pero qué tenemos aquí...

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Todo estaba oscuro simplemente, unas pocas velas, me iluminaban. El suelo lucia podrido con algunos bichos merodeando libremente, casi vomito al verlos; estaba atada en una silla con aspecto maltratado. Me moví con brusquedad intentando liberarme. Oí una risa que me puso los pelos de punta y después una voz grave.

?-Eres consciente de que no te liberaras tan fácil mente ¿verdad?- otra vez esa risa repugnante- que digo, si estás aquí es porque no tienes cerebro.

-¿Qué coño quieres?, tengo cosas que hacer.

?-¿Como qué?

-Como partirte el jeto imbécil- intente soltarme otra vez.

?- Como decía, eres idiota.

-Atrévete a decírmelo a la cara si tienes huevos.

Oí unos pasos y pronto lo vi. Era tremendamente alto y musculoso, lleno de cicatrices. Rápidamente me agarro del pelo y estiro para que alzara la mirada y me encontrara con su horrenda cara.

?- Eres idiota.

-Y tu repugnante,-le escupí en toda la mejilla y sonreí –me das asco.

Se limpió la mejilla con su mano y me miro irritante. Pronto sentí el puñetazo en la tripa.

?-Siento no ser de agrado mi hermosa princesa- dijo irónicamente con esa sonrisa burlona- supongo que no quieres ir de buenas ¿no? Tranquila se como solucionar eso- me arreó otro golpe en la mejilla.

Note mi boca húmeda y escupí al suelo, no tarde en darme cuenta de que era sangre.

?-Te lo explicare rapidito, tengo cosas más importantes que hacer. Estas aquí para entretener a la gente, arriesgaras tu vida luchando para ganar tu libertad. Y todo eso para que gente disfrute y se divierta ¿Entendido?

Asentí débilmente con la cabeza. Supongo que ahora seria un animal de circo, la vergüenza que siempre he sido para mi familia...

QUE EMPIECE EL SHOW(si eres chica)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora