Valeria permaneció aislada un tiempo en su habitación. Pensar que tal vez, podría dañarlos o volverse malvada la aterraba. Ella era descendiente de Lucifer. Del mismísimo diablo.
Recordó por un momento el descontrol que había sufrido en aquella pelea con Ashley, no quería volver a sufrirlo. No quería hacer daño a ningún inocente. No quería convertirse en un monstruo. Recordó las palabras que le había dicho Marcus antes de salir corriendo:"Si es cierto lo que estás diciendo, querida, no deberías gritarlo a los cuatro vientos. No hay muchos cazadores que conozcan la existencia de dichas criaturas, y precisamente no son criaturas que caigan en gracia en nuestra profesión"
Bajó a la biblioteca para investigar un poco sobre el tema.
"En la tradición cristiana, Lucifer representa al ángel caído, ejemplo de belleza y sabiduría a quien la soberbia condujo a los infiernos, transformándose en el diablo.
Esa era la información habitual con la que llegaba a encontrarse, pero nada que le proporcionara información sobre su propia existencia. ¿Sería un peligro para aquellos que la rodeaban? Un carraspeo interrumpió sus pensamientos, giró la cabeza para encontrarse con Marcus.
-Te he traído algo de comer.
-No tengo hambre- murmuró evitando mirarlo.
-Valeria, llevas horas aquí encerrada, debes descansar un rato- colocó una mano en su hombro, pero ella lo apartó bruscamente.
-Por favor, no quiero volver a dañarte.
Marcus se posicionó frente a ella.
-No lo has hecho.
-No sé exactamente qué soy, pero puedo asegurarte que la sangre de un ángel está corriendo por mis venas. Y por si fuera poco, no es de cualquier ángel, que ya es bastante loco que existan... ¡No, es la del mismísimo Lucifer!- golpeó la mesa frustrada.
-No puedes estar segura de ello.
-Tú mismo viste lo que provoqué allí dentro. Mis visiones, la curación acelerada, la energía que guardo en mi cuerpo... Cuando estuve bajo la hipnosis pude verlo.
Él guardó silencio.
-Me sonrió. ¿Y si viene a por nosotros por mi culpa?
-Eso no pasará.
-Querría saber cómo matar a un ángel.
-¿Para qué?- Valeria guardó silencio- No estarás pensando lo que yo creo ¿verdad?
Su silencio se lo confirmó.
-¡Ni de broma! No quiero ni que se te pase por la cabeza- la obligó a mirarlo.
-Si mi visión no se ha equivocado es lo que soy...- un nudo se formó en su garganta.
-Aunque así fuese. Seguirías siendo tú.
-Eso no lo sabes- negó con la cabeza.
-Tú eliges ser el monstruo... Tienes opción.
Valeria meditó sus palabras un minuto, Marcus apretó suavemente su brazo, dejó el bocadillo en la mesa, al descender la vista hacia la mesa observó el lomo de uno de los libros, uno que tenía un símbolo de un escudo de armas formado por una lechuza con las alas extendidas inscrita en el interior de una circunferencia dorada al igual que el ave. Tragó grueso antes de dirigirse a ella.
-Valeria, ¿de dónde has sacado ese libro?- ella siguió su mirada hasta posarla en el mismo tomo.
-Lo encontré en una de las estanterías de mitología, supuse que también hablaría del tema.
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Fear Of The Dark
ParanormalOscuridad, ¿alguna vez os habéis preguntado por qué cuando somos pequeños nos aterra estar envueltos en ella? Valeria Grey, una joven de diecisiete años tiene a la oscuridad presente en su día a día. Vive continuamente la incertidumbre de no poder d...