Michael me mira fijamente después de haberme dando el beso en la mejilla, después me sonríe y susurra otra vez mi nombre entre sus labios; "María". Tenía que admitirlo, sonaba bien, quizás con el tiempo me acostumbraría a este nuevo trato y tal vez superaría todos mis miedos y sufrimientos.
-Bien. De ahora en adelante, ya no trabajarás para mí. Llamaré a Janet y le diré todo. Quiero que te pongas cómoda, le diré a Karlota que te sirva el desayuno y que... -Yo no lo dejé terminar. Le pongo mi dedo índice en su labio expresando silencio. Él se queda serio.
-¿No vamos demasiado, rápido? -Dije sin más, preocupada con la situación -Karlota y Karla pegarán el grito del cielo y me dirán hipócrita, egoísta y malcriada.
-¡Oh María, vamos! Si ellas hacen eso, las voy a despedir. Vamos, te haré cambiar y anunciaré en una reunión general. De ahora en adelante muchas cosas cambiaran aquí -Michael pasa una mano sobre mi hombro, abrazándome y nos vamos hacía el salón principal. Le dijo a Josue; el electricista que nos acompañara mientras que al Mayordomo: Urbano, le indicó que le dijera a las demás chicas que fueran al salón a reunirse.
Cuando vi a Karlota y a Karla, observé sus caras. Sus bocas se les caía de la sorpresa que presenciaron en ese justo momento, porque Michael me tenía de su agarre. Celeste estaba muy normal, de hecho; estaba muy neutra.
-Bien, los reuní aquí porque tengo dos cosas importantes que decirles: Una, mi hermano Jermaine se recuperó satisfactoriamente y la fiesta de ayer, le agrado mucho. Mil gracias. Dos... -Hace una pausa y voltea a mirarme- María, ya no trabajará más aquí-, Karla y Karlota colocaron una sonrisa maquiavélica-porque ella, será mi esposa y la madre de mis queridos y futuros hijos. Se les cae la cara cuando Michael anuncia tremenda noticia.
-¡Pero señor! -Karlota exclama- Usted debe tener una mujer de su estatus y su porte-. Michael se puso tan serio, que frunce el ceño y la mira.
-Usted no tiene derecho de decirme con quién debo o no casarme. Es mi vida, yo sé de responsabilidad y sé porque la estoy eligiendo a ella.
-Pero ella lo odiaba. -Habla Karla en defensa de Karlota.
-No voy a discutir el tema con ustedes señoras. Aceptan mis reglas o recogen sus cosas y se largan de mi casa, ¿entendido? -Michael, da su veredicto final, y muy enojadas ellas, se dieron la vuelta y fueron a la cocina.
-Michael, creo que la embarramos... fuiste muy duro con ellas -murmuro y me cubro el rostro con las manos.
-Si te molestan, me dices. Y aceptan las reglas o se van. -Responde firmemente- Vamos a llamar a Janet, necesito que venga para acá ahora mismo -yo sólo le sigo el paso, vamos a su cuarto y me quedo en umbral de la puerta. Él se sienta en la cama y después toma el teléfono, pero me mira serio-. ¿Que pasa María?
-Nada... nada -Balbuceo mientras camino hacía él a paso lento y me siento en una esquina de la cama. Él me sonríe y se dispone a hacer lo que iba a hacer; tomar el teléfono y llamar a su hermana. Esperamos a ver si contestaba, sonaba el pitido y al tercer timbrazo, contesta.
-¿Bueno? ¿Michael?
-¿Aló? ¿Janet?
-Sí, con ella. ¿Qué pasa hermanito, no me digas que María te rechazó?
-Cálmate, no hagas suposiciones todavía... de hecho te tengo buenas noticias.
-¡Acepto! -Michael frunce el ceño ante severo grito, que hasta yo alcancé oír, y sin poder remediarlo me carcajeo un poco.
-Sí, ella acepto. -Me hace una seña para que me acercara a él y eso hice. Con un poco de dificultad a decir verdad, porque estaba nerviosa. Toma mi mano y deposita un beso sobre los nudillos de ésta.
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Casados a la fuerza © [TERMINADA] #Sakura2019
Romansa"No podía verlo, me daba ira máxima, con sólo sentir su presencia". Lo que ella no caía en cuenta, es que del odio al amor, sólo hay un paso. María, la criada mas joven de la mansión Neverland, donde actualmente vive Michael Jackson, el famoso c...