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*Les recomiendo leer mientras escuchan esa hermosa canción de una de mis bandas favoritas para una mejor experiencia♥*







Sus tibias lágrimas eran acariciadas por la leve brisa que las congelada y las secaba como si en un leve susurro pidieran que estas se detuvieran; pero siendo tan leve que no podía ser oído por la cascada que caía sin autorización desde el borde de sus rasgados ojos.

Sus mejillas contrastaban con el color tan pálido de su piel al estar teñidas de un tenue rosa, al igual que su nariz debido al frío de noviembre que azotaba cruelmente la ciudad, cubriéndola por completo con un manto blanco y espeso sobre los techos y por la calle.

Los diferentes colores de las sombrillas adornaban la calle con personas que iban y venían de un lado al otro para poder refugiarse de la lluvia. Aunque  habían más paraguas negros que nada y entre ellos, ese único que destacaba entre todos con su color rojo intenso.

Sólo un inútil objeto, a los ojos de su dueño, pero con una montón de recuerdos. Bajo el mismo se encontraba caminando sin prisa; admirando la hermosa lluvia que le regala esa tarde el nuboso cielo que cubría los dorados rayos luminosos del astro imponente del día.

Sus ojos ardían por el tiempo que llevaba llorando ¿Cuántos besos habían compartido bajo ese mismo objeto? Demasiados, de eso estaba seguro. La nostalgia invadió su pecho, creando una gran opresión pero sonrió mientras en su mente se colaban como intrusos los recuerdos de esos roces, de sus juegos, de esas risas, Incluso de las discusiones que siempre acababan cuando uno de ambos terminaba cediendo para posteriormente hacer el amor.

Lágrimas, más lágrimas fue lo que obtuvo y con el puño de su abrigo secó aquellas traviesas gotas amargas que no habían dejado de caer desde que abandonó su casa; Ese lugar vacío que dejó de llamar hogar porque todo rastro de felicidad se había esfumado de cada rincón.

Sacó su teléfono, se puso los auriculares y puso en modo aleatorio su lista de reproducción favorita, esa que llevaba por nombre "No me olvides", y ahí estaba otra vez esa sonrisa boba al escuchar las canciones que habían sido especialmente seleccionadas por su amado. Muchas de esas canciones eran las que le cantaba en las noches cuando no podía dormir o cuando salían al parque mientras su cabeza estaba apoyada en los muslos de su compañero y la mano del mismo acariciaba con delicadeza y devoción su cabello al estar ambos recostados sobre el verde césped.

Inconscientemente dejó de caminar y cerró sus ojos mientras cantaba. El paraguas calló al suelo y fue ahí cuando salió de su ensoñación, recogió el objeto pero esta vez lo cerró.

La lluvia mojaba su cabello y se mezclaba con las lágrimas traidoras que aun no cesaban mientras seguía su camino.

Un dulce aroma le inundó y se dejó llevar una vez más por los recuerdos. Su cuerpo reaccionó por si solo en búsqueda de aquel aroma a chocolate, café y canela que tanto conocía.

Abrió la puerta de aquella pequeña tienda y fue recibido por un caluroso abrazo de la mujer que atendía el lugar para segundos después ser regañado por la misma debido a que estaba empapado, él dijo que no importaba ya que le gustaba la lluvia, así que pidió lo mismo de siempre; dos cafés con chocolate para llevar.

"No sigas creciendo" pidió la amable señora extranjera mientras le sonreía con cariño. Yugyeom sonrió y asintió pero antes de abrir la puerta para marcharse, dejó ambos cafés sobre la mesa más cercana, corrió para abrazar por última vez a la mujer y le dio un cálido beso en su mejilla para finalizar con un "Gracias" y así retirarse.


❄❄❄


Con su pedido en las manos, mientras de su muñeca colgaba aun el paraguas rojo, se puso bajo techo para poder refugiarse de la fría nieve que había comenzado a caer, tenía frío y lo único que deseaba era poder llegar a su destino final.

Cuando apenas faltaba una cuadra para llegar, su corazón se aceleró y comenzó a temblar. No sabía si era producto del frío o de sus nervios; sus lágrimas se detuvieron, suspiró e intentó tranquilizarse cuando ingresó la llave en la cerradura, giró el objeto de meta y una sonrisa se formó en su rostro al escuchar el sonido de que había entrado, sumado al grito de alegría que resonó por toda la casa "Amor" se escuchó y sus labios fueron estampados sobre los de Bambam rápidamente pero con dulzura.

Su felicidad fue incomparable porque había olvidado todo el dolor, no le importaba abandonar su casa, ni llorar por todos los insultos que fueron escupidos con veneno por parte de sus padres desde que confesó abiertamente su homosexualidad porque la felicidad en su familia desapareció, pero la suya aumentó al encontrar su hogar entre los delgados brazos de ese chico, al encontrar amor en sus labios y compañía a su lado porque sería capaz de dejar todo detrás con tal de llegar junto a él en una tarde lluviosa para compartir un simple café hecho por la madre del mayor para admirar la lluvia a su lado.

No importaba que su padre o su madre no aceptara su matrimonio porque en los brazos de Bambam, nada más importaba.

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⏰ Última actualización: Nov 25, 2016 ⏰

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Rain ❀《YugBam》O.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora