Miss Moore.

Capítulo 8: Marcando territorio

No puedo creer todavía que sea él, Kevin, mi "amigo" de la infancia, el hijo de los Hoffman, el hermano de Yulissa.
-¿Kevin Hoffman? -pregunto aún atónita.
-Mm... Sí, ¿la conozco señorita...?- pregunta.
-Moore -respondo con una pequeña sonrisa y veo como enseguida llega el reconocimiento de mi apellido.
-¿Peyton? -pregunta asombrado - ¿Tú eres la mismísima Peyton Moore? ¿La mejor amiga de la infancia de mi hermana?
-La misma -respondo con una sonrisa- Dios mío Kevin cuanto tiempo ¿qué es de tu familia?
-Peyton papá se va alegrar mucho de verte y mamá ya ni te cuento, ¿cómo están tus padres? No sabes lo que los he extrañado, igual que a tía Samantha y sus tortitas. Yulissa, mamá y papá están bien, Yuly embarazadisima, pero eso es otra historia. ¿A qué hora sales a almorzar?- pregunta entusiasmado.
En eso se abre la puerta del despacho del jefe.
-¿Señorita Moore ha llegado ya el Señor Hoffman?- pregunta revisando su tablón de visitas personal.
-Am... Sí señor Cárter, el señor Hoffman está aquí delante -respondo con una sonrisa y un brillo en mis ojos por la emoción, él levanta la cabeza.
Primero me mira a mí, muy fijamente y después mira a Kevin, por último pregunta.
-¿Se conocen?- estaba muy serio.
Kevin no me da chance a responder, lo hace él por mí directamente.
-Sí, Peyton fue mi primer amor- respondió con una sonrisa de oreja a oreja, haciendo que Evan se quede estático por segundos, ya que rápidamente vuelve a su postura y rodea mi escritorio bajo la atenta mirada de Kevin. Puso sus manos en mis caderas y me pegó a su pecho con ternura pero de manera posesiva al mismo tiempo, marcando territorio.
Haciendo que a Kevin le cambie por completo la cara.
Yo lo dejé hacer, no me gustaban los ataques de celos cuando estaba con una persona, pero yo sé que esto lo está haciendo por algo.
Kevin sonríe con suficiencia.
-Peyton, no sabía que tenías novio -extiende su mano hacia Evan y se dan un tenso apretón.
-Yo tampoco- respondí con una sonrisa pícara, a lo que Evan se tensa y cambia de tema.
-Peyton, cariño- dijo haciendo énfasis a lo de cariño- el Señor Hoffman viene de parte de su padre, quieren saber si pueden hacer negocios con nuestra empresa- a Kevin no le pasó por alto el hecho de que Evan dijera "Nuestra empresa" - y están pensando las probabilidades y estabilidad -dijo mirándome a los ojos- que le ofrecemos.
Ahí recordé que para el Señor Hoffman tenía un dicho "Hombre que tenga mujer y hijos valía para hombre de negocios". Siempre lo decía, el Señor Hoffman era el cabeza de familia y opinaba que si podías sacar adelante a ésta, podías proporcionar estabilidad en la economía de los asociados de la empresa, en definitiva... Imagen.
-De acuerdo amor- Evan quería que me hiciese pasar por su novia- Entonces será mejor que empieces a enseñarle la empresa a Kevin y explicarle cada un de los procedimientos, yo vuelvo al trabajo, ¿sí? Gusto en verte Kevin- añadí con una sonrisa.
Se despidió y quedó mirando a Evan, analizandolo. Evan se gira hacia mí y besa mi frente con cariño y agradecimiento, cerré los ojos ante ese acto de ternura, mi corazón se aceleró y mis cachetes enrojecieron, pero lo justifico por el momento en el que estamos. Evan se separa y se fue con Kevin por el ascensor.
¿Qué acaba de pasar?