Capitulo VIII

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Sentimientos encontrados.

Narra itachi :

Al notar que 'él tenía bragas de mujer' Sonreí, seguro esto era obra de Tayuya, no creo que Sakon trajera una pantaleta en sus bolsillos .. Aunque pensándolo bien ... Tal vez, después de todo, él era todo "un donjuán" ¿Oh no? .

Aún deslizando mi mano bajo el vestido, comencé a bajarle aquella pequeña prenda blanca, al despojarlo de ella la arroje al suelo volcando nuevamente toda mi atención en el 'indefenso rubio' el cual me lamía sin cesar el oído haciendo que mi pene eloqueciera por completo, mientras sentía que sus manos recorrían el largo de mi espalda.

Lo levante y le arranque aquel vestido que solo entorpecía mi vista, prefería verlo desnudo, me parecía lindo desde la primera vez que le vi, así que esta noche no perdería el tiempo, odiaría que volvieran a interrumpirnos.

Me quite la camiseta dejando mi pecho al desnudo, me desabroche el pantalón mientras Deidara se recostó observándome desde la mullida cama, sonreía travieso lamiéndose su dedo índice tratando de seducirme y vaya que lo conseguía.

Subí a la cama acomodandome entre sus piernas, él estaba un poco ruborizado por todo el alcohol que había bebido, tal vez debería detenerme, no me entusiasmaba tanto estar íntimamente con una persona totalmente ebria.

Pero cada vez que trataba de alejarme él conseguía seducirme de una u otra forma, al tenerlo desnudo "frente a mí", me acerque soltando su cabello viento como brillaba cual rayos de sol, una vez que lo hice, mis labios fueron directo a atacar su cuello, su pálida piel parecía llamarme.

Él metía sus dedos entre mi cabello masajeando la zona de una manera que hacia erizar mi piel, di una suave mordida en su cuello disfrutando de su dulce fragancia, lo que lo hizo soltar un gemido casi imperceptible.

Fui deslizando mis manos por el largo de su torso sintiendo como se removía sobre la cama, parecía encantarle mi tacto, comenzó a bajar sus manos intentando liberar mi miembro, el cual moría por algo de atención, travieso hizo que sus extremidades me proporcionaran un delicioso masaje por el largo del falo, era tortuoso lo lento que lo hacía, me volvía loco a pesar que sólo estaba tocando sobre la tela.

Me incorpore despojandome de mi pantalón y luego de mi bóxer, acto seguido le di la vuelta colocándolo de rodillas en la cama y luego lo incline hacía enfrente posicionandome detrás de él, pasando mi lengua por la nívea piel de su espalda, sintiendo como flexionaba su columna vertebral hacía enfrente, aún 'en cuatro'.

Observe su trasero, se veía tan delicioso que me acerque sin pensarlo demasiado y me dispuse a pasar mi lengua sin cesar por su cavidad anal sintiendo como se iba humedeciendo por mi saliva, sus gemidos eran cada vez mas constantes, su cara estaba totalmente enrojecida, no pude esperar mas, introduje mi dedo índice y medio comenzando a preparar su entrada.

¿Mi Primo Es Homosexual? .. (ItaDei)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora