Caminando por los pasillos de la escuela veía de un lado a otro, a cada paso que daba más desanimado, solo estaba de vuelta por que mamá había insistido mucho, si fuera por mi aún estaría metido bajo las sábanas autocompadeciendome; mi último novio Marcos, me dejo hacia unos dias destruyendo la poca confianza que me quedaba, confirmando que el amor no era para mi, a los 26 años sólo me había enamorado de verdad 3 veces; el primero fue a los 16 y la causa por la que me asumí gay, Javier había sido un gran chico, hasta que sus amigos empezaron a molestarlo por pasar mucho tiempo conmigo.
A los 18 conozco a Víctor en un club, pense que al fin encotre al amor de mi vida, en un principio todo estuvo bien, el siempre fue cariñoso y atento; fuimos a la misma universidad por lo que decidimos mudarnos juntos, supe que fue la peor desicion tras el primer golpe, estuvimos juntos por casi 2 años, un día termine en el hospital con una lecion en las costillas junto a varios moratones, me di cuenta que si lo permitia terminaría matándome; dejarlo no fue fácil, sobre todo por que seguía molestando, dejando mensajes en mi celular, notas en el departamento, incluso algunos de sus amigos me vigilaban.
Me mudé a la ciudad con un trabajo de maestro pre-escolar, nuevo departamento y nueva vida; conocí a Marcos cuando estaba recignandome, salimos unas veces antes de que diera el primer paso y me besara.
Mi humor mejoró mucho, me sentía feliz, y luego lo vi con una mujer, trate de no pensar mal de eso pero Marcos la besó justo antes de dejar al pequeño a mi cuidado; estaba casado y era padre, discutimos mucho, lo acepte por un tiempo, la relación se deterioro, no podia hablar con nadie de cuanto lo amaba, tenía que cuidar de su hijo en mi salón, verlo con su esposa.
No se cuando fue la primera ves que empese a llorar hasta dormirme, fue así por un tiempo, le pedi que se quedara conmigo pero siempre tenia la escusa de su hijo, era una escusa si, yo amaba a ese niño y el lo sabía, le dije que si era necesario lo trajera a vivir con nosotros pero se negó, discutimos mas y Marcos me dejo; de eso hacia unos dias, todo lo que había echó fue estar en la cama, mamá estaba preocupada cuando llegó el viernes regañandome por no visitarla, por estar encerrado, por no llamar, en fin, por todo.
Y aquí estaba, de regreso al trabajo tras un fin de semana con ella, no lo soportaba mas, nada de lo que hacia parecía ser suficiente para esa mujer o para nadie.
Los niños de la escuela eran mi unica satisfacción, pero luego de un día con un suplente se olvidaron de mi, que podía esperar, sólo eran niños, ellos viven el momento, aún así me molesto que toda la clase preguntarán por el otro maestro, que me compararan con el sólo se añadió a la deprecion actual.
Suspirando profundamente mientras salía caminó a casa, después de todo somos sustituibles, ¿por que sería diferente? Todos pensaban que era inútil, que todo lo hacia mal.
Nadie notó mi ausencia o pregunto como estaba al volver, no le importaba a nadie, siempre estube solo peleando por cada uno de mis logros; ya no más, estaba cansado, arto de luchar, todo lo que quería en ese momento era descansar, tal ves dormir y nunca despertar, pero nunca conseguía lo que deseaba.Estaba anocheciendo mientras mis pasos me guiaban a mi último destino, no tenía mas sentido continuar, aun así no tenía el valor para hacerme cargo de eso, así que cuando un auto se acercaba veloz, solo me quede allí, esperando a que todo terminará.
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Una llamada urgente desde emergencias informó un choque, aparentemente un peatón fue atropellado en la avenida central, como eramos los más cercanos Martín, Lucía y yo fuimos los asignados al lugar.
Al llegar no era nada espectacular, estas cosas pasaban todos los días, un peatón o conductor inprudente, mi compañera y yo fuimos los que atendimos al herido, estaba inconciente lo que no era bueno, podría tener una severá lecion espinal o trauma craneal, sangraba mucho; podía escuchar los gritos del conductor histérico siendo atendido por el tercer paramedico.
Luego de estabilizar al paciente y colocarlo en la ambulancia revisaron por alguna identificación, debían notificar al hospital la situación con un nombre para el registro.
-Masculino de 26 años, inconciente, herida sangrante en la cien izquierda, nombre Benjamin Taylor
No mucho despues ingresamos a urgencias corriendo a entregarlo al médico de turno, llenando los papeles correspondientes
-¿Escucharon lo que dijo el conductor?- hablo Martín muy bajo, solo para nosotros, negamos al mismo tiempo- esta seguro que trato de suicidarse, dice que lo vio venir pero sólo se quedó allí, esperando
Era triste como algunas personas llegaban a estar tan deprimidas, que pensaban que la muerte era la única salida; suspirando con tristeza termine el informe ansioso por volver a casa, ya casi eran las 9 p.m. y la niñera me cobraría extra si llegaba tarde.
Me había cansado de esperar el indicado y a mis 38 decidí adoptar como padre soltero, Milagros era mi pequeño tesoro, la luz de mis ojos.
Apenas tenía 2 años pero era muy inteligente, aún que eso lo decía yo, era fácil de querer siempre sonriendo o preocupándose por los demas, era mi orgullo; algun día ella y yo tendríamos a ese alguien especial que faltaba en nuestras vidas, algún día tendria alguien con quien compartirla.Ya en casa por fin, despedí a la niñera hasta el día siguiente, y cenamos con mi bebe, prepare pizza, en realidad nunca fui muy bueno en la cosina pero ella no se quejaba.
La bañe y acoste antes de hacer lo mismo conmigo; estaba triste por lo que paso con el último paciente del día, así que decidí ver como seguía antes de que mi siguiente turno empezará, ¿que daño haría sólo ver como estaba? No era algo que hiciera con todos los que atendía, pero este en particular tenía algo que me afectaba profundamente, sentía como si lo conosiera de alguna parte, tal ves sólo estaba confundido por el cansancio, si me levantaba con la misma preocupación iría a verlo solo para estar tranquilo, con la desicion tomada me quede dormido.
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Sueños en la noche
RandomEstaba anocheciendo mientras mis pasos me guiaban a mi último destino, no tenía mas sentido continuar, aun así no tenía el valor para hacerme cargo de eso, así que cuando un auto se acercaba veloz, solo me quede allí, esperando a que todo terminará.