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Narra Fanito Del Flow:

- ¡DESPIERTA MIERDA, QUE ESTAMOS ATRASADOS POR TU CULPA! - gritó mi mamita entrando a la pieza.

- Ya mami,  si eran cinco minutitos más no más. Puta que me da miedo mi maire cuando se enoja, se pone peor que yo cuando ando con cagao' de hambre. Me levanté altokemon pa que esta vieja no me weara, fui a ver la ropa que tenía y al final terminé oliendo entre dos poleras, elegí  la que estaba más pasable y me la puse.

Pa qué tanta wea si no soy mina, me puse los pantalones de ayer y partí pa abajo. "Menos mal que dejé la maleta hecha anoche, o sino ahí si que me hubiera llegao fuerte" - pensé -

Me fui hecho un peo pal patio, y ahí estaban mis viejos echando las los bolsos en la parte trasera de la camioneta. Puta que iba a extrañar el campo, las vaquitas, chanchitos, andar en caballo y el inolvidable canto de las gallinas a las 7 de la mañana.

AAAAAAH CASI, SE LA CREYERON WE.

ESTABA TERRIBLE CONTENTO, IMAGÍNENSE TODAS LAS MINITAS QUE VOY A ENCONTRAR, LOS SENDOS CARRETES QUE ME VOY A MANDAR, WEÁ WENA PO, DEHESA VOY POR VO'.


Narra María Francisca:

Domingo, a las 10 de la mañana y mi vieja me habla al oído para que me despertara.

- Vieja, ¿qué onda?- me moví  para que me soltara.

- Quisca, ¿qué onda tú? Tenemos que ir a la playa con la familia de la Natcha, apúrate y baja por fis. - putcha, verdad.

- Ya voy.- se fue y me levanté para abrir las cortinas y ventanas, caminé hasta mi closet y busqué un vestido color crema holgado, unas plataformas negras cómodas, mi tchaqueta de jeans, algo leve, total, era la playa. Después de bañarme, vestirme, maquillarme, bajé y mis hermanas con mis papis estaban ahí.

- Hasta que te levantaste.- se rió la Paz, mi hermana mayor.

- Sorry, se me olvidó poner la alarma.- caminé hasta la mesa y tomé un poco de jugo de su vaso.

- Pendex patúa.- se quejó.

- ¡Ay! Qué exagerá', Mari.- habló mi mamá, dirigiéndose a mi hermana.

- ¿Y cuándo llega la Natcha?- preguntó mi otra hermana, menor, la Isi.

- En unos minutitos más, vayan a buscar sus bolsos.- lo bueno, es que tenía el mío listo. Mi protector solar, toalla, bikini y ropa de cambio. Además de mi iPhone 6, audífonos y un libro, por si la Natcha se queda dormida.

Llegué al hall de la casa y se escutchó una bocina, la Natchi. Salí, seguida de mi familia, y nos subimos al Jeep. Obvio, saludé a la familia de mi mejor amiga.

Mi papá aceleró, y yo bajé un poco la ventana. Había mutcho viento, y si la bajaba toda, me iba a despeinar y no, o sea, cero soñao' llegar toda tchascona a Reñaca.




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⏰ Última actualización: Oct 11, 2016 ⏰

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Entre lo cuico y lo flaite.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora