No me rechaces *Borrador* [En Pausa]

Capítulo 8

Derek soltó un suspiro agotado, la sangre le resbalo de alguna herida que había comenzado a curarse tenía un fuerte dolor en la espalda y el permanecer acostado en el suelo no parecía mejorar esa sensación. Esa madrugada había llegado al departamento de su tío a golpearlo con toda la furia que se cargaba por haberlo engañado de la manera en la que lo había hecho.

-Dejémoslo por ahora, ¿Te parece bien? -soltó Peter al otro lado de la habitación, él tenía un brazo roto que acomodo unos segundos después, la sangre en su nariz también era significativa, sin contra de todos los demás golpes menores que ya estaban en proceso de curación.

-Si, definitivamente.

Peter se sabía defender muy bien y se merecía más golpes de los que le había dado, pero por el momento ya no tenía esa rabia en su ser que lo había impulsado a romper los dientes de su tío y con ello se sintió más tranquilo. Ahora no parecía haber ningún obstáculo que impidiera tener una relación con Stiles. Por lo menos eso esperaba, todavía no sabía muy bien cuales habían sido las verdaderas intenciones de su tío con respecto a Stiles.

Miro al hombre analizando su aspecto omitiendo todos los golpes que tenía y después se miró a él comparándose <<Espero que a Stiles no le gusten los maduros>>

(...)

El comedor de la escuela estaba abarrotado de adolescente hambrientos, en una de esas mesas, se encontraban toda la manada Hale tomando sus respectivos alimentos acompañados de un incómodo silencio. Lahey, que se encontraba sentado a lado de Stiles se sentía amenazado por la intensa mirada de Scott como había pasado durante toda esa madrugada y eso le estaba impacientando.

-¿Puedes decirme que te hice para que quieras matarme? -pregunto sin importarle que los demás escucharan. Lydia miro a los dos lobos con sus ojos irradiando curiosidad y risa, Stiles por su parte parecía apartado de todo eso.

-¿De qué hablas Isaac? -pregunto el moreno con su rostro incrédulo ¡Completamente falso! Scott no era el mejor disimulando nada. Lahey se estaba bufando de sí mismo, sintiéndose torpe ¿Qué pretendía McCall con todo eso?

-¿Te vas a hacer el idiota? -ataco Isaac cruzando los brazos y frunciendo el ceño-. Has estado toda la puta mañana mirándome como si te hubiera hecho algo. Si tienes algo que decirme dímelo en la cara y deja de recriminarme así.

Scott lo miro de nuevo con esa expresión antes de bajar la mirada a su pure de patatas a medio comer, Lydia Martin intercalo su mirada divertida mientras esperaba, como Isaac, una respuesta por parte del moreno.

-No pasa nada Isaac -afirmo Scott restándole importancia.

-Dejen de pelear chicos -murmuró Lydia luego de la declaración de Scott mientras volvía a comer su ensalada griega, al parecer ya no le interesaba descubrir que pasaba entre ellos dos y Stiles seguía en su mundo, por lo que una pelea así no era ni interesante ni divertida para la diva de Beacon Hills.

El tema de Stiles también era otra cosa que impacientaba al rubio. Un Stiles callado solo significa una cosa ¡peligro! Por más que Isaac trataba de incluir a la conversación al castaño, este parecía no tener interés en contestar a nada de lo que se le hubiera preguntado. También era frustrante que Lydia o Scott se preocuparan por esa extraña actitud de parte del humano del grupo.

Isaac fijo su mirada en el chico, quien estaba jugando con sus patatas fritas, callado y viendo un punto fijo de la nada como si estuviera planeando el fin del mundo, o quizás el del universo. Isaac tomo un poco de agua para deshacer el nudo de la garganta, todo lo que ese día pasaba era raro y quizás era el momento de sacar su traje de Sherlock y observar lo que tramaba aquel par.

(...)

Stiles estaba sumido en su mente. No sabía qué hacer, justo esa mañana había perdido la conciencia durante un par de segundos, absorto en el bochorno y en la sensación de necesitar contacto físico de una manera sexual, todos esos síntomas le parecían extraños y ajenos a los suyos ¿por qué habría besado a Scott? Se pregunto, ya tenía demasiados temas en que pensar. Tan solo con Derek quien le había confesado su amor días atrás y Peter robado un beso suyo la noche de ayer parecían ser suficientes problemas, pero no para Stiles por alguna razón, por lo que inconscientemente decidió esa mañana atacar a su amigo y hacer...

¿Había hecho mal? Si, definitivamente algo estaba mal con él, y eso era patético, había descubierto que, de alguna forma inexplicable, siempre había existido un sentimiento de atracción hacia Derek y que él que se había esforzado en ocultar, pero ahora estaba expuesto ante todos, vulnerable. Sabiendo esa información sobre él mismo, parecía que debía saber que era lo que deseaba, ¿no?, sin embargo, de pronto tiene la idea de querer a Scott, de que Peter se ve atractivo...De alguna forma Stiles deseaba tenerlos a todos y eso lo estaba confundiendo.

<<Basta Stiles>> Se dijo mientras ponía una patata en su boca sintiéndola nauseabunda en su paladar, pero obligándose a tragarla, no había comido nada durante horas y necesitaba comer algo a pesar de que todo el menú escolar (curiosamente su favorito) le provocaba ascos <<Vamos a intentarlo con Derek, es quien me gusta ¿cierto? ¡¿Cierto?!>>

Stiles rasco por arriba de la gasa medica y miro a Scott directamente a los ojos sintiendo de nuevo ese subidón de adrenalina. Deseaba no sentir lo que cada poro de su piel parecía percibir, pero era demasiado obvio que no era su cerebro quien controlaba sus músculos, rasco con frenesí su herida antes de que Isaac detuviera sus violentos actos, el rubio también lo miro a los ojos. Stiles aparto la mano de su amigo sintiéndose asustado por sus actos impulsivos, miro a sus amigos en general y de manera imparcial, todos tenían sus ojos enfocados en él como si supieran que era lo que le ocurría.

Tomo su bandeja aun llena de comida y se levantó, necesitaba respirar un poco de aire fresco o lavarse la cara con agua fría.

-Tengo que ir al baño ¿los veo en clases?

No espero respuesta de sus compañeros, salió del comedor apresurado y dejando su bandeja en uno de los cestos de basura. El ardor que se había dejado al rascar su herida parecía algo serio, pero a pesar de que estaba muriendo de dolor, volvió a llevarse los dedos a ella para aliviar la comezón.

Entro en el primer baño que vio, no había nadie en él así que se sintió libre de abrir toda la llave del grifo, tomo un poco de agua entre sus manos y la llevo a su cara masajeándola e intentando envolverse en el frio, sin embargo, nada parecía apagar el infierno que quemaba su carne debajo de la piel. La puerta del baño se abrió, un chico rubio que en su vida había visto entro con un aire nervioso, como si no esperase ver a alguien más ahí, aunque en un baño publico eso era común. Stiles soltó un suspiro, su mente se nublo.

-Hey... -soplo, el chico rubio sonrió y de pronto todo se volvió oscuro ante los ojos de Stiles.

(...)

-¿Stiles? -pregunto Scott mientras entraba al baño, su amigo estaba lavándose la cara-. ¿Estás bien?

Stiles lo miro al cerrar el grifo y con una sonrisa contesto.

-Mejor que nunca.