Entramos en la tienda. El interior está lleno de gente mirando estanterías que contienen todo tipo de artículos. Sus paredes están hechas en piedra, y el suelo y estanterías de madera oscura.
Cada zona de la tienda tiene un grupo de artículos. En unos sitios están las espadas, en otros las hachas, en otros las pociones y así hasta donde alcanza la vista.
En la zona de espadas veo a un hombre enorme con un pechazo amplísimo y barba. Está levantando una espada y volteándola, como si probase la sensación que le da tenerla en sus manos. Creo que el individuo este podría coger la espada y plegarla para guardarla en el bolsillo.
En otra zona hay una mujer consultando un libro grande cuyo lomo es tan largo como medio cuerpo mío. Anda pasando hojas y mirando atentamente sin levantar la vista. A su alrededor tiene más libros de todos los tamaños. Debe ser una gran lectora.
Avanzamos hacia la sección marcada como "ropas y ropajes" y rápidamente aparece entre las mesas de objetos un hombre montando en monociclo que se acerca a bloquear nuestro paso. Es comercial del almacén. Sin bajarse del aparato y mientras mantiene el equilibrio moviendo ligeramente los pedales hacia delante y atrás, nos pregunta.
—¿Estáis buscando algo?
—Sí, estamos buscando algo de ropa —dice mi extraño amigo señalándome.
El tendero me mira.
—Acompañadme.
Nos hace seguirle mientras él pedalea entre los pasillos hasta llevarnos a una sección con ropa de estilo clásico. Son prendas la mayor parte de ellas holgadas, de todos los colores. Algunos de los conjuntos son combinaciones de marrones claros y oscuros con colores verdes, algo así como los que se podrían encontrar en un bosque. Otros conjuntos son más coloridos y alegres.
El comercial saca un conjunto. Es un pantalón, una especie de vaqueros bastante moderno, y algo así como una sudadera deportiva pero un poco más larga y con capucha de color rojo. En el pecho tiene un texto que pone "Dragon Academy" con un dragón dibujado, otras frases más pequeñas y números. De calzado, saca de entre las estanterías una especie de deportivas, el pie izquierdo con cordones violetas y el derecho negros. Molan.
—Nos lo llevamos —apunta mi coleguilla.
—Este pack lleva incluido una espada de gama media a escoger. Acompañadme.
Lo seguimos hacia la sección de espadas, con mi nueva ropa ya puesta. La gris de oficina la tiro en la primera papelera que me encuentro por el camino. Los zapatos modelo oficinista de planta baja también, por supuesto. ¡Qué gran sensación!
En la zona de las armas ya no está el hombre enorme de antes. En su lugar hay una anciana con un arco en las manos. Lo está tensando con tres flechas en la cuerda y mira fijamente al fondo, como haciéndose una estimación de cuál sería la trayectoria de las flechas.
—Aquí tenéis. Con el traje podéis escoger entre estas espadas —dice mientras señala unas que están colocadas en uno de los estantes—. Podéis elegir entre la iEspada, El Mandoble de la Justicia Infinita o el Estoque Funesto de la Eternidad.
—Me llevaré el Estoque Funesto de la Eternidad. —Escojo basándome en que es lo único que seré capaz de mover. Las otras parecen muy pesadas. Además, el nombre es bastante convincente, suena muy épico. Está claro que esta gente sabe vender.
Mi nuevo amigo saca unas monedas de plata y se las da al tendero. Comprarme ropa es un bonito detalle por su parte. Le miro y sonrío. Está claro que ha visto en mi mirada un gesto de agradecimiento y asiente con la cabeza. Sin más contemplaciones salimos de la tienda.
Todas las imágenes que veáis en Sándwich de Dragón forman parte del cómic que estoy haciendo de la novela, así que no son sacadas de Internet, sino mías.
De hecho, cualquier cosa que veáis en la obra pertenece exclusivamente al universo de Sándwich de Dragón.
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Sandwich de dragón
Adventure¿Alguna vez has probado un sándwich de dragón? ¿Has luchado contra piratas o bebido cerveza fantasma? ¿Creíste posible crear un golem o bailar con zombis mientras tienes que soportar los insorportables versos de La Muerte? Surfea con los protagonist...