Capitulo 39: La misma piedra.

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"The truth turned out to be a lie"

The Last Song-McFly

Que se parase el tiempo, que repitiésemos el mismo día miles de veces o cualquier cosa. Yo quería despertarme con Dougie a mi lado. Siempre. Estaba harta de ignorarlo, no querer hablar con él o echar mis sentimientos a un lado. Lo quería, y siempre lo había querido por mucho que intentase engañarme.

Después de la llamada de Alison, nos habíamos vuelto a quedar dormidos. Eran las once de la mañana cuando él abrió los ojos para mirarme. Me dio un pequeño beso y me sonrió.

—Tenemos que bajar a desayunar.

—No... —dijo, y empezó a darme pequeños besos.

—Dougie...

—¿Qué quieres que haga si me gusta demasiado mi novia?

—Yo no soy tu novia.

—Pero hoy lo serás —me senté en la cama y el siguió dándome pequeños besos por los hombros—. Ven a casa a las seis.

—Eso suena muy cruel.

—¿El qué?

—Ven a casa a las seis que ya habré dejado a la otra.

—Bah, me da igual.

—Bajo yo primero y tú después. Si no se lía.

—Estupendo.

◘◘◘

No había ni llegado al comedor y ya se oían las voces ¿Pero estos se habían acostado? Me quedé parada en la puerta. Danny y Harry con vasos llenos de café, estaban cantando canciones que ni ellos entendían, no se debe de hablar con la boca llena de comida.

—¡ANNEEEEEEEEEET! —gritó Danny, después de llevó un pescozón de parte de su hermana, por llenarla de croasan.

—Eeeeeeee —empezó Harry—, eeeeeeeeeeeeEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE.

—ANNEEEEEEET —concluyó Danny. Me senté en la mesa avergonzada.

Jazzie, Vicky, Carrie, Georgia e Izzy se habían cambiado de ropa, pero es que Danny y Harry seguían con los trajes puestos.

—Voy a levantarme a por... —dije.

—No —me dijo Danny—, si tengo yo aquí —me puso delante un plato lleno de cruasanes, y bollería. De repente Harry volvió a gritar.

—ENANOOOOOOOOOOOOO.

—EEEEEEEEEEEEEEEEE.

—ENANOOOOOOOOOOOOO.

—EEEEEEEEEEEEEEEEE.

—ENANOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO.

Ellos solos se hacían los coros. Me giré para mirar a Dougie mientras se acercaba a nosotros. Cuando volví la mirada a la mesa, Jazzie me miraba sonriente, pero una sonrisa de: ¡Já te he pillado! ¿Tanto se me notaba? Jazzie susurró algo al oído de Vicky, y Vicky al de Carrie. Las tres me miraban demasiado sonrientes. Dougie se sentó a mi lado y me cogió la mano debajo de la mesa.

—¿Dónde has pasado la noche que vienes todavía con el traje? —le preguntó Danny con la voz todavía elevada.

—Me quedé durmiendo en el jardín —todos reímos, pero yo, a diferencia de todos, sabía la verdad, y vaya buena excusa que se había buscado.

—¿Solo? —le preguntó Vicky.

—Contigo, ¿Ya no te acuerdas? —todos volvimos a reír, menos Danny, que todavía tenía el alcohol en la cabeza y le costaba pillar las cosas rápido.

No tienes que decir nada (McFly)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora