💠El Dolor De Un Corazón Roto.💠

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KyungSoo seguía llorando y abrazando su almohada, aún no podía ni quería creer lo que vio. Su marido tomándole la mano a otro tipo, sonriendole, actuando como una pareja de verdad y eso le lleno de curiosidad, ¿quién era aquel tipo?

Tomo su teléfono y llamó a Kai, esperando a que este se dignará a contestarle.

—¿Aló, cariño, pasa algo?

—Kai, ¿estás ocupado? ¿Sigues en la oficina? —tenía curiosidad el saber si Kai le mentía.

—Sí, amor. Aún sigo en la oficina.

KyungSoo se quedó callado y sintió sus lágrimas empezando a salir por sus bellos ojos.

—Y-ya veo, entonces no te interrumpo. —cuelga y se pone a llorar un poco más fuerte hasta que se calma después de una hora— Es un mentiroso... Necesito a Tao. —busca su móvil y llama a Tao.

—¿Hyung, pasa algo? —fue lo primero que escuchó y luego un quejido— Ay, Kris duele.... Se más gentil.

La imaginación del ojos de Búho voló demasiado pues no pensó algo verdaderamente sano.

—Gege, en serio... Hazlo suave... Me duele...

—T-Tao... —no quería interrumpir.

—Ay~ para, gege... —se oían cosas raras.

—Pequeño, no quiero interrumpir... Te hablo mas... Ta...

—¿De qué hablas Hyung? Kris me está dando un masaje de espalda porque me duele mucho.

—Ah, con que era eso. —suspira aliviado y suspira— ¿Están muy ocupados?

—No, ya termino de darme mi masaje, ¿por qué, hyung? ¿Sucedio algo? 

—¿Puedo irme a quedar a su casa? —se le quiebra la voz.

Tao se lo comento a su lindo novio y este dijo que sí sin dudar.

—Claro que puedes, hyung. Empaca lo que quieras traer y nosotros vamos por ti.

—Muchas gracias, pequeño. —termina la llamada y mete en una mochila su pijama, ropa que usará al día siguiente, más otras cosillas.

Para cuando termino se sentó en la sala a esperar a la pareja, tenía que desahogarse con alguien y el candidato para ello siempre fue Tao, es comprensivo y da muy buenos consejos. Baek también lo hacía, pero de un tiempo para acá este se había distanciado mucho del panda y de él.

Sus pensamientos se vieron interrumpidos por el timbre sonando, no sabía cuanto había pasado sentado sumergido en sus pensamientos. Se levantó tomando su mochila y abrió la puerta.

—Hyung, ya llegamos.

—¿Y Kris?

—En el auto, ¿nos vamos?

El bajito asintió y ambos fueron al auto donde los esperaba un chico de cabello rubio.

—Hola, Kris. Buenas tardes. —le dijo al entrar en el auto.

—Hola, Soo. —sonríe y arranca cuando termino de subirse su novio.

—Hyung, tienes que contarme lo que te paso.

—se sorprendió y lo miro— ¿A qué te refieres?

—Tú no sonríes mucho pero te ves feliz, tu mirada lo dice... Pero ahora, esa mirada es de tristeza, como si algo te estuviera matando muy dolorosamente.

—N-no es nada. Ya te platicaré cuando lleguemos.

Tao lo miro con preocupación y suspiro, no lo obligaría a que le dijera, simplemente esperaría a que su Hyung le diga.

✳El Dulce Dolor De Amarte [KaiSoo]✳Donde viven las historias. Descúbrelo ahora