¿No tienes miedo?

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Xiumin con ocho años de edad se consideraba un niño valiente, no le tenia miedo a los fantasmas ni a los monstruos, incluso no tuvo miedo cuando sus padres le dijeron que se iban a mudar y que tenia que despedirse de sus amigos, claro que no, el siempre era valiente, incluso lo fue cuando al llegar a ese pueblo se encontró con una casa tenebrosa y grande al que ahora llamaría ''Hogar''.

El ahora vivía en un pequeño pueblo con mucha vegetación, perfecto para los híbridos como el, un híbrido Hamster . 

~Aquella noche lluviosa después de la mudanza vio por primera vez esos hermosos ojos~

Min se había despertado a las 2am por unos ruidos que se oían del otro lado de la ventana de su habitación, el pequeño se aventuro y corrió la cortina para ver que es lo que hacia ese ruido, grande fue su sorpresa al encontrar a un niño precioso del otro lado.

-Grrr! ¡niño! tengo hambre voy a comerte!!!- Dijo el infante del otro lado de la ventana. A Minseok se le iluminaron los ojitos ''Encontró a su pareja'' . Sus padres hace poco le contaron que los híbridos tenían una pareja para toda la vida y que aquellos que lo encontraban se volvían los seres más felices, algunos híbridos reconocían a su pareja al instantes y otros se daban cuenta con el tiempo... pero siempre, siempre terminaban juntos.

Y al ver a ese hermoso niño pelinegro desde el otro lado de la ventana su corazón retumbo en su pecho y todo su mundo se ilumino. 

Al notar que el niño se estaba empapando por la lluvia rápidamente abrió la ventana, Min se sorprendió cuando el hermoso niño se convirtió en un pequeño lobezno tirándose encima de el con la intención de hacerlo caer... Obviamente Minseok no se callo ya que ese lobito era muy ligero pero el pequeño lobo enfadado porque no pudo derribar a su presa se volvió a convertir en un niño logrando al fin tirarlo al piso.

-Grrr!!! -Rujió el niño pelinegro. En aquel momento Minseok hizo lo que cualquier niñito haría si tuviera en frente tan preciosa criaturita... Tomar su cabezita entre sus manos y besar una de sus mejillas.

El pelinegro frunció el entrecejo mientras sus mejillas se teñían de rojo, esta confundido y avergonzado.

-¿Porque me besas? debes temerme, yo doy miedo, te voy a comer.

Min aun se encontraba en el piso con su príncipe encima de el... Lo abrazo.

-Dijiste que tenias hambre... puedo hacerte un sándwich si quieres.

El niño lindo se lo pensó por un momento, un sándwich sonaba bien.

-Si quiero...

-Bien.- Minseok sonrió feliz mostrando sus encías, una sonrisa que al otro niño le fascino, el pelinaranja beso una vez más la mejilla el otro niño y  lo hizo levantarse. busco una toalla para que se secara, saco de su ropa su adorado piyama de lobo que le regalo su tío Lay y se lo paso, contemplo como los ojitos del pelinegro se volvían medias lunitas al sonreír, ''Le gusto mucho ese piyama''.

-Sécate bien y ponte esto, yo voy a hacerte los sándwiches. 

Y sin esperar a que el otro contestara se fue a la cocina, preparo tres grandes sándwiches dos para su príncipe y uno para el (No tenia tanta hambre), los puso en un plato y se fue a su habitación quedando asombrado por lo hermoso que se veía el otro niño. Se sentó a su lado, saco un sándwich y le paso el plato al otro chico para que comiera.

-Gracias....

-Eres muy lindo, ¿Como te llamas?, yo soy Minseok.- hablo Min mientras hacia su primer bocado.

-Me llamo Sehun... Y Gracias pero yo no soy lindo, yo debo dar miedo.- Respondió también haciendo un bocado al aperitivo, estaba rico.

-Pero... Bueno... Si das miedo- Dijo Minseok, no quería hacer enojar al otro niño y que se fuera. Sehun le regalo una gran sonrisa, ese comentario le hizo muy feliz.

GRRR! [XiuHun/SeXiu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora