Y si te pregunto qué es la vida para vos? Qué me contestas? Un momento? Un pedacito de tiempo? Y cuando alguien muere? Ahí pierde su vida? Se puede perder la vida? Perder la vida es entonces lo mismo que perder el tiempo?
Todos los días hablamos de la vida. Hablamos mucho de la vida pero nadie sabe bien que es. Ni buscando la definición en un diccionario te dan una respuesta concreta. Muchas palabras pero pocas explicaciones, viste?
Yo sufrí una perdida. Vos seguro que también. No hace falta explicar el dolor. Es como si alguien te estuviera empujando al vacio. Desde bien alto. Y ahí, justo en el momento que estas por caer, hay algo que te agarra de una mano. Sí, algo. No me preguntes qué porque no lo sé. Aunque espero encontrar la respuesta mientras voy escribiendo esto.
Te agarra de una mano y te deja suspendido en el aire.
Te salva.
Sí, te salva. Pero no te devuelve la tierra firme. No te levanta ni te saca del abismo.
Y es ahí cuando uno tiene que hacer fuerza para subir. Agarrarse fuerte de esa mano que te sostiene evitando que caigas y juntar fuerzas para subir. Cuesta, pero confias. Confias en que esa mano..
no te suelta.
Si hay algo que aprendí en estos años, es que la vida no se mide en tiempo. Pero que perder el tiempo, es perder la vida.
La vida no se mide en tiempo, sino en cantidad de vida dada. Y cada vez que recuerdo a esa persona, recuerdo la vida que me daba.
Porque es así, la misión de nuestra vida es DAR VIDA. Regalar vida. La vida no se pierde. La vida se gana.
Morir no significa perder la vida porque las personas que mueren siguen dándonos vida desde donde están.
Ahí esta lo importante. Grábalo en tu corazón. Las personas pierden su vida cuando dejan de dar vida, no cuando mueren.
Cuando esa persona tan especial muere y caemos al vacio, eso que nos salva es la vida misma. Toda esa vida que esa persona nos dió desde el día que la conocimos.
Esa vida que nos daba su sonrisa. La vida en su mirada, en sus gestos. La vida que nos daba su fuerza, su carácter. La vida que nos daban sus abrazos, sus palabras, sus historias. La vida que nos daban sus locuras.
Esa vida es la que nos salva. La que nos dice “hace fuerza y subí, te estoy agarrando. No te caigas.”
Acumuló tanta vida dandonos vida, que ni la muerte es suficiente para que pierda su vida.
Así que dejemos de hablar de la muerte como sinónimo de perdida o como antonimo de vida.
Porqué esa persona que murió tiene tanta vida para dar, que nos la sigue dando aun en su muerte. Esa vida que nos da, es la vida que nos salva de la caida hacia el vacio. La que nos hace resistir.
Resistir, y sobrevivir.
¿Que es la vida? Eso que me das para vivir cuando en mi vida queda solo muerte.
