Tomorrow

Pequeña introducción

Segundo de bachillerato, el último curso de nuestra etapa en el instituto, había sido un verano increíble, no sólo por haber encontrado a mi media naranja si no porque habíamos superado la edad para poder entrar a la danse, la discoteca de la que habíamos oído hablar a lo largo de toda nuestra época.
Amanda se había enrollado con más de 15 tíos, por no hablar de Kenny, que había perdido la virginidad aquel agosto con un gilipollas...
Yo sin embargo estaba centrada, algo raro a juzgar de mi oscuro pasado de alumna rebelde y con mala fama de secundaria, pero no cabía duda, había conocido ese cercano julio a mi alma gemela, Roberto McChain ese joven alto, moreno con unas preciosas pecas que le aportaban aquel toque agraciado a su cara, esos ojos verde esmeralda capaces de enamorar a cualquier mujer, su carácter tímido a la par que alocado en muchas ocasiones era el que a mí me volvía loca, era él el chico con el que quería compartir el resto de mi vida.
Nunca habíamos hecho nada más que liarnos pues él estaba enamorado pero quería ir despacio al igual que yo en verdad, yo nunca he sido ninguna santa, aunque, ni mucho menos, he sido como mis mejores amigas Amanda y Kenny, pero al fin y al cabo no existe ningun tipo de problema con su forma de ser, son mis mejores amigas desde primaria y siempre han sido muy alocaldas, Amanda es la típica amiga que no suele expresar sus sentimientos, que pasa de todo, que se mete en problemas muy regularmente, es rebelde y extrovertida, muy abierta a lo nuevo y está obsesionada con el rap, físicamente es una chica morena, de ojos café y pelo ondulado, con muchas curvas aunque delgada. Kenny por el contrario es una chica pálida, rubia de ojos azules, demasiado obsesionada con lo que la gente piense de ella, tiene un novio que a ninguna nos hace mucha gracia, Lauren Bagra, conocido por ser un mujeriego y por quitarle la virginidad a Kenny.
-Ofelia ¿estás despierta ya?
Me preguntó mi madre desde la cocina, en la que me estaba preparando el desayuno.
-¡Si mamá!
Le grité mientras me empezaba a maquillar.
-Pues a empezar otro año.
Pensé mientras me aplicaba el rímel.