Un amor mágico (hinny)

Prólogo

Algunos personajes mencionados en la historia son invención mía, los demás pertenecen a J. K. Rowling

Prólogo

La historia que les contaré a continuación, empezó hace varios años....

En un barrio a las afueras de Londres vivían los esposos Prewett, los cuales no eran personas comunes... ambos eran magos de sangre pura y aurores apunto de jubilarse. El par de esposos eran pelirrojos y de ojos cafés, sus edades no parecían pasar de los 50, y además de eso eran los orgullosos padres de Molly Weasley (de soltera Prewett) y sus hermermanos, los cuales vivían con sus propias familias.

Todo comenzó la tarde del 11 de Agosto de 1981, en uno de los callejones más oscuros de aquel barrio, en el cual se apareció una bella mujer de cabello moreno y túnica negra, al comprobar que había llegado a su destino caminó con prisa hacia la casa de los esposos Prewett. Esta mujer parecia molesta, pues la mirada que tenía, era de ira pura. Al estar al frente de la puerta de la casa sacó una vara de madera de su bolsillo y apuntó al cerrojo de la puerta

-Alohomora- susurró la misteriosa dama

Y la puerta se abrió por si sola; la mujer con cuidado entró en la casa y cerró la puerta lentamente. Al haber cerrado la puerta, silenciosamente caminó por la sala en busca de su objetivo, pero en la sala solo había muebles y porta-retratos con fotos de familiares, en las cuales, las personas se movían. Impaciente por realizar su cometido, caminó hacia el comedor, este también estaba vacío, desesperada la mujer, estaba apunto de hecharse a correr por la casa, arriesgandose a ser descubierta, pero antes de empezar a hacerlo, escuchó un grito masculino desde lo que parecía ser la cocina

-¡JULIANA, ¿PODRIAS APURARTE?, NO QUIERO DEJAR A HAGRID ESPERANDO!-

-¡YA BAJO EN UN RATO HENRRY, SOLO ESPERAME UN MOMENTO!- respondió una voz femenina desde la planta de arriba-

"¡Estupendo!"pensó la mujer con una macabra sonrisa"los dos estan apurados y distraidos, lo cual me da ventaja para terminar con sus miserables vidas"

Henrry estaba sentado en una banca de la cocina, leyendo placidamente el diario El Profeta, esperando pacientemente a su esposa pero de pronto escuchó un susurro

-Avada Kedavra-

Al regresar a ver vio como un destello verde venía hacia él desde la varita de Bellatrix Lenstrange, y lo cual fue lo último que vió antes de caer sin vida al suelo.

La dama, ahora conocida como Bellatrix Lenstrange, llena de contento por su cometido, se dio la vuelta en dirección a las escaleras para llegar a la planta alta de la casa, pero al tocar el cerrojo de la puerta, pudo escuchar unos rapidos pasos que bajaban por las escaleras y se aproximaban a la cocina, sabiendo quien se aproximaba, Bellatrix se escondió detrás de la puerta con la varita en mano lista para atacar.

Unos segundos más tarde por el marco de la puerta entró Juliana poniendose un arete

-¡Henrry, querido ya podemos irnos!-pero al no escuchar respuesta alguna de su marido palidecio de miedo-¿Henrry, estas haí?-

Pero al escuchar la puerta cerrarse detrás de ella, vio a una de los mortifagos más buscados en el mundo mágico y su némesis del colegio

-Vaya sorpresa ¿no querida?- dijo con una sonrisa y una voz arrogante-

-Pues, da la casualidad que sí Bella- dijo irónica Juliana- ¿Qué el encuentro de ex-compañeros se adelanto este año o es que ya derrocaron a Voldemort y vienes a entregarte por las buenas?-

-Dos cosas- aclaró Bellatrix- Primera: a mi señor lo respetas ¿OK?; y segundo: a lo que yo vine es a ajustar cuentas contigo-

-No ajustaré cuentas contigo hasta que vea a mi esposo-

-Esta bien, si lo quieres ver ahí está- dijo señalando al cuerpo inerte del mencionado-

-¡¡HENRRY, TÚ ERES UNA MALDITA PERR...!!-

-¡Hay querida me halagas, pero tranquila muy pronto estarás con el!-

-¿Por qué haces esto?- preguntó Juliana llorando el mar de lágrimas-

-Ambas sabemos los sentimientos de "amistad" que tiene el señor oscuro por ti- dijo cortante la mortífaga- cada vez que estas cerca de él, no se concentra y no hace las cosas bien, así que, para que no seas un obstáculo para él te eliminaré...¡AVADA KEDAVRA!-

Y así fue como la vida de la bruja Juliana acabó, Bellatrix estaba más que loca de alegría, al fin la había matado, pero su festejo fue interrumpido por el sonido de la puerta principal abrirse y cerrarse, la desquiciada mujer desapareció antes de que Minerva Mcgonagall entrara en la habitación y quedára estupefacta ante tal escena.

CONTINUARÁ...

NOTA: SI HAY MÁS DE 5 ESTRELLITAS HABRÁ UN NUEVO CAPÍTULO