Can I See You [ChanSoo]

Capítulo 7

Chanyeol tocó la puerta de su antigua casa, su madre no tardo mucho en aparecer. Los ojos de la mujer se iluminaron al ver a su hijo ahí de nuevo, hacía mucho tiempo desde la última vez que lo vio, se lanzó sobre él para abrazarlo fuertemente.

—Mamá estas asfixiándome —se quejo Chanyeol con una sonrisa. Su madre se alejó un poco haciéndose a un lado para que pudiese pasar.

—Lo lamento, no te he visto en un tiempo

—Lo sé, perdón. El trabajo es agobiador, ya lo sabes

—Tu padre me ha dicho que has estado saliendo temprano

—Sí —asintió—. Pero el tiempo que me sobra lo aprovecho con Kyungsoo

—¿Kyungsoo? –él asintió de nuevo, su madre lo miró unos segundos en silencio–. Chanyeol, cariño...

—No digas nada –la interrumpió.

—Pero... —la señora Park decidió no continuar al ver la mirada fulminante de su hijo—. ¿Tienes hambre?

—¿Me invitaras a comer?

—He preparado uno de tus platillos favoritos —Chanyeol sonrió asintiendo.

.

La señora Park lo observó con atención, preocupada porque su hijo no estuviese alimentándose bien.

—¿Esta rico?

—Como siempre —sonrió levantando su mirada del plato para poder mirarla—. ¿No piensas comer?

—Hmm, no —ella negó con la cabeza.

—Creí que querías que comieramos juntos –Chanyeol frunció ligeramente el ceño.

—En realidad quería verte comer.

—¿Por qué?

—¿Has estado comiendo bien?

—Te he dicho que si  —suspiro.

—Es sólo que luces más delgado

—No entiendo porque dicen eso, estoy bien.

—¿Dicen?

—Mi vecina ha dicho lo mismo, incluso me ha llevado comida.

—Lo sabía —Chanyeol bufó—. Chanyeol, me preocupo por ti...

—Te he dicho miles de veces que no tienes porque, estoy bien.

—Pues no me es suficiente, quiero que vengas por lo menos una vez a la semana.

—¿Para qué?

—Quiero ver que por lo menos un día duermas y te alimentes correctamente.

—¡Que estoy bien!

—¡Park Chanyeol vas a venir porque soy tu madre y te lo ordeno!

—Soy un adulto

—Pero nunca has dejado de ser mi bebé, por favor –rogó mirándolo suplicante.

—Esta bien.

Chanyeol termino de comer en silencio, su madre no quiso decir nada más, sabía lo mucho que le molestaba el que siempre que lo viera hablara de lo mismo pero aún así seguía haciéndolo, siempre había sido tan insistente.

—Debo irme —avisó cuando terminó de lavar los platos—. Vendré todos los viernes, ¿estas bien con eso?

—Sí, por favor cuídate

—Lo haré, lo prometo.

—Y por favor, no estes enojado cariño —susurro su madre quien lo abrazo fuertemente de nuevo. Chanyeol la envolvió entre sus brazos correspondiendo a su abrazo, sintiendo la calidez de los brazos de su madre, hacía mucho tiempo desde la última vez que la abrazo.