Pov Rumi:
Apenas tocaron la última campana del día, agarré mi mochila y me levanté rápidamente del asiento. Hoy era el gran día, y como todos los años, debía irme lo más temprano posible de la escuela, cuando finalizaran las clases. Guardé mis cosas rápidamente, y encendí mi celular, en caso de que recibiera una llamada importante. Ya estaba listo para salir corriendo por la puerta, pero antes de hacerlo, sentí que alguien me agarró del cuello de mi uniforme por la parte trasera.
-¿Te vas sin despedirte de tu querida novia, Rumi? -me interrogó Koemi, una chica de cabello rosa y ondulado. Ella era una de mis compañeras de clase, y con quien he mantenido una relación amorosa desde finales de octavo grado.
-Disculpa. Pero sabes bien que día es hoy. No puedo llegar tarde. Y lo siento, sé que hoy debería estar contigo, pero...
-Mhm, lo tengo muy claro, te entiendo. No tienes que preocuparte por mí -me apoyó ella, mientras me acariciaba la cabeza- Solo quería despedirme. Buena suerte con ello, ¿eh? Mándale saludos a tu madre y a tu padre de mi parte. Y no te preocupes por los chicos, les avisaré que no podrás ir a la fiesta hoy. Adelántate.
-Gracias -le sonreí- Te debo una, Koemi.
-No me debes nada -me dijo ella, dándome un besito en la mejilla, para luego darme un suave golpe en la espalda- Anda ya. Antes de que me arrepienta.
-¿Eh? -pregunté asustado, notando que ella de inmediato soltó una risita, dándome a entender que estaba bromeando- Oh, por cierto...
-¿Hm?
-¿Qué tal si vamos al cine mañana? -le ofrecí con una leve sonrisa- Prometo llegar a tiempo a tu casa para recogerte.
-¿Intentas arreglar lo de hoy? -me preguntó con una sonrisa algo burlona.
-No, solamente quiero salir contigo, ¿No puedo?
-Obviamente -me sonrió- ¿A las siete?
-A las siete -afirmé, para luego darle un beso en los labios- Después podemos ir a mi casa. Te prepararé algo muy delicioso. Solo para ti.
-Lo esperaré -me sonrió algo sonrojada.
Luego de despedirme, comencé a correr por las escaleras, mientras Koemi se despedía de mí con la mano. Hoy mis amigos harían una fiesta, pero no les había explicado que no podría asistir. Así que seguramente Koemi les explicaría para ahorrarme tiempo. Ella siempre es bastante servicial conmigo, y además muy tierna. Los dos amamos cocinar, por lo que la pasamos muy bien en nuestras citas, preparando siempre cosas muy apetitosas.
En el momento en el que salí del establecimiento, busqué por todos lados a mamá, pero no lograba encontrarla. Y yo estaba algo asustado, pensando que ella se molestaría por mi tardanza, pero ni siquiera estaba allí.
¡Beep! ¡Beep! Sentí una bocina de la nada, la cual provocó que me diera la vuelta a ver de quien se trataba. Era justamente Asuka chan, la cual tocó la bocina para llamar mi atención. Al verle, de inmediato corrí hacia el auto, y me subí en el asiento de co-piloto, cerrando la puerta un poco fuerte al ingresar.
Asuka al terminar sus estudios, empezó a trabajar en una oficina como secretaria. Y de vez en cuando, la abuela le mandaba a repartir tortas y dulces a domicilio, ya que la ex modelo, se dedicaba a eso a partir de ahora. Y Asuka le apoyaba bastante en ese sentido. Probablemente porque, desde que terminó la guerra hace más de cuatro años, la abuela le pagó todos los estudios, y una pequeña parte de los míos. Pues cuando mamá salió de la escuela y empezó a trabajar, comenzó a pagar los míos. Dejando libre a la abuela. Pero ella al sentir que debía cooperar con nosotros, puso una pastelería llamada "Haruna", justamente en la casa de los Minami, donde antes estaba el viejo local de comida rápida. Mamá y yo vivíamos con la abuela a partir de ahora en su casa, aunque la rubia debía quedarse la mayoría del día en la casa de los Minami, atendiendo la pastelería.
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Entre dos mundos [Resubiendo]
FanficRumi y Akihiro, dos chicos que se suicidaron por diferentes razones, son castigados a volver a la vida en cuerpos totalmente diferentes a los que tenían en su vida anterior. Comenzaron a entrenar para volverse fuertes y darse cuenta que pueden hacer...