica detrás del mostrador y me acerqué a ella.

- ¿Hola? Emm...

- Puedes pasar, está reservado el gimnasio. - Después de eso se levantó de su silla y salió por la puerta en la que yo había entrado.

¿Ok?

Entre y me dirigí a una parte en la que habían colchones, el suelo estaba reemplazado por colchones.

Dejé el bolso en algún lugar del salón y empecé a "calentar"

Pasaron diez minutos y alguien entró a la sala.

- ¿Qué haces aquí? - Pregunté secamente mirándolo.

- Pues Liam dijo que no podía venir así que me pidió que te enseñara a defenderte. - Sonrió falsamente y se dirigió a mí.

¡Liam te voy a matar!

- Dame un minuto.

Corrí a mi bolso y saqué mi teléfono.

Busque en mis contactos el nombre de Liam y lo llamé.

-Hey sister.

- Nada de "Hey sister" ¿Porque mandaste al idiota a enseñarme defensa propia?

- Estoy aquí muñeca, escucho todo. - Dijo pasándose una mano por el cabello.

Rodé los ojos y volví mi atención al teléfono.

-Tenía que arreglar lo de la firma de autógrafos, Harry te enseñará, tranquila.

- Te odio.

Entre El Rubio Y El Rizado (HS. LH) [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora