- Entonces... - dijo Silvia esperando a que el muchacho no dijera ninguna idea alocada.
- Ya veremos qué hacer. Por ahora tenemos un plan, voy a avisar a los demás -. Concluyó Iván dejando la cocina atrás.
- Ese chico tiene buenas estrategias- indicó Alan acercándose a Fernando.
- Sí, las tiene. Pero que no te sorprenda cuando haga alguna locura, él se presta mucho a eso-. Dijo haciendo unan mueca, como si supiera el resto del plan de Iván. Un plan que no era favorable para todos.
- ¡Esperen!- lanzó Karen de repente, antes de que Iván saliera de la cocina- hay algo que tengo que confesar. Bueno, en realidad es una historia de Isaac.
Todos quedaron atónitos ¿Qué era eso que Karen sabía? y ¿Por qué ella era la única en saberlo? Alan tenía más o menos un panorama de lo que iba a contar aunque estaba muy ansioso por saber el resto de la historia. La historia que hasta el momento, solamente Karen conocía.
- Bueno, para empezar espero que él no se moleste por revelarles esto... él me contó una experiencia que tuvo en el Sur, no sé exactamente que tan lejos quede de aquí aunque sí me dijo que tardó un día, una noche y medio día del siguiente en llegar allá. De lo que sí estoy segura es que puede que allá encontremos la salida que tanto estamos buscando...
Karen les relató lo más detallado que pudo recordar acerca de la experiencia de Isaac. Se sentía mal por divulgar su historia sin embargo, se convenció a sí misma de que si no lo hacía podrían morir. Mientras ella relataba la historia, el asombro del grupo crecía, no podían imaginarse lo que debió haber sentido Isaac al vivir aquello: ¿Presión? ¿Angustia? ¿Dolor? ¿Ansiedad? ¿Incertidumbre? Quizás no sintió nada de eso, o todo a la vez. Solo Dios sabía lo que había experimentado ese muchacho tan fuerte de voluntad.
Una vez que Karen finalizó, se armó un silencio indescriptible. Todos callaron sus pensamientos, nadie quería ser el primero en hablar después de haber escuchado tal cosa. Aunque sí que había inquietud; Alan, Fernando y Silvia apoyaban a Karen: si la bióloga logró cruzar El Muro, debería haber, no tan lejos, una puerta, puente o cualquier cosa que los dejara salir. Iván no estaba tan convencido de las palabras de la chica, la bióloga pudo haber caído desde lo alto y sí, era otra teoría, mas nadie podía asegurar qué ocurrió pues nadie estuvo presente al momento de que la bióloga cruzó al otro lado del Muro. Ni el mismísimo Isaac había logrado presenciar eso.
Los segundos se hacían eternos estando todos en la mesa sentados, sin embargo, después de un momento, Karen hizo su propia planificación. Tomó fragmentos del plan de Iván y agregó otros nuevos. Su raciocinio fue de 1 a 1000 en segundos. Logró tener una buena estrategia en cuestión de segundos y no tardó en darla a conocer.
- ¡Ya sé!- expresó la joven tan eufórica que Alan dio un brinco por el susto que se llevó- podemos seguir teniendo el mismo plan. Solo que en lugar de dirigirnos al Este, nos vamos al Sur.
- ¿Quieres decir, Ana tu y yo?- preguntó Alan.
- Sí claro, y los amigos de ustedes- señaló Karen mirando a Fer- es sencillo, vayan por sus amigos, y mañana partimos, justo como Iván dijo, solo cambiamos la dirección y listo.
- Oye, sí- aprobó Iván- podemos hacerlo ¿por qué no? se dirigen al Sur y nosotros al Suroeste.
- ¿Todos de acuerdo?- manifestó la chica mirando a cada presente a los ojos.
Todos asintieron. Ya tenían un plan estable. Un plan que la joven estaba segura que funcionaría. Más aún faltaba algo por hacer...
- Oye, Isaac. Me gustaría hablar contigo, con ustedes- se corrigió Iván al notar a Ana en la Sala de Curación.
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Si tú vas, yo también
AdventureLa Zona. Más de 90 kilómetros a la redonda de lo que fue el estallido del rector. Isaac, un SOBREVIVIENTE, creía que estaban solos, él y su pequeña hermana, pero se equivocó. Su objetivo estaba claro al inicio: buscaba algo, algo que le había si...