#MALOS El Origen | COMPLETA

2. Hola, nena (II)

Cuando Kylie sale del auto de su padre, se pregunta cómo es que tiene tan poca suerte y no puede andar en un auto propio.

¡Es que la vida es muy injusta! Hay chicos que desde antes de sacar su licencia de conducir ya tienen su propia movilidad, van con ésta a la escuela y no les importa transgredir las normas porque siempre salen airosos con algún billete que pasan a escondidas al agente de policía que los detiene en algún semáforo.

Aunque esas son minorías.

Ella tuvo la mala suerte de estar entre el montón, donde sobresalir se convierte en una tarea más difícil.

Pero no imposible.

Mientras camina con sus zapatos repiqueteando en el concreto que da entrada a la escuela mientras otro par de chicos se pasan a su alrededor intentando mirar por debajo de su falda, se encuentra en la entrada con dos caras conocidas: una de ellas es una chica rubia, algunos tonos más oscuros que Kylie pero ésta es más alta y tan delgada que sus piernas parecen temblar con el viento. Viste un mameluco azul que le llega hasta la zona baja de los muslos, un short que apenas se puede ver y en sus mejillas pálidas sobresalen pecas que hacen juego con sus ojos color miel. Su nombre es Carter.

La otra chica es un poco más baja, de altura intermedia entre ambas rubias. Su cabello cobrizo es lacio como sólo químicos fundidos en formol podrían dejar. Cuando Kylie la ve, siempre piensa lo mismo: Sus ojazos verdes son tan poco reales como su busto prominente. (La operación de pecho está muy de moda entre las adolescentes que rozan la mayoría de edad). Viste pantalones largos sueltos color rosa, ajustados a la cintura y un top blanco que muestra su ombligo perforado y parte de sus hombros.

-¡Jess!-la saluda con una sonrisa falsa y apenas un toque en su hombro izquierdo. No vaya a ser que se les desgaste la piel por demasiado contacto-. ¡Carter!

Ambas destacan ruidosos besos hasta que Kylie se posiciona en medio de ambas. Las tres se abren paso por las escaleras en el ingreso a la escuela, donde todos los chicos se apartan para ver su sincronizado pasar, sus mochilas a juego, sus carpetas de Hello Kitty y sus intensos perfumes de alguna famosa popstar.

Son un grupo de amigas un poco dispar que hacen lo posible por sobresalir en la escuela, todas por igual. Entre sí, fantasean con arrancarse los ojos con sus largas y postizas uñas, sin embargo les conviene mantenerse juntas ya que en equipo son un clan mucho más poderoso dentro de la preparatoria de Iconic.

Por separado no son la gran cosa pero juntas se complementan.

Es envidiable el modo en que muchos chicos se detienen para relamerse mientras ellas fingen que no les interesan. Es envidiable la bronca que nace en muchas chicas al quedar embobadas con un estilo que nunca podrán tener. Si bien Kylie es de los adolescentes "del montón", sus amigas son dos adineradas muchachas; el punto de posicionarse en tanto líder del grupito le da una chispa de poder.

Incluso una parejita que se besa contra los casilleros detiene su muestra pública de cariño para mirar de reojo a las populares muchachas.

-Todavía no me lo creo: Rupert está saliendo con esa mojigata pudiendo encontrar un partido mucho más a su altura-declara Carter sin la decencia de saber si los chicos han podido escucharla o no.

-Creo que tú estas a su altura-le responde Kylie-, incluso lo superas.

-¡Oh, gracias!-exclama Carter asombrada por el alago.

-En verdad lo digo-prosigue la rubia-: Él nunca estará a tu altura. Tú eres una jirafona de dos metros y medio.

Jess suelta una risotada cuya voz cantarina resuena en los oídos de las tres y ni siquiera para destornillarse de la risa, pierde su glamour.