Mis Dulces y Tiernos Dongsaengs - ASTRO Y TÚ

Primer clase y una nueva persona

El día había amanecido un poco frío pero dentro de aquél auditorio apenas y podías sentirlo.

Habíamos muchas personas dentro, esperando, supuse, por quien dirigiría el club este año.

SanHa, quien estaba sentado a mi lado, no se dejaba de mover y la verdad ya me estaba poniendo de los nervios.

-Puedes quedarte quieto. –Dije conteniéndome, si él hubiera sido MJ de seguro lo hubiera golpeado.

-Lo siento noona, es que tengo un poco de frío.

Lo miré un poco sorprendida, afuera estaba frío pero aquí adentro no, incluso me había quitado mi chaqueta luego de los primeros cinco minutos adentro.

-Ten. –Dije tapándolo un poco con mi abrigo, aprovechando que era bastante largo.

-Gracias noona. –Dijo sonriendo mientras se deslizaba un poco en el asiento hasta quedar a mi altura y recostó su cabeza en mi hombro.

-¡SanHa! –Exclamé al sentir su calor junto a mí, lo miré y tenía las mejillas rojas. Me hubiera parecido una tierna escena de no ser porque ese rubor no se debía al contacto entre ambos si no que mi pequeño gigante tenía fiebre. Toqué su frente con mi mano, estaba ardiendo. -¡Hey, SanHa! –Lo sacudí despacio, él abrió los ojos con un poco de dificultad. –SanHa, tienes fiebre.

-¿Mmmm? –Parecía confundido.

-Ven, te llevaré a la enfermería.

-No quiero, no me gustan los doctores.

No sé con qué cara lo habré mirado, pero enseguida se retractó y cambió su excusa.

-No quiero que pierdas tu clase de teatro.

-Asistiré la próxima vez, no te preocupes.

-Pero noona...

-Sin peros. –Lo regañé. –Si noona dice que vas a ir, vas a ir. –Me levanté de mi asiento ayudándolo a levantarse también. Antes de salir hice que se colocara mi chaqueta, no quería que se pusiera pero en el camino.

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-No se preocupes señorita ___, el joven Yoon se pondrá bien, su mal estar es debido al cambio de clima y posiblemente este estresado con las clases, pero no se preocupe. Con la medicina que le di pronto estará bien, solo necesita descansar.

-Gracias. – Dije antes que la enfermera saliera del lugar.

Me acerqué hacia la cama donde estaba SanHa hecho bolita y me pareció tan tierno.

-¿Estas mejor? –Pregunté tiernamente mientras acariciaba un poco su cabello.

Él abrió los ojos y me miró con un brillo especial en ellos.

-Sí. –Asintió para luego cerrar nuevamente los ojos, refregando más su cabeza contra mi mano. Reí enternecida, parecía un pequeño gatito en busca de atención. –Noona...

-Dime.

-Sé que querías asistir a ese club pero...

-No te preocupes por eso. –Lo interrumpí.

-...¿Puedes quedarte conmigo? –Preguntó mirándome a los ojos. –No quiero quedarme solo aquí.

-¿Te dan miedo los doctores? –Pregunté en broma.

SanHa desvió la mirada apenado y me di cuenta de que había dado en el blanco.

-Yaaa, me quedaré contigo. –Dije sonriendo.