---Hiroki---
Nos quedamos viendo una película de terror ya que todas eran románticas y no me gustan mucho que digamos, Keichi en toda la película me dedicaba una hermosa sonrisa la cual me hacía sentirme seguro y a la vez incómodo.
Al terminar la película caminamos por la plaza mientras comprábamos algunos bocadillos y hablábamos de nuestros tiempos como estudiantes.
-Y fue así como en la secundaria me llamaba teto.
-Jajaja, -reí- que gracioso.
-No te rías, es vergonzoso. –hizo una mueca.
-Es que fue divertido, ojala hubiera estado ahí.
-A mí también me hubiera gustado. –me miro.
-Bueno es mejor ir a la estación, ya es tarde y no tarda el último tren en pasar.
-Claro.
Al llegar a la estación alcanzamos al último tren y afortunadamente estaba vacío algo que mis pies cansados agradecían.
-Sabes Hiroki, desde que te conocí tú siempre...
-¿Eh?
-Siempre me has gustado, -tomo mi mentón- eres tan hermoso y...
-K-Keichi no lo digas, es algo...
-¿Por qué no? ¿Acaso tienes a alguien?
Quería decirle que tenía a Akihiko, pero realmente no es nada mío.
-No.
-Entonces, se mío Hiroki, déjame mostrarte mi amor.
-Keichi no puedo yo...
-Te demostraré cuanto todo lo que siento. –se acercó a mí.
-Y-Yo...
Estaba a punto de besarme hasta que sonó mi teléfono, me aparte de él y lo mire.
-¿Es Akihiko? –me miro.
-S-Sí.
-Tsss, siempre interrumpiendo. –chasqueo la lengua.
-Lo siento.
Respire profundamente y conteste el teléfono.
-¿Dónde estás? –pregunto.
-Hola Akihiko.
-Hiroki, ¿Dónde estás? Te vine a buscar en tu departamento y no te encontré.
-¿Cómo rayos entraste?
-Con la llave.
-¿Qué llave?
-La que saque hace algunos meses.
-¿Acaso sabes que es propiedad privada?
-No.
-Ah, -suspire- estoy a punto de llegar a la estación más cercana.
-Iré por ti.
-¿Qué? no espera...
-Nos vemos.
-Maldita sea Bakahiko. –gruñí y guarde mi celular.
-¿Problemas con el escritor?
-No es nada importante.
-Hiroki, ¿ustedes dos están saliendo?
-D-De que hablas. –trate de contener mi nerviosismo.
-Es que se me hace extraño, él es muy apegado a ti y tal parece que no quiere que nadie se te acerque.
-Es tu imaginación. –desvié la mirada.
-Tal vez. –suspiro- Espero que podamos salir más seguido.
-LO mismo digo.
Al llegar a la estación sentí como me jalaban de mi brazo.
-Nos vamos.
-¡A-AKIHIKO!
-Estacione mi auto casi a media calle, así que camina más rápido.
-Nos vemos después. –grito Keichi.
-Lo siento.
-Maldición, que le pasa a ese tipo. –gruñó Akihiko.
-¿Qué te ocurre a ti?
Akihiko me subió a su auto y manejo hasta su departamento.
-¿Por qué vamos a tu pent-house?
-Porque mañana iremos a mi casa. –comento.
-Pero se llegar, así que déjame en mi departamento.
-Quiero estar contigo.
-Aha. –cruce los brazos.
-Hiroki, -me miro- no quiero que vuelvas a verte con él.
-¿Ah? –me sorprendí.
-No me engañes Hiroki.
¿Qué demonios?
¿Acaso escuche bien?
¿Engañarlo yo?
En todo el camino no dije nada más, Akihiko igual se quedó callado, lo cual provoco un silencio incómodo, solo trate de concentrarme mirando por la ventana. Al llegar a su hogar me dejo entrar primero y después él.
Mire en la mesa del centro que había una copa y media botella de vino, el sofá tenía varios libros y sus lentes e encontraban arriba de uno de los libros que le había prestado.
Me tomo del brazo y me acorralo en la pared.
-Hiroki, quédate conmigo. –me tomo del mentón.
-Aquí estoy.
-A veces eres...
-Me iré a dormir. –me aparte y me volvió a jalar- Akihiko tengo mucho sueño, en verdad, si quieres hacerlo que sea mañana, ¿sí?
-Supongo que te dejaré ir por hoy.
-¿Debo agradecer? –lo mire.
-Solo un poco. –sonrió.
Esa sonrisa hizo latir mi corazón fuertemente, desvié mi mirada para que no viera lo avergonzado que estaba.
-Eres tan lindo.
-¿Qué?
Me beso apasionadamente, colocando sus brazos en mi cintura, yo inconscientemente coloque mis brazos alrededor de su cuello.
Su beso lo volví a sentir tan extraño, tan necesitado, tan "amoroso", ¿desde cuándo me ha besado así?
Me aferró más a él mientras sus manos se deslizan por mi cadera...
-E-Espera. –susurre.
-Hiroki, te deseo tanto, no sabes cuánto.
-Me iré a dormir.
-Hiroki solo por hoy.
-¿Qué?
-Durmamos juntos, no haré nada, solo quiero dormir contigo.
-No tienes para eso a Suzuki-san.
-No es lo mismo.
-Baka, no iré.
-Solo por hoy. –me miro.
A veces la cara que pone no la resisto, él sabe cómo manejarme.
-Me molesta. –gruñí.
-Gracias. –sonrió.
Me cargo y me llevo hasta su habitación.
-Por lo menos déjame ponerme ropa cómoda. –comente.
-Está bien, ten. –me paso una de mis pijamas.
-Aún no sé porque trajiste algo de mi ropa aquí. -me cambie.
-Para situaciones como estas.
-Sí claro.
-Vamos a dormir.
Nos recostamos en la cama, él me estrecho entre sus brazos.
-Buenas noches Hiroki.
-Hasta mañana.
Mi corazón late rápidamente pero trato de tranquilizarlo, no puedo pensar en cosas que no son, debo mantenerme firme...
---Akihiko---
Al despertar la imagen no pudo ser más que perfecta, mi amado castaño en mis brazos durmiendo profundamente, sus manos estaban colocadas en mi pecho y tenía un semblante de tranquilidad.
Me le quede admirando pues su belleza siempre me cautiva, acomode algunos mechones de su cabello tras su oreja y acaricie sus mejillas, empecé a besarlas con tanto amor y luego besé un poco sus labios que me pertenecían.
Él lentamente empezó a despertar y yo besé su frente.
-Buenos días. –sonreí.
-B-Buenos días. –bostezo- ¿A qué hora es la reunión?
-A las 2.
-Mmmm. –miro el reloj.
-BAKAHIKO, ¿POR QUÉ RAYOS NO ME DESPERTASTE?
-Dormías plácidamente.
-Maldición, -se levantó de la cama- son las 12:30, apenas tenemos tiempo.
-Vamos Hiroki.
-Es mejor que te des un baño, -gruñó- yo iré al de la otra habitación.
-Siempre podemos bañarnos juntos. –ofrecí.
-No gracias.
Suspire cuando mi castaño se fue y me dirigí hasta el baño, me di una ducha y me coloque un traje gris con una corbata lila.
-Cuando Hiroki se enteré para que hice está reunión se sorprenderá.
Al salir de mi habitación encontré a Hiroki en la sala vestido con un traje café algo pegado, en verdad mi castaño sabe cómo conquistar a los demás inconscientemente.
-¿Listo?
-Te vez muy apetecible.
-Ya cállate pervertido.
Bajamos hasta el estacionamiento y nos subimos al auto. Maneje hasta mi casa y ambos bajamos siendo recibidos por Tanaka-san.
-El señor Fuyuhiko los está esperando. –comento.
-Gracias.
Hiroki me miro extrañado y ambos caminamos hasta el comedor donde se encontraba mi padre y Haruhiko.
-Ya te habías tardado, -comento mi padre- a la otra avísame.
-Lo siento.
-Así que tú eres la pareja de mi hijo. –comento mi padre.
Estaba a punto de decirle que sí pero...
-Jejeje, muy buena su broma señor Fuyuhiko, -rio Hiroki- yo soy el mejor amigo de Akihiko, Kamijou Hiroki ¿me recuerda?
"¿Por qué no nos ves como pareja Hiroki? Yo te amo y quería presentarte oficialmente como el amor de mi vida pero... ¿Solo amigos?"
-O es verdad, -sonrió mi padre- no te reconocí.
-Supongo que he cambiado mucho. –sonrió mi castaño.
-Es lo que veo, -suspiro mi padre- entonces Akihiko, ¿Dónde está tu pareja?
Tanto mi padre como Hiroki me miraban con curiosidad.
-Me cancelo al último momento.
-Que mal, -comento mi padre- en fin, pasemos al comedor.
Todos nos sentamos y nos sirvieron la comida. Mi padre en todo el momento se la pasaba charlando con mi castaño acerca de sus gustos, de lo que estudiaba, de lo que quería hacer, pero él más interesado era mi hermano.
-Akihiko acompáñame por favor. –pidió mi padre.
-Está bien, -mire a Hiroki- ya vuelvo.
-Sí.
Seguí a mi padre hasta la puerta y se detuvo.
-¿Pasa algo?
-No necesariamente.
-¿Cómo?
-Mira... -dijo señalando a mi amado.
Hiroki se encontraba charlando muy a gusto con mi hermano, mientras él le sonreía, algo muy raro en Haruhiko.
-Parece que se están llevando bien.
-Apenas se están conociendo. –rechine los dientes.
-Sí, pero se nota que se agradan.
-No lo creo.
-Pues Hiroki me cae muy bien, sería un buen yerno. –sonrió.
-Padre...
-Ni se te ocurra interrumpirlos, quiero que se conozcan más.
Sentí tanta rabia de solo mirarlos, quería apartarlo y decirle a mi hermano que Hiroki es mío y que no permitiré que nadie más lo toque.
-Padre yo digo que...
-Vamos, hay que dejar que los chicos se conozcan.
-Hiroki tiene pendientes que hacer.
-No creo que unas cuantas horas le perjudiquen, -sonrió- ¿y cómo es tu amante?
-Es un chico muy lindo, hermoso y único.
-Vaya, pues espero tener la fortuna de conocerlo.
"Ya lo estás haciendo..."
No sé cómo es que no me di cuenta antes de la maravillosa persona que tenía frente a mí, un hermoso castaño, si hubiera puesto mis ojos en ti antes de ver a Takahiro la historia sería diferente, no lo sé, tal vez también me hubieras rechazado pero...
¿A quién amas Hiroki?
¿Por qué nunca me has contado acerca de tus sentimientos?
¿Quién es ese hombre del cual te enamoraste?
¿Qué tengo que hacer yo para que te fijes en mí?
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Lucha Contra el Destino (Akihiko x Hiroki)
Fiksi PenggemarA veces el tiempo es el peor enemigo del hombre, ¿Por qué siempre nos damos cuenta de lo que teníamos hasta que lo perdemos? Akihiko y Hiroki se vuelven "amigos del sexo" cuando el peliplata se entera del compromiso de la persona a la cual ama, o es...