Control

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(Caro, dimensión humana)

El viento se sentía extraño, era espeso y casi se podía ver una bruma en él, era como si estuvieran dando la advertencia de que algo malo iba a pasar.

Las sospechas de Caro se comprobaron cuando vio a un pequeño grupo de criaturas reunidas, y entre ellas, la figura de Mohamed resaltaba, justo en el centro de la multitud, en su forma demoniaca, dando órdenes a cada criatura que veía.

-Esto no puede estar bien- susurró Caro, un poco asustada.

-No lo está- escuchó una voz a su derecha –Aprire ha decidido actuar, y Mohamed no la dejará ganar una vez más

Caro volteó a ver a su inesperado compañero, encontrándose con un hechicero cuya cara ya había visto en el pasado.

-¿Dieter? ¿Qué traman ahora?- pregunta Caro.

-Ni idea, solo sé que puede ser nuestra última oportunidad de lograr la victoria

-Entonces es algo importante...

Caro contempló por unos segundos a la multitud, luego dio media vuelta, lista para irse.

-¿A dónde vas?- pregunta Dieter sin detenerla.

-Esta no es mi pela, me marcho, ustedes deberían hacer lo mismo

-Creí que eras un ángel legendario, eso volvería a esta tu pelea

-Debería ser así ¿no es verdad? Sin embargo, las diferencias que Mohamed y Aprire puedan tener, no me conciernen, por eso no me importa, me marcho, si las cosas se salen de control, búscame, solo en ese momento ayudaré

-Acudiendo solo en momentos de crisis ¿eh? Como quieras

Y sin esperar más, Dieter se acercó a la multitud, esperando recibir órdenes.

***

(Aprire, guarida secreta)

Por un momento Aprire pensó que debía quedarse en su guarida y proteger sus tesoros, pero luego se dio cuenta de que la necesitarían en batalla, ya sea para dirigir o distraer, ella sería un gran apoyo para su ejército.

El cuerpo de Faleen no era poderoso, la joven jamás había hecho uso de sus dones, esto hacía que Aprire solo pudiera ocupar la mitad de su poder, tal vez menos, sin embargo, solo sería por unas horas más, pronto tendría un recipiente aún más poderoso.

Mientras tanto, debía encontrar un lugar seguro para los cofres que sus súbditos recién le habían entregado.

Aprire estaba perdida en sus pensamientos, debía planear muchas estrategias si quería tener una oportunidad de ganar, porque sabía que el ejército de Mohamed también era muy fuerte.

Pero se vio obligada a salir de esos pensamientos cuando escuchó unas risas provenientes de su habitación.

Con una gran sonrisa entró al lugar.

-¿Quién se encuentra aquí?- preguntó Aprire riendo traviesamente.

Tina, Angel y Jared corrieron a saludarla.

Los tres estaban cubiertos de un polvo blanco que Aprire no pasó por alto.

-¿Y esto?- preguntó ella.

-Es nieve- responde Jared –Perdona, estábamos jugando y se salió de control

-¡Pero ya limpiamos!- se apresura a decir Angel.

-¿Ya? ¿Tan rápido?- pregunta Aprire, mirando a su alrededor y comprobando que el lugar estaba impecable –Sorprendente... pero no deben jugar aquí

El génesis de Aprire [Las crónicas de Abril #5]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora