El Ruido de tus Zapatos (Larry Stylinson)

Capitulo 13

“Unos labios bien besados, siempre regresan” Federico.

JUEVES

10:00 AM

Los abogados llegaron puntuales al salón de juntas esa mañana: Niall camino directamente al lugar de siempre, apenas y sonrió al resto, lucia bastante ocupado con el expediente que sostenía entre sus manos; claro que Louis sabía que el mal humor se debía a la conversación de anoche y sus pésimos consejos, no a la lectura.

Durante la reunión: no hubo temas nuevos, el trabajo para la corporación y los nuevos sistemas en el juzgado funcionaban para ellos, sobre todo en esta época del año: Agosto. De los treinta casos que llegaban al día: veinte se avalaban por el juez, el caso cowell por lo visto la única preocupación para Payne estaba aplacado, su caso fue congelado esta mañana en el juzgado, así que Liam no podía está más satisfecho con el éxito alcanzado de la corporación.

El abogado de alto rango añadió que el próximo lunes, todos estaban invitados a la conferencia de Tomlinson frente al magistrado, un paso muy importante en su carrera y como colegas había que sentirse orgullosos por él, por supuesto que la corporación  también ganaba: el simple hecho de un magistrado del parlamento estuviera trabajando para ellos, imponía más respeto y confiabilidad a la marca, exceso de mercadotecnia pero eso  Louis ya lo sabía.

Antes de que Niall pudiera retirarse de la oficina, Louis lo alcanzo subiendo el elevador: nunca había tenido enemigos en el trabajo y no había porque comenzar a hacerlos.

-No quise hacerte sentir ma... -

-No es necesario, enserio – intervino niall con una sonrisa tranquila.

-Quería asegurarme que todo esté bien entre ambos –

-No tienes de que preocuparte, ya paso… Y mucho éxito el lunes, sorprenderás a todos, estoy ansioso por  la conferencia – con esas palabras despidió a louis mientras presionaba el botón del piso siete, dejo más tranquilo a Louis que le miro con una sonrisa pacífica antes de que las puertas se cerraran.

-Gracias –

No muy convencido volvió a su oficina a trabajar después de desayunar; para ser sincero hoy se sentía muy bien, miraba el reloj aguardaba con  impaciencia volver a enfrentarse a una mirada esmeralda que tenía varias noches atrás atormentándole.

XXX

-Llegas tarde – pronuncio el entrenador al verlo.

Termino de ajustarse la camisa y  colocarse el resto del uniforme, enseguida se puso con rapidez  las protecciones, la bucal y el casco. No tardo, y se  colocó en  formación detrás del pitch de la línea horizontal.  Antes del partido sin querer echó una mirada a las bancas y lo observo entre la multitud como los viejos tiempos. Había transcurrido meses pero aún se sentía como si los plazos fueran minutos, sentado en la fila de siempre, con ese aspecto serio y frio: miro a Ben Winston  que también lo observaba prudente, fugazmente Ben asomo una sonrisa por la época de antaño que saco de quicio a harry.

-¿Qué hace él aquí? – pregunto en seco al equipo en general haciendo su evidente su incomodidad.

-No… Lo sé – respondió el que tenía más cercas.

Harry se acercó unos cuantos  pasos hacia otro jugador: disparejo, al resto oculto su coraje bajo una mirada severa de regaño hacia el de camiseta ochenta y ocho, un hombre de brazos y piernas grandes que a diferencia suya si estaba en posición correcta.

-Mira Carlos, voy a repetir la pregunta y necesito una respuesta ¿Qué hace Ben aquí? –

-Está saliendo con el nuevo chico –