- ¡Elizabeth, baja a cenar cariño! -Marie grita desde el primer piso, mientras sostiene un mantel de cocina para secarse las manos.
Liz rodea los ojos frustrada. Ahora entendía lo que algunos lectores decían. Odiaba que la interrumpieran cuando estaba en la mejor parte de un libro.
A pesar de que no le gustaba la lectura, el libro había conseguido atraer su atención en muchos detalles de su vida. Primero, David McGrant. Segundo, Jaime. Tercero, el amor.
- ¡Elizabeth, ya está servido!
- Agh ¡Ya voy mamá! -la ojiazul busca la fotografía de Taylor y Karlie para poder marcar la pagina en donde se había quedado-. Página 198... Prometo que está noche lo leeré completo.
Salió del cuarto a toda velocidad, mientras más rápido cenara, más rápido volvería a la lectura.
Se sentó a la mesa y sin decir gracias, Elizabeth comenzó a comer. Marie la miró con desaprobación, no era correcto hacer aquello.
- ¿Te está esperando alguien a caso, que no esperas a que los demás se sienten? - Cara entra a la cocina y ve la interacción. No dice, permanece en silencio y se sienta junto a la pequeña Alison.
- Estoy leyendo... Y me quedé en la mejor parte.
- ¿Tú, leyendo? No te creo -Marie sonrió- ¿Qué libro lees?
Parecía inercia. Liz y Cara se miraron con complicidad. Elizabeth negó con la cabeza y siguió comiendo.
- Es «Diario de un amor platónico» -responde la pequeña de seis años. Elizabeth se quedó estupefacta mirando a su hermana.
- ¡Alison!
Marie ríe. Al parecer ella no sabía de la existencia de ese libro.
- ¿Y de qué trata? Supongo que lo has leído, Alison.
- No sé mami... Sólo leí el título.
- ¡Eres una intrusa!-exclama Liz alterada- ¡Nadie te ha dicho que te metas en mis cosas!
- No le hables así a tu hermana, Elizabeth -Marie protestó y dejó el último plato servido, sobre la mesa- ¿A caso es un libro secreto del que no tenga que enterarme? Porque sí es así, dime en seguida dónde está ese libro.
- ¡No mamá! -Elizabeth se sintió frustrada una vez más. Tía Cara la observó, no dijo ni quiso decir nada. Sabía que si la defendía, Marie sospecharia aún más.
- Entonces dime por qué tanto alboroto.
Marie termina por sentarse en su lugar. Prueba el primer bocado y su atención se centra en su hija mayor. Todas permanecieron en silencio, el sonoro movimiento del tenedor de Alison era lo único que hacía ruido. Tía Cara estaba espectante, ella tenía claro lo que le había dicho a Elizabeth. Pero ahora estaba dudando si su sobrina guardaría silencio o no.
- Mamá -Liz dejo su tenedor a un lado y fijo sus ojos tristes a su madre. El recuerdo de Jaime invadió su mente. Ella estaba enamorada y sabía, si seguía con aquello, en algún momento su madre tendría que saberlo- ¿Por qué le tienes tanto repudio a las parejas de un mismo sexo?
Cara bebía un poco de su jugo y no pudo evitar atragantarse de la impresión. Marie permaneció en silencio, mirando a su hija. El frio le consumió. Algún día llegaría aquella pregunta ¿No?
- ¿Por qué me haces esa pregunta, Elizabeth?
- Sólo responde.
Tía Cara le advertía con la mirada «No sigas Elizabeth»
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Diario De Un Amor Platonico ⚜ Kaylor Fanfic #Wattys2017
FanficCuando se es fans, es una de las cosas más normales de hoy en día, aún más cuando llegas a delirar por tu artista favorito, pero... Para Elizabeth, de dieciséis años, no era simplemente un delirio o ser admiradora de alguien, ella estaba completamen...