-Vayan a sus bases-grita la entrenadora por un megáfono.
Luego de armar los equipos la entrenadora nos dijo que agarremos nuestros arcos y que por medidas de seguridad no se podía tirar a otro lugar que no fueran las extremidades. Que no podíamos tirar a matar , solo a herir un poquito. Yo agarré mi arco y mis flechas. Cada uno tiene el suyo y es irreemplazable.
Luego de eso salimos al bosque y corrimos para poder ocultar la bandera. A lo lejos veo un montículo de rocas lo suficientemente alto como para colocar la bandera.-Síganme, ya encontré un lugar. -digo en susurros. No sé porque si todavía no empezó el juego, pero es costumbre.
Todas corremos y nos paramos debajo del montículo. Todas me miran como esperando que hacer- Yo subo y dejó la bandera ahí. Si por casualidad suena la campana y el juego empieza antes de que yo baje Briseida y Eloisa se quedan a cuidar la bandera desde abajo .-ambas chicas asienten. Las dos son grandes y de cuerpos anchos. Lo que necesitamos para hacer guardia.-Todas las demás, corran a buscar la bandera contraria, lo más probable es que esté cerca del río. Y por favor no se dejen alcanzar por sus flechas. -quince cabecitas asienten y se ponen en posición para comenzar el juego.
Acomodo mi arco y mi carcaj en la espalda para poder subir. Agarro el palo de la bandera con mi boca. No se me hace difícil llegar a la cima a pesar de mi altura y es que cabría esperar que una chica que mide 1,58 se le haría más difícil. Pero a mí no , llevo haciendo esto desde pequeña. Siempre que me escapaba de casa, iba al bosque y me trepaba a un árbol. Escalo fácilmente la piedra. Pongo en pie un un peldaño y me resbalo. Quedo agarrada solo de mis manos.
-Aledis , ¿estás bien?- grita alguien desde abajo.
-Si, si , estoy bien.- digo.
Busco otro lugar en donde apoyar mi pie. Encuentro uno súper chiquito y pongo todas mis fuerzas en poder poner mi pie en el lugar correcto. Cuando lo logro , tomo impulso y sigo subiendo. Llego a la cima justo cuando suena la campana y veo cómo todas las chicas corren hacia el bosque.
Pongo el mástil de la bandera en un pequeño agujero en la piedra y comienzo a bajar.
Trató de no demorar demasiado pero la bajada es más difícil que la subida.
Al cabo de tres minutos ya estoy en el suelo y asiento en dirección a Briseida, que es la que vigila este lado del montículo.Comienzo a correr por el bosque en dirección al lago. La protección que nos hacen poner en el pecho molesta un poco para correr, pero no le presto atención y sigo. Esta hecha de un metal súper duro el cual una flecha no puede atravesar. Vendría a ser como una armadura.
Siento ruidos de pasos en mi espalda. Agarro una flecha y la pongo en mi arco, los pasos se van haciendo más fuertes. Son tres personas y van en dirección a la colina de roca , así que supongo que son del equipo contrario.
Me escondo en unos matorrales y espero a que lleguen.
Veo como las tres chicas paran en el lugar en donde yo estaba hace unos segundos.-No sé dónde está la bandera.- dice una recuperando el aliento. Es alta y tiene cabello pelirrojo , más tirando a rojo que naranja.
-Creo que está más al norte-dice otra , esta es más petiza que la colorada y tiene el cabello súper negro. -No la pueden haber escondido, sabes las reglas , tiene que estar a plena vista.
-Ellas nunca van a encontrar la nuestra- dice la tercera. Esta es muy flaca y alta. Tiene la piel súper pálida. Es algo así como albina , ya que tiene el cabello rubio tirando a blanco.
Me molesta que digan eso, ya que tengo fe en que vamos a ganar. Tenemos que ganar , tengo que vencer a Tanit.
Con mucho cuidado coloco mi arco y disparo. La flecha sale volando al lado contrario en donde está ubicada nuestra bandera.-¿Qué fue eso?- dice la morocha susurrando.
-No se , pero vamos a ver- contesta la rubia y las tres salen corriendo en la dirección en donde dispare.
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Cazadoras de Sança (En proceso)
Science FictionImagínense una sociedad en la que solo hay mujeres. En un lugar en el que el machismo no existe y no hay discriminacion. Pero no todo es perfecto. ~..................~ Aledis, una chica normal de 15 años, que vive en...