Este one shot se me ocurrio luego de ver el mv blood sweat and tears, alucino a Jimin.
Disfruten lo ^^
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Simplemente me era imposible apartar la mirada de él. Su piel blanca brillaba con las luces de colores del lugar. Su cuerpo delgado, se movía al ritmo de la música. Sus caderas trazaban círculos mientras que sus manos recorrían su cuerpo, pasando por su pecho, hasta llegar hasta su entrepierna y ahí las dejaba por unos segundos. Deseaba ser yo quien le tocara. El bulto en mi pantalón empezaba hacerse demasiado evidente. En mi vida creí calentarme por ver a un tipo bailar, pero ahí estaba él bailando más sensual que cualquier mujer del lugar.
Más jodido no podía estar, sacudí mi cabello ante tales pensamientos, me levante, pague el trago que ni siquiera bebí y salí con todo y mi erección de ese antro. Hacia frio esa noche, me coloque la chaqueta y pensé en llevarme alguna puta a casa, de ninguna manera quería acabar con mi erección yo mismo. A metro y medio vi a unas chicas riendo como locas, no estaban de tan mal ver, estaban algo ebrias, sería más fácil convérselas en ese estado, tal vez hasta aceptarían un trio.
Camine hacia ellas y antes de poder hablarles, el chico de antes apareció frente a mí. Era un deleite para mis pupilas, me pareció incluso más hermoso ahora. Recobre la razón al oír las carcajadas de aquellas chicas. Debía seguir con el plan, al menos esa era mi intención hasta que me topé con la sonrisa del chico. Parecía que me sonreía a mi «sí, claro, serás idiota» me dije. El frio arrecio y de algún modo había perdido el interés en todo, di media vuelta y comencé a caminar rumbo a mi casa.
- Hey – escuche tras de mí. Confundido, gire para encontrarme a pocos centímetros con el rostro del sujeto
- ¿Es a mí?
- ¿vez a alguien más aquí? – era cierto, ya no había nadie cerca. Alce los hombros restándole importancia – Eres raro – y rio
- Tú has sido quien ha llamado a un total desconocido y ¿dices que yo soy el raro?
- Ja, ja, ja, tienes razón, no fue muy cortés de mi parte. Soy Jimin.
- Pues mucho gusto, Jimin. ¿Y qué es lo que quieres de mí?
- No, no, no – movía su cabeza de manera de negación – yo te he dicho mi nombre, tú debes hacer lo mismo – clavo su mirada en mí y sonrió de nuevo, solo que esta vez había algo diferente. Él coqueteaba conmigo.
- ¿Por qué debería? Tú has querido decirme tu nombre, pero yo no veo razón alguna para hacer lo mismo. – sabía lo que ese chico buscaba y no pensaba ponérselo fácil.
- Dices eso, pero note como me comías con la mirada allá dentro. ¿Te ha puesto duro mirarme bailar? – se acercó peligrosamente. Percibí en su aliento una mezcla de alcohol y menta. Hice un gran esfuerzo por no abalanzarme a esos tentadores labios.
- Pensé que eras una chica, digo alguien con un cuerpo tan delgado y frágil, que más podía pensar – asegure mientras me alejaba de él y metía mis manos en mis bolsillos.
- Bueno, puedo fingir ser una chica si es lo que tú quieres. Puedo ayudarte con esto – di un pequeño salto al sentir su mano sobre mi pene. Me tomo por sorpresa, pero pude reponerme rápidamente y le tome por el mentón.
