Donde tú vayas... iré [Visión Matt Cortez] I

Capítulo 6

"Clima peligroso"

La vi entrar y nos fuimos.
Jack seguía conduciendo, mientras yo miraba a la ventana perdido en mis pensamientos.
Voy a hacer todo lo posible por ella, para que no le pase nada.
Me llega un email de Esteban.

-"Querido, la encontré y, a ti también. Tú estabas con ella. Eres un traidor."

-Maldición. -dije en voz alta.
-¿Pasa algo joven Matt?
-Esteban, eso es lo que pasa. -dije con la mandíbula tensa.

¿Y si se da cuenta de mis planes?
Debo apartarla de él.

-Ah, joven.
-¿Sí?
-Dejé su número de teléfono en la mochila de ella.
-Bien.
-¿Por qué es tan importante para usted?
-Pasó hace tiempo... -susurro -no debí llevarla a la playa...
-Joven, ¿Qué está diciendo entre murmuros?
-Ah, eh, nada... Cosas mías.

Suspiré con ruido.
Debo responder. Siempre hay que ser educado.

-"Joven Monterrey, por favor no haga cosas de las que se va a arrepentir."

No se tardó en responder.

-"El que se va a arrepentir aquí no seré yo, joven Cortez."

-Idiota... -dije enojado.
-Joven, esas palabras...
-Lo siento, pero es que él...
-Tranquilo.

No lo voy a hacer esperar.

-"¿Quiere apostar? Ah no, puede perder."

Pasan minutos y no responde.
Bien.

-Llegamos joven.
-Sí.

Caminé en dirección a mi despacho...

"-Matt, hijo, ¿Qué estás haciendo?
-Trabajo.
-¿Y tus estudios? Creía que Roger te llevaría al colegio.
-Así no podría trabajar madre.
-Hijo, el trabajo se inicia cuando tienes...
-No, voy a continuar.

Ella suspiró dejando la habitación.
(...)"

El profesor particular ya se fue. Ahora debo terminar los trabajos que me dejó mi padre.
Pasa el rato, no me he podido quitar a Roth de mi cabeza. Cuando la vi, mis pensamientos de mezclaron, sentía cosas en mi estómago... Y sentir esos labios. No sé qué me pasó, fue como un impulso.
Me llegó un hola en mi celular.

-¿Quién es?
- Soy Roth.
- Ah, Hola Roth. Parece que viste mi n° en tu celular.
- Sí, pero no entiendo como quedó ahí...
- Ah eso... Le pedí a Jack que en el recreo colocara el papel atrás de tu celular.
- Si alguien lo hubiera visto... Hubieras tenido problemas...
- Y yo tendría motivos
- ¿Por qué no me los diste en persona?
- Tenía que ir a una reunión importante con mi padre.
- Ah... Jack era quien nos llevó a mi casa... ¿o no?
- Exacto... Tiene un hijo, es 1 año mayor que yo... Se llama Michael... Medimos lo mismo.
- Y tu le dices Mike... ¿O no?
- Sí.
- Ah...
-  (＾ω＾）
- ¡Qué tierna la carita!
-  Ja ja. Gracias... Y ¿Qué haces?
- Estoy acostada hablando contigo. ¿Y tú?
- Sentado. Hace poco terminé de ordenar unos papeles. Y también hablo contigo.
- Ah.
- Lo siento. Me encantaría seguir hablando contigo. Pero tengo que salir. Adiós.
- Adiós Matt.

Ella me encanta.
Para que Roth no se canse de mí tan rápido, tengo que ser amable.
Comienzo con el último expediente.
Terminé y suspiré.
Me levanté de la silla caminado hacia mi habitación. Enciendo la TV y aparece un reporte del clima.

-... En otras noticias, se ha identificado una alteración de t° en Buin... -decían en la TV.
-Roth... -susurré.
-...Puede haber una horda de calor o un lago en sus casas... No está especificado... Ahora cambiando de tema.... -explicaba el señor de la TV.

Demonios, su casa no está preparada para la lluvia.
¿Qué hago?
Me llega un email.

-"Noticias, mañana estaré por Buin querido."

Mier... Me prometí protegerla.

-A ver Matt, -digo solo -fueron meses de súplicas hacia tu padre para poder hacer esto. La llamaré.

Comienzo a llamar.

- ¿Alo?
- Hola Roth.

Su voz...

- Oh... Hola Matt
- Roth, ¿Escuchaste la TV?
- Eh... Sí... Los cambios de clima....
- Sí, exacto... Justo donde tu estás...
- Sí, estamos preparadas para el calor...
- Pero puede ser lluvia...
- Sí, pero no creo que tengamos tanta mala suerte....
- (suspiro) Sí, pero igual estaré al tanto. ¿Te molestaría que fuera 1 vez a la semana a tu colegio?
- ¿Para qué sería?

Para protegerte.
¿Qué digo?

- Para nunca olvidar tan lindo rostro.

No he mentido del todo.

- Ah.. Eh... Yo no tengo ningún problema... No sé si mis profesoras acepten...
- La directora de tu colegio me dio la autorización de ir, si tus profesores tienen problemas en que yo esté... Que hablen con ella.
- Oh... Está bien...
- Me encantaría seguir oyendo tu linda e inocente voz, pero tengo que organizar los papeles de un reunión que tengo con mi padre para mañana. Adiós.
- Adiós Matt.

Esa voz... ¿Qué demonios me está pasando?
Las palabras del correo de Esteban me dan vueltas por la cabeza.
No Matt, tú vas a protegerla, cueste lo que cueste.
Aunque, quizás un día me odie, la voy a querer igual.