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  Que ella le seguía gustando a Luke no era una fantasía; sus amigos no podían estar equivocados. Inmediatamente se paró en seco y su sonrisa se congeló '¿Pasaría lo mismo si Luke entrara su salón?' No.
Él ya había entrado cuando ella acababa de ingresar y a él lo habían castigado llevándolo al salón de Phoebe.
Desde entonces Luke la veía insistentemente, incluso la maestra le había reprendido por estar tan inquieto, ya que no estaba en el salón de vacaciones.

Phoebe también era rebelde por naturaleza pero ahora todo el tiempo estaba provocando que la sacaran de la clase para coincidir con Luke, que bastante seguido también estaba en el pasillo por ser igualmente indisciplinado.

Sólo una vez coincidieron los dos fuera de su respectivo salón, en la última hora de clases. Sin embargo, ninguno de los dos hizo el menor movimiento por entablar comunicación. Se la pasaron recargados contra la pared, ella con las manos unidas atrás y él con los brazos cruzados al pecho, mirándose. Así estuvieron todo el tiempo que faltaba para la hora de salida. Era el ultimo día de clases, venían las vacaciones largas y no cruzaron palabra.

Everything I didn't say Donde viven las historias. Descúbrelo ahora