-Hoy Jacob y tú trabajareis en la oficina-me dijo Richard la mañana siguiente. Ayer había disfrutado un montón del tiempo que había pasado con él, hasta que se había ido sin despedirse.
-¿En la oficina?-pregunté frunciendo el ceño, dejando a un lado lo ocurrido ayer con su estúpido hijo
-Sí. Hay un montón de manuscritos que no sé si incluir en la editorial. Me gustaría que los leyerais juntos, los corrigierais y los valorárais.
-¿Como editores?-pregunté y asintió-Oh, me encantará-dije y lo sentía de verdad.
-Me alegra oír eso-dijo Richard dándome un golpecito en el hombro, y a continuación miró su reloj-Jacob ya estará en vuestra oficina, Serena te acompañará.
Atando cabos descubrí que Serena era la secretaria. Era muy guapa, e iba vestida con una americana y falda grises que en otra persona quedarían anticuadas pero en ella quedaban realmente increíbles. La camisa blanca resaltaba sobre su piel morena casi negra, no parecía de aquí, tenía una belleza tan característica que te daba hasta rabia.
Serena me guió hasta una oficina, y entró trás de mi. Las luces estaban apagadas y no había nadie.
-¿Dónde está...?
-Tenemos un problema con Jake-dijo poniendo una expresión de culpa por no haberlo dicho antes.
-¿Le ha pasado algo? ¿Está bien?-pregunté sin poder evitarlo.
-No sé qué decirte...Ha llamado hace un rato diciendo que hoy no le sale del culo venir, palabras textuales-aclaró, y puse cara de preocupación-no sonaba muy bien.
Resoplé, Jake era un problema con patas, siempre, a todas horas.
-¿Puedes ir a su casa? Habla con él e intenta traerlo hasta aquí, si su padre se entera...
-No sé si me hará caso a mi...
-No suele hacerle caso a nadie, pero tú eres diferente, te veo diferente-dijo sonriendome.
-¿Eso es bueno?
-Sí-dijo con una cálida sonrisa.
Puede que tan solo fueran intentos absurdos de la chica para convencerme, pero tenía que ir.
-Está bien, ¿tienes la dirección?
-Sí-dijo mientras la consultaba en una agenda-Ten.
-Gracias-y salí pitando hacia mi coche(más bien el coche de mi madre) mientras esperaba que ni Richard ni Susan me vieran salir.
La casa de Jake quedaba a unos quince minutos desde Books are Dreams, me puse mi música e intenté relajarme.
Cuando llegué me asombré de que Jake vivía en un edificio super elegante, aunque no sabía por qué, era lo más normal, teniendo en cuenta que su padre era el dueño de la empresa. Apostaba a que tenía piscina. Llegué a la puerta del portal, y antes de timbrar se abrió la puerta en mi cara. De ella salió un chico rubio.
-Perdona, no te había visto.
-No pasa nada-le respondí con una sonrisa.
-¿Vives aquí?
-No, vengo a ver a...un amigo.
-Ah, bueno. Espero verte más veces por aquí.
-Lo mismo digo-respondí sonriendo. Aunque deseaba no tener que volver a hacer entrar en razón a Jake.
Entré al ascensor y marqué el último piso, rodé los ojos, era previsible que Jake vivía en el ático, el que probablemente tuviera mejores vistas.Llegué a su piso y respire hondo. Luego timbré. Dentro no se oía ni un solo ruido, esperé oír la voz de Jake maldiciendo porque alguien le molestara, pero ese sonido nunca llegó. Volví a timbrar, ya que me estaba preocupando, seguramente estaría durmiendo, pero ¿y si le había pasado algo?. La puerta se abrió y ni miré quien estaba en la puerta, mi mirada se fue a la enorme estantería que se veía nada más entrar en el piso-o más bien pisazo-,y la cual abarcaba toda la pared. Supongo que sería una de tantas ventajas de que tu padre fuera el dirigente de Booms are Dreams.
-¿Quién eres?-me preguntó.
Recordando porque estaba aquí me dí cuenta de que no era Jake quien me había abierto la puerta, sino una chica. Era rubia, y tenía unas piernas kilométricas. Tan solo llevaba puestas unas braguitas y una camiseta corta estilo sujetador. Vaya, buen atuendo para abrir la puerta en una casa que no es la suya...o eso creía. Alomejor Jake no me había contado todo. ¿Sería Monica?. O alomejor tan solo me había equivocado...
-¿Eres muda o algo?-preguntó la rubia, definitivamente, no me caía bien.
-¿Está Jake?-pregunté con el tono más frío que pude, mirándola directamente a los ojos.
-Está durmiendo aún, pobre, estará cansado después de todo lo que hemos hecho anoche-dijo riendo.
-Ah bueno, interesante-dije rodando los ojos. Esta tía pensaba que se podía reír de mí, pero no se lo iba a permitir-Necesito hablar con él.
-Pues lo siento, pero no va a poder ser.
-¿Por qué?-dije desafiándola.
-¿Qué pasa?-dijo un somnoliento Jake frotándose los ojos, Descubrí que dormía sin camiseta. Llevaba unos pantalones de pijama y unas zapatillas. Tan solo eso. Mi mirada se paró en su pecho durante un segundo, sus abdominales... Aparté la mirada hacia su cara, puesto que estaba enfadada y demostrarselo mientras le miro el pecho no sería buena idea. Pero estaba guapísimo, aun con el pelo despeinado y acabado de despertar.
-¿Lis?-dijo mirándome y viniendo hacía mí ignorando a la rubia.
Beth 1-Rubia 0.
-¿Qué coño haces aquí? Deberías estar en las oficinas Jake-dije poniendo mala cara-Serena me ha mandado a buscarte porque...
-Que pesada eres chica-me interrumpió la rubia y se giró hacia Jake-Siento haberle abierto.
En ese momento me preocupó que Jake se pusiera de parte de esa rubia, pero en el fondo sabía que eso no iba a pasar.
-¿Tú quién eres?-la chica puso los ojos en blanco-Ah, Mindy ¿no?
-Cindy-dijo la rubia en voz muy bajita.
Beth 100-Rubia 0.
No me gustaba cómo la estaba tratando, pero una pequeña parte de mí sabía que se lo merecía.
-Mira ayer lo pasamos bien...o eso creo-dijo pensativo, como si no se acordara-pero ya está. Y no llames pesada a Lis.
Se quedó helada, su cara de indignación era algo digno de ver, se giró y fue a lo que supuse que era la habitación.
Jake frunció el ceño.
-¿Serena no te dijo que no quería ir hoy?-dijo pasándose la mano por la cara, parecía resacoso, y nervioso, ya que estaba pasándose la mano por el pelo todo el tiempo, gesto que hacía a menudo.
-Sí me lo dijo, y estoy aquí para quitar tu culo de tu casa y llevarte a la oficina.
En ese momento salió Cindy, y le dió un papel a Jake.
-Toma mi número, llámame-le iba a dar un beso a Jake y el le giró la cara, por lo que acabó en su mejilla-Adiós Blis.
-Es Lis, Mindy-le dije mirándola fijamente y ella me devolvió una mirada llena de odio.
Jake cerró la puerta y yo entré, ya que toda la conversación había sido en el umbral de la puerta, después hizo una bola de papel del número de Cindy.
-¿No la vas a llamar?
Él ahogó una carcajada.
-¿Para qué? Estuvo bien para una noche, nada más.
-Eres un cerdo-dije dándome la vuelta y dirigiéndome a la puerta, odiaba a Cindy, pero no podía tratarla así.
Jake me cogió la mano y tirando de mí hacia donde estaba él para que no me fuera.
-¿Un cerdo? ¿Por qué iba a serlo?
-¿Que por qué?-le grité, sin poder evitarlo-porque esa chica, lo creas o no, tiene sentimientos, ninguna persona debería ser utilizada solo para eso.-dije mirando al suelo- Me apena pensar que solo eres un tío que va a lo que va...
-No me conoces en absoluto Lis-dijo Jake bajando la voz-No soy como tú piensas.
En ese momento vi que seguíamos teniendo la mano cogida, estaba tan furiosa que ni me diera cuenta, me solté rápidamente.
-¿Ah no, Jake?-me enfrenté a él-y dime, ¿cómo eres?
Ahogó una risa.
-Averigualo-Me retó con la mirada mientras se acercaba a mí y me pegó un buen repaso, cosa que no estaba nada bien, ya que reparé en que él seguía sin camiseta...Tenía que centrarme y seguir con el tema, así que me alejé, no me iba a convertir en una Cindy para él, por el bien de ambos.
-Jake, ¿Cuando me conociste también tenías pensado traerme a casa...y bueno, acostarte conmigo para no recordar mi nombre el día siguiente?-pregunté, me dolía preguntar esto, pero quería saberlo, y sabía que Jake no me mentiría si la verdad fuera esa.
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¡Hola a todos y todas!
Siento haber tardado tanto en actualizar, pero he estado muy liada, ¡prometo actualizar antes el siguiente capítulo!
¿Qué opináis de esta capítulo? ¿Quién se cree Cindy?
Y...¿Qué le responderá Jake?
¡Muchas gracias por leerme, y si queréis votad y comentad!
Hasta (muy) pronto!❤️❤️❤️❤️❤️
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Unexpected
Teen FictionCuando acabas el instituto y te presentas a una entrevista para una de las empresas más importantes de liberías no esperas que te cojan, sin embargo Beth fue una chica con suerte. Al menos en ese aspecto, ya que no tiene tanta con el compañero de t...