Lucha Contra el Destino (Akihiko x Hiroki)

CAPITULO 8 Sentimientos.

---Haruhiko---

Desde que conocí a Hiroki me enamore de él perdidamente, es un hombre tan lindo, tierno, dedicado a sus estudios y ahora su nuevo trabajo.

Es un desperdicio que después de haberlo conocido y deseado, se tuviera que ir, me hubiera gustado que me diera una explicación del porque se fue, pero no puedo exigirle nada puesto no somos pareja.

Le confesé mis sentimientos y me atreví a robarle un beso, aunque Akihiko nos separó, eso me hizo sospechar mucho.

Les pregunte si tenían una relación pero dijeron que no, supongo que Akihiko lo acoso tanto que Hiroki decidió irse.

Eso es solo una idea puesto que cada que le mencionaba a Akihiko mi castaño desviaba su mirada o me hacía cambiar el tema, así que eso me dio más motivo para sospechar de la partida de Hiroki fue culpa de mi hermano.

Cuando se fue le comente a mi padre todo lo pasaba, que me ayudará a encontrar a mi pequeño castaño, y después de un poco de tiempo lo encontró en Londres, le pedí a mi padre que no le dijera nada a Akihiko.

-Haruhiko lo que me pides es demasiado. –comento mi padre.
-Lo sé, pero estoy seguro que la partida de Hiroki fue a causa de mi hermano.
-Pero...
-Sí le dices a Akihiko donde se encuentra Hiroki se irá de nuevo.
-Humm, -suspiro- está bien no le diré nada.
-Gracias.
-¿En verdad amas a ese castaño?
-Más que a mi propia vida.
-Entonces te ayudaré porque me gustaría tenerlo como hijo político.
-Es una gran persona.
-Lo sé, me alegre tanto de conocerlo y más al enterarme que era ese pequeño castaño que siempre estaba con Akihiko, es un gran partido.
-Es verdad.

Me dirigí de nuevo a mi estudio y revise algunos planos para construir otro acuario. El solo mirarlos me hace recordar a mi castaño y esa platica que tuvimos.


-Y tú Haruhiko, ¿Qué es lo que te gusta hacer? ¿Algún sueño?
-Pues, -suspire- me encantaría ejercer mi carrera como arquitecto.
-¿Y por qué no lo haces?
-Alguien debe encargarse de los negocios familiares.
-Pero, ¿por qué? deberías hacer lo que más te gusta.
-No tengo opción Hiroki.
-La tienes, -tomo su mano- no deberías dejar que nada ni nadie te quite tus preciados sueños, si realmente quieres ser un arquitecto lucha por ello.


Hiroki tiene mucha razón, yo debo de hacer lo que más me gusta, sé que a mi padre no le agradará esta noticia pero...

Si me llego a casar con mi castaño quiero que esté orgulloso de mí, lo haré por él y por mí porque construir, diseñar es lo que más me gusta.

-Hiroki, en verdad eres un ángel caído del cielo, mi ángel personal, no sabes cuánto te extraño.

Decidí salir a dar un paseo y me encontré con mi hermano en la entrada de la casa.

-¿Vas de salida? –me miro.
-Así es.
-Oh.
-¿Qué ocurre Akihiko? Te vez decaído.
-Nada, solo que me falta lo que más amo.
-¿Cómo? –me sorprendí.
-No encuentro a mi Hiroki, lo necesito conmigo.
-Espera, -comente- ¿estás enamorado de Hiroki?
-Sí, -suspiro- yo amo a Hiroki más que a nada.
-Debes estar bromeando.
-No lo hago.

Él entro a la oficina de mi padre y se encerró.

Sé que es egoísta pero jamás le diré a Akihiko donde está Hiroki, puesto que yo me lo merezco más que él.

"Lo siento hermano pero está vez te toco perder..."

---Misaki---

Han pasado 3 meses desde que empecé a vivir con Usagi-san. Le digo así porque mi hermano me dijo que le agradaba que lo llamaran así.

Sinceramente desde que leí uno de sus libros hace dos años quede impresionado, me enamore de él a primera vista, de solo mirarlo en una foto, fue mi amor platónico, siempre quise conocerlo y cuando mi hermano menciono que era su mejor amigo, nunca estuve más feliz.

Al conocerlo, no se veía my bien, no tenía esa sonrisa que lo caracterizaba, mi hermano al contarme de él parecía que era un hombre increíble, hermoso, tan genial, pero al verlo, es tan distante, tan frío y con una mirada que denotaba tristeza.

En estos meses que he estado a su lado, siento que lo amo más que nunca, pero siempre es distante, se enfoca en sus escritos y siempre lo escucho hablar con otra persona, diciendo que debe encontrarlo, que no se dé por vencido, que sabe que debe estar cerca, cosas como esas.

Me esfuerzo para que él me note, para que sepa que estoy aquí pero, tal parece que está sumergido en sus pensamientos.

Todos los días preparo el desayuno y me encargo de los quehaceres del hogar, no me molesta, no mientras pueda estar a su lado.

-¿Misaki?
-Lo siento Shinobu, me distraje un poco.
-No pasa nada, -sonrió- ¿trajiste la tarea?
-Sí, ¿la hiciste? –lo mire.
-¿Quién crees que soy? –rio- la termine ya tarde porque me quede platicando con Miyagi.
-Shinobu, -suspire- deberías de pensar en tu relación con él, creo que no está bien.
-¿Por qué?
-Él es un profesor y tú el alumno, él se debe preocupar por su trabajo.
-También me ama. –me miro.
-No lo niego pero deberías reconsiderar tú relación.
-Ah, -suspiro- se que soy una carga para él, pero nos amamos y...
-¿Qué dirán tu padre cuando lo sepa?
-No me lo tienes que recordar Misaki, mi padre es el director de esta Universidad, él no...
-¿No?
-Mi padre es homofóbico.
-Lo siento.
-Pero no me rendiré, sé que estando a lado de Miyagi nada malo pasará.
-Solo piénsalo, por tú bien.
-Gracias por querer protegerme Misaki, pero esas son situaciones que solo nos incumben a nosotros.
-No quiero que sufras un rechazo, me preocupas.
-¿Lo dices por mi ex?
-Eso mismo.
-Es una historia pasada, -me miro- debemos enfocarnos en el futuro.
-Sí. –susurre.
-¿No se lo has dicho a Usami?
-¿Qué cosa? –me sonroje.
-Ya sabes.
-No.
-¿POR QUÉ NO?
-Shinobu guarda silencio, -lo regañe- no puedo.
-¿Por qué no?
-Porque él piensa en otro.
-¿Cómo?
-Pues...

***Flash-back***

Regrese de la Universidad puesto Usagi-san no pudo pasar por mí ya que debía entrar unos manuscritos que Aikawa le pidió. Entre al pent-house y lo encontré dormido en el sofá.

Mordí mi labio ya que tenía puesto su pantalón pero estaba sin camisa, se ve tan hermoso y sentí como mi corazón comenzaba a palpitar rápidamente.

Me acerque lentamente a él con la intensión de sentir sus labios, al llegar al sofá me incline un poco y cerré los ojos.

-Hiroki, -murmuro- no me dejes.

Me aparte de él y vi como una lágrima resbalaba por su mejilla.

-Usagi-san...
-Te amo Hiroki, te amo...

***Fin del flash-back***

-LO siento mucho Misaki.
-No puedo rendirme, -lo mire- yo seré el remplazo de ese Hiroki.
-¿Qué?
-Haré lo que sea para enamorarlo.
-Misaki, no te lastimes más.
-Yo no.
-Misaki escúchate, -me miro- él ama a otro y estoy seguro que él llegara.
-Pero...
-Misaki, tú mismo lo sabes, él no siente nada por ti.
-Pero puede hacerlo.
-No te confundas, -suspiro- de haber sentido algo por ti tal vez ya lo hubiera demostrado.
-Shinobu...
-No me veas así amigo, busca tú felicidad.
-Es Usagi-san.
-Por favor Misaki, piensa bien las cosas, porque él único que se hará daño serás tú.
-No me importa.
-AY Misaki, en verdad eres un masoquista.
-Es mi vida.
-Como sea, solo no vengas llorando cuando te lo diga de frente.
-Lo verás...
-Solo te recuerdo que a veces el amor verdadero solo llega una vez en la vida.
-No me digas que lo dices por Ijuuin.
-Por eso lo digo.
-No me interesa.
-Haya tú, no pienso seguir discutiendo por esto.
-No te metas en mi vida Shinobu, solo eres mi amigo.

Tienes razón.

"No dejaré que las palabras de Shinobu me afecten, yo estoy seguro que puedo conquistar a Usagi-san, yo me encargaré que se olvide de ese idiota de Hiroki..."

---Hiroki---

-Hiroki-sensei usted en verdad me gusta y quiero que acepte mis sentimientos. –comento un chico pelinegro mostrando una carta.
-Lo siento pero no puedo aceptarlo. –suspire.
-Pero...
-Dedícate a estudiar porque tus notas son muy pésimas.
-¿Por eso me ha rechazado?
-Quizás.

Camine hasta mi oficina y me senté en mi sofá.

-Ah, -suspire- es el décimo de la semana, y la semana aún no acaba...

Ya han pasado 4 meses desde que llegue aquí, desde mi primera clase me han llamado el "Demonio Kamijou", me agrada ya que a cualquier chico que no me respeta o no muestra interés en la literatura le lanzo lo primero que encuentro en mi escritorio.

Afortunadamente ese Ren no avanza conmigo, no sé cómo rayos se aparece en mi oficina sin ser visto, trata de besarme o tocarme pero el profesor Kaede-san siempre está conmigo.

Ese chico está loco...

¿Cómo un chico puede parecer tierno y querer atacarme?

Siento que mi trasero corre peligro, estando a solas con Ren seré violado, por eso trato de salir pronto de mi oficina o irme ya sea con Nowaki o Tsumori.

En todo este tiempo he extrañado a Akihiko, en verdad estar separado de él me cuesta trabajo, mi pecho duele de solo recordar sus labios, sus besos y caricias, en verdad lo extraño, no puedo olvidarlo, él es mi vida entera, lo amo con locura.

-¿Hiro-san?
-Nowaki, -me limpie mis lágrimas- ¿Qué pasa?
-¿Estas bien?
-Sí, ¿Por qué lo preguntas?
-Es que estás llorando.
-No me hagas caso. –me levante y mire por la ventana.
-No te creo.

Me estremecí al sentir el aliento de Nowaki en mi cuello, me voltee y me encontré con su mirada, él tenía recargando sus manos en la ventana quedándose muy cerca de mí.

-N-Nowaki-sensei...
-Solo dime Nowaki.

Tomo mi mentón y se acercó a mí.

-Hiro-san, yo estoy enamorado de ti.
-¿Qué?
-Me gustas mucho.
-Nowaki yo...
-No te pido una respuesta ahora mismo, solo quiero que lo consideres.

Lentamente acercó sus labios y los roso con los míos.

-Hiroki necesito que...

Me aparte de Nowaki.

-¿Interrumpo? –pregunto Kaede.
-No para nada.

Nowaki sonrió y salió de mi oficina.

-¿Paso algo?
-Para nada.

Kaede me pidió que revisara unos archivos, al terminar él salió primero besando mi frente. Camine hasta la salida encontrándome con un grupo de chicos.  

  -¿Sí? –los mire.
-Buenas tardes Hiroki-sensei mi nombre es Ukyo y soy el presidente de su club de fans.
-¿Club es fans?
-Así es.
-Hummm, no sé qué decir.
-Hoy se ve exquisitamente sexy.
-Con permiso.
-Hiroki-sensei.
-'¿Qué ocurre? –los mire.
-¿Podría tener una orgía con nosotros?
-¿Qué? –me sorprendí.
-Por favor...
-MALDITOS MOCOSOS. –les aventé mi maletín.

Camine hacía la calle y tome un taxi.

-Y no se les ocurra decir algo estúpido como eso otra vez...