12. In articulo mortis.

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"La vida es una serie de colisiones con el futuro; no es una suma de lo que hemos sido, sino de lo que anhelamos ser."
José Ortega y Gasset.

Wakanda, Palacio de T'Challa.

Steve, Sam y Sharon se adentraron presurosos al magnífico palacio del rey de Wakanda, quien los recibió conmocionado.

—Me hubiera gustado darles una mejor bienvenida

—No se preocupe por eso su alteza. ¿Qué es lo que ha ocurrido?

—Acompáñenme— tomaron un ascensor para llegar al área del laboratorio. Al arribar, un grupo de científicos corrían de un lado a otro  —.La cámara criogenica se ha desbalanceado, de un momento a otro comenzó a fallar: hoy por la mañana se percataron de los cambios drásticos en su temperatura— le dirigió una mirada sería a quien una vez fue el Capitán América —si esto persiste el sargento Barnes no lo resistirá.

Rogers se quedó pensando un breve instante cuando las alarmas se activaron —Si tienen que descongelarlo háganlo ¡ya!

—¡Los signos vitales están cayendo ! ¡lo estamos perdiendo!— anunciaba frenéticamente uno de los científicos. Desconectaron la máquina y se apresuraron a sacar al soldado. Lo colocaron en una camilla arropándolo con sábanas térmicas —Busquen una vía permeable y preparen equipo para colocación de catéter venoso central— los demás monitorizaban sus signos vitales. No pasaron cinco minutos estando a mitad de procedimiento cuando el monitor anunció un infortunio: asistolia.

—¡Inicien maniobras de reanimación!— ordenaba uno de los hombres de bata blanca. Uno de los hombres inició con compresiones y otro se hacía cargo de la vía aérea. El monitor comienza a marcar taquicardia ventricular.

—Creo que será mejor salir de aquí— exclamó apaciblemente el anfitrión pero Steve se quedó ahí, observando la escena con impotencia.

—Resiste hermano— murmuraba para sí mismo con la esperanza de que sus palabras llegarán a Bucky

—Apliquen 1 mg de adrenalina y preparen el desfibrilador— el personal del laboratorio se esmeraba en reanimar al soldado. Sin embargo habían pasado 15 minutos y no había respuesta

—Carga a 200 Joules—continuaron otro ciclo y aplicaron otra dosis de adrenalina —¿Listo? Fuera tu, fuera yo, fuera todos ¡Despejen!— aplican la primera descarga sin resultado, continúan otro ciclo y aplican otra descarga de 300 Joules, sin embargo todas las maniobras son inútiles, de nueva cuenta el monitor cambia el ritmo: asistolia.

Steve cubre su rostro, no puede creer lo que está sucediendo, su mejor amigo no puede morir. Los hombres de bata blanca han seguido adecuadamente los protocolos, sin embargo ya habían rebasado el límite de tiempo... ya no podían hacer nada más por el sargento Barnes.

—Hora del deceso: 23:48 hrs— el ex capitán ya no pudo contener sus lágrimas y se dejó caer al suelo. Las memorias vividas con aquel hombre llegan fugazmente. Todo está en silencio.

De pronto un destello escarlata aparece en medio de la sala, expandiéndose y cubriendo a Bucky Barnes, un instante después observa como su amigo comienza a toser y a tomar una bocanada de aire. Steve se acerca y mira los ojos desorbitados de quién hace unos minutos yacía muerto.

—¿Steve?— el aludido estaba desconcertado ¿cómo era posible?. Al recordar aquellos destellos escarlatas supo la respuesta: Wanda Maximoff.

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