El amor no tiene imposibles

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Se encontraban en la celebración del supuesto compromiso de Diana, lamentablemente para Victoriano, las cosas no habían salido como lo había planeado, y ahora con un par de tragos de más se encontraba cantando aquella canción que tanto le recordaba y le cantaba a su verdadero amor.

V: olvídate de todo menos, menos de mi... bravo, bravo (le decía al mariachi completamente borracho)

Casandra en ese momento hizo su aparición en escena, aplaudiendo y tratando de llevarse a su padre a descansar...

Cas: bravo, buenas noches. Muchísimas gracias por estar. De verdad, gracias por todo.

V: ¡Salud!, Salud (se acercó a un grupo de empresarios para chocar sus copas)

Cas: Buenas noches, gracias (yendo a buscar a su papá que de nuevo se había alejado de ella) papi, papi, ya... salud, buenas noches, buenas noches (alejándose del grupito) ... hágame el favor, gracias (le quitó la copa a su padre y se la entregó a uno de los mariachis que ya se iban)

Cas: Ya tomaste mucho, papá ¿Por qué vamos a brindar? (le decía mientras se dirigían a la casa)

V: no sé...

Una vez en la casa...

V: olvídate de todo, menos de mi... y tan buena que estaba la música mija... y más esa canción... es... esa es la que le cantaba al amor de mi vida...

Cas: papá... ¿de verdad?

V: sí... yo la amaba, la amaba tanto... hubiera dado mi vida por ella... lo hubiera dado todo, todo... pero se fue, me abandonó (decía entre sollozos)

Cas: ¿de qué hablas papá?... (se acercó a él y lo abrazo por la espalda) Mi mamá murió, papá...

V: no, no, no... ella se fue (besó la mano de su hija) ella... me abandonó... olvídate de todo, menos de mi... (siguió cantando)

Victoriano se fue con un destino claro y dejando a su hija más confundida que nunca...

>>>Habitación de Inés<<<

Inés acababa de salir de la ducha por lo que solo se encontraba envuelta en una toalla cuando sintió que tocaban la puerta...

I: ¿Quién es?... (Se acercó hasta la puerta para saber de quién se trataba)

V: Soy yo... Inés, mi amor... mi morenita... (repetía mientras tocaba insistentemente la puerta)

El corazón de Inés brincó al escuchar de los labios de su amado ese "mi amor" y "mi morenita" y para evitar que alguien más escuchara el alboroto que tenía Victoriano, lo dejó entrar, sin siquiera colocarse algo más encima...

I: ¿Qué te pasa, Victoriano? (preguntó una vez abierta la puerta y dejándole el camino libre para que pasara)

V: mi amor... (cerró la puerta a su espalda una vez dentro del cuarto)

Sin dejarla reaccionar Victoriano la estrechó entre sus brazos y la besó como hace tiempo lo anhelaba, ella por su parte solo pudo responder al beso, lo extrañaba tanto... poco a poco se fueron separando hasta que solo sus frentes se tocaban...

V: te amo, mi morenita (su boca bajó a su cuello y posteriormente a sus hombros desnudos regando besos como un loco por aquel cuerpo que tanto amaba)

I: espera, espera, Victoriano (le dijo separándose de él para su pesar) estuviste bebiendo... no puedes llegar y venir a mi cuarto así como así, ¿Qué te pasa?, ¿Qué es lo que quieres?, alguien te puede ver... además tu mujercita debe estar esperándote (le dijo mientras le daba la espalda y con un tono que denotaba sus celos)

El amor no tiene imposiblesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora