Pandemonium.

Pasado.

Esta vez Zeth decidió cambiar el "campo de entrenamiento", no me dijo donde iríamos, solo me ordenó subir a su auto, era un Maserati Grancabrio deportivo negro, ¿Cómo lo se? Porque me lo recalcaba a cada momento. Le dije que era feo, que prefería el Audi r8 spyder y se molestó, por lo que no habló en todo el camino.

— ¿No vas a decirme a dónde me llevas? — nada, ni siquiera me miraba, ¿Cuán infantil puede ser?

El viaje era largo y agotador, así que quise poner música para acallar el silencio, acerqué lentamente mi mano a la radio para encenderla.

— No toques a un auto tan feo como éste — me dijo después de golpear mi mano. Ya se cuan infantil puede llegar a ser —. Ya llegamos.

Al bajarme vi una enorme casona de color verde opaco y marcos blancos, se veía antigua y abandonada. Zeth sacó unas llaves con las que abrió la puerta y me hizo una señal con su mano para que ingresara primero a la propiedad.

— ¿Este lugar es tuyo?

— Si, pero hace mucho tiempo que no venía.

— Puedo notarlo — la casa estaba llena de polvo y telarañas por todos los rincones.

— En esta casa me convirtieron.

— ¿Qué? — no logré escuchar lo que me había dicho, aunque parecía que hablaba consigo mismo.

— Nada importante. Para empezar con la lección nos acercaremos a la orilla de la laguna, sígueme por aquí.

Fuimos a la parte trasera de la casa, y el paisaje era realmente aún mas hermoso que por el frente. Caminamos unos metros y nos sentamos en el borde de la laguna, el uno frente al otro.

— Lo que te voy a enseñar ahora es algo complicado, no lo tomes a la ligera. Uno de los dones que tienen algunos demonios, me corrijo, que tiene el demonio heredero del Inférnum, es el de controlar el espacio y tiempo.

— Hablas de viajar al futuro ¿Cómo la película?

— Emm...No, dejémoslo en la capacidad de viajar al pasado para entender el presente. Hoy intentaras viajar a tu pasado.

— ¿Y cómo le hago?

— Trajiste lo que te pedí.

— Si, ten — días antes Zeth me había pedido que buscara algo con significado personal y que tuviera desde hace tiempo.

— Muchas veces es mas fácil conectarse y tomar fuerza de "amuletos", sobre todo para ti que eres un tonto principiante — lo fulminé con la mirada, odiaba que me hicieran sentir como un inútil —. Dame tu mano.

— ¡Aaaaaaaaah! ¿Pero qué haces? Podrías perder el control y...

— Tranquilo.

La sangre caía de mi mano hacía el suelo donde estaba el amuleto. Sentí como si un rayo cayera sobre mi y me partiera en dos, recorría mi espalda frío y sin piedad, soltando todos mis instintos.

*** ZETH POV ***

Lo vi quedarse inmóvil, con los colmillos fuera y ese extraño y único color que envolvía a sus ojos, ya estaba en trance, este chico obviamente tiene un potencial increíble.

***Damon POV***

Cuando abrí los ojos, me di cuenta de que me encontraba desnudo, tirado en la orilla del lago, pero no estaba Zeth a mi lado. Luego escuché gritos bastante desagradables y agudos.

— ¡Aaaah! !Aquí hay un hombre desnudo! — era una joven, calculaba que de unos 15 o 16 años, llevaba un enorme vestido de esos antiguos, con el pelo rizado y semi amarrado, intentaba torpemente taparse la cara con un abanico.

— ¡¿Qué pasa?! — gruñía furioso un hombre de unos 50 y tantos años, de pelo castaño y barba, que venía saliendo de la casona con un arma parecida a una escopeta.

Con mis uñas logré sin que nadie se diera cuenta, cortarme la palma de la mano y ponerla en el costado de mi torso, manchándolo indiscriminadamente.

-Unos... unos ladrones... me atacaron .— ¿Qué más podía decir?. Me pareció una buena mentira, bastante creíble.

— Ve dentro con tus hermanas, Emma. Llama a Dante — dijo el hombre, bajando el arma y acercándose a mi con precaución.

— ¿Qué sucede Thomas? ¿Por qué tanto alboroto?

Al parecer ese era Dante, parecía de la misma edad que el primer hombre, llevaba el pelo negro muy corto.

— Acércate, ayúdame a levantar a este joven — Thomas me cubría con su abrigo mientras que ponía mi brazo por encima de su cuello para lograr levantarme y Dante imitó sus movimientos.

Entramos a la vieja casona verde opaco y con marcos blancos, que ahora no parecía tan vieja. Subimos las escaleras y me recostaron en una cama muy grande que olía a rosas.

Llamaron a una de las hijas, probablemente era la mayor, supe que sería ella quien me curaría, así que hice que me vendara, pero utilicé el glamour para que no supiera que la herida era falsa.

Después de unas horas, Thomas volvió y en sus manos traía ropa de hombre, que dejó sobre la cama para que yo la usara.

— El hijo de Dante tiene mas o menos tu edad, así que puede quedarte bien su atuendo. Si te sientes en mejoría, baja al comedor, cenaremos y tendrás la oportunidad de conocer a mi familia.

— Gracias por todo — le respondí, me sonrió cálidamente y se fue a paso lento.

Bien, analicemos la situación, ¿Estoy en el pasado? pero no es mi pasado, es un pasado más pasado. Creo que me estoy confundiendo más de lo que debería, tengo que actuar normal para que esta gente no crea que estoy loco. ¿En que época estaré? La historia nunca se me ha dado bien.

Baje las enormes escaleras y llegué a parar al comedor, la familia se encontraba sentada en la mesa, a la cabecera los dos hombres, y en medio tres mujeres.

— Bienvenido...— Thomas paró al no saberse mi nombre, no hubo tiempo para decírselo.

— Damon, mi nombre es Damon, siento mucho las molestias.

— No te preocupes, déjame presentarte a mis hijas, la mayor Caroline, Anne la de en medio y por ultimo mi Emma de 16 años. Damon siéntate aquí a mi lado.

Alguien toca la puerta.

— Debe ser mi hijo, discúlpenme un momento — Dante se levantaba sonoramente para ir a abrir la puerta.

Cuando llegaron los dos a la mesa, Thomas me dijo que el hijo de Dante era el prometido de Anne. Él al verme se presentó.

— Soy Adrien, es un gusto — frió, serio, de ojos negros, cabello azabache alborotado, alto, delgado.

Imposible...