Capítulo 2

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- ¡Mierda!.- golpeó una estantería fuertemente quebrando sus puertas de cristal, yo pegué un grito ahogado y me sobresalté cerrando mis puños... Se escuchó un disparo.

Una mano agarró mi muñeca y tiró de mi a no sé donde, yo estaba un poco aturdida aún por toda esta mierda, sacudí la cabeza saliendo de mis pensamientos, el grandulón de antes me había tomado de las muñecas y habíamos salido por la puerta de atrás donde un poco más adelante había un Lamborghini  Veneno parqueado, al llegar llegar al lado de este, el muchacho soltó mi mano y subió al auto, por instinto imite su acción. Encendió el auto y arranco increíblemente rápido, un silencio incomodo nos abrazaba, yo giré mi cabeza hacia el quien seguía con su mirada al frente.

Empecé a detallar su cara , ¡joder! Estaba como quería el maldito, su mandíbula ligeramente cuadrada, nariz respingada y labios en forma de corazón, el de abajo más grueso que el de arriba, el auto paró de golpe sacándome de mis pensamientos.

-Baja de mi auto .- Soltó de repente, su mirada seguía al frente y su rostro no tenía ninguna expresión.

-¿Qué?... Pero... .

-¿Qué esperabas?, ¿que te invitara a mi casa y tomáramos té mientras escuchamos música clásica?... ¡Largo! .

Furia y desesperación predominaban en mi interior, baje del auto dando un portaso y lo último que pude ver sobre aquel chico fue la matrícula de su auto.

Mire a mi alrededor y en el cielo él sol le daba paso a la luna ¡Mierda! No quería estar  por estos lados sola en la calle, que por cierto estaba llena de vagos, borrachos, algunos hablando y otros simplemente durmiendo.

Empecé a caminar sin rumbo alguno, un viento frío azotó mi cuerpo, y yo únicamente llevaba como abrigo un chándal, hacia bastante frío.

A cinco minutos de ir caminando un letrero de lo que parecía ser una "cafetería" al fin me dio a saber donde me encontraba y no era bueno...
Definitivamente no era nada bueno andar por las calles donde ni siquiera una patrulla de policías se atrevería a entrar, el lugar donde mataban a más de 3 personas por día, según los noticieros hay que alejarse de B.R.O.N.X. .

Me detuve en la "cafetería" que parecía mas bien un edificio, empuje la puerta y el lugar estaba casi vacío, solo estaba la mujer de piel morena en la computadora limando sus uñas, una chica de pelo rojizo a la izquierda y tres hombres conversando de espaldas en la mesa del fondo.

Aun no había entrado en la  cafetería, estaba dudando y tenía buenas razones, después de todo este barrio no es conocido por ser el mejor de todos, el olor a waffles hizo rugir mi estomago, no lo dude dos veces y entre, la mirada de los chicos se pusieron en mi, pero las ignore.

-¿si? .- Dijo la morena apartando la mirada de sus uñas,cuando se dio cuenta de mi presencia.

-Quiero algo de comer por favor .- Hablé

- ¿De verdad? No me digas, pensé que venías a comprar lencería de victoria's Secrets .- Rodó los ojos, yo bufé, ella seguramente había ganado el premio a la empleada del mes muchas veces, notese mi sarcasmo.

-Solo dame unos waffles y una café.- Esta vez respondí de mala gana, ella solo sonrío.

Espere unos segundos para poder comer, cuando lo hice mi estomago saltó de felicidad, observé con atención el lugar, y mi mente recordó al chico de hace rato, ¿quién era?¿porqué tenía problemas con roberth? ¿porqué me ayudó cuando llegó la policía?, y mejor aún... ¡¿porqué ese hijo de puta me dejó en medio de la calle y sola?! Aunque debo admitir... Que ni siquiera lo conocía y subí a su auto, pero en fin.

INSIGNIA MORTALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora