(27) Tulipanes para otro Tulipán.

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Samanta  Benet es frigida.

No lo quiere aceptar.

Lástima.

Kale Jones es Inevitable.

Lo acepta y presume.

Perfecto.

Un inevitable para una Frigida. Bella comparación. Sam  y  Kale, fueron los mejores amigos, cuando tenían cinco y  salieron de amigos secreto en  San Valentín. Tan inocentes los niños, su amistad duro once años. Muy poco si se llamaron alguna vez: "Mejores amigos  por siempre". Si ellos  lo sabían o no, la palabra  "Por" era una suposición, determinaron cuanto iba a durar su amistad. Bien, puede ser que ese "Por" fue quien los separó.

Ya quisieron  que ese "Por" los hubiera separado. Pero no todo lo que quieres lo tienes.

Y nosotros siempre queremos a lo inalcanzable. Lo inalcanzable, se puede tener, si de verdad lo queremos, si nuestro corazón lo desea. ¿Qué no es más fácil si de verdad lo deseas?

Si de verdad lo quieres, lo tendrás.

¿Y si seguimos a nuestro corazón? El cerebro se quejará pero... ¿Qué más da?

Seamos sinceros con nosotros mismos.

No dejemos que  nadie, absolutamente nada, nos detenga.

Ese par de consejos, no lo pudieron seguir, Sam y Kale.

Bonita historia.

Duele ser separados por la distancia, y todo eso.

Ellos no fueron separados por la distancia. Ya que fueron vecinos toda su vida, hasta cuando fueron a la Universidad, les tocaba las mismas clases, estudiaban la misma carrera, sin ser amigos. Dos completos desconocidos.

Dicen que las amistades que duran más de siete años, duran para siempre.  Y así es.

El destino se encargaba de unirlos de nuevo, pero ellos se negaban, jamás aceptaron la verdad, muy triste que hayan pasado nueve años actuando como desconocidos entre sí.

Se preguntarán algunos: ¿Qué podrá haberlos separado? ¿Mentiras? ¿Rencor? ¿Distancia? ¿Amigos? ¿Otras personas? ¿Traición? ¿Verdades?

Ellos fueron separados por el amor.

Querido amor:

¿Porqué separaste a esos dos?

Pero el amor NO tiene la culpa, la culpa la tienen ellos mismos. ¿Pero de qué sirve culparnos? No ayuda, por eso debemos superarlo. No sin antes hacemos frente a la situación.

Como a cualquiera le pasa, esos dos mejores amigos nunca estuvieron juntos... por la muerte.

Samanta se suicidó.

¿Sabes por qué?

Tal vez en alguna que otra historia se dirá las razones.

¿Continuará?

Sueños PerdidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora