Oscura, esa era la palabra ideal para describir aquella noche. Aquella no che en la que todo había cambiado. Aquella noche en la que Khloé se dio cuenta de la dura realidad.
Khloé
Cerré la puerta de un golpe, estaba cansada luego de una larga jornada en la universidad y para colmo no puedo tener un poco de calma en mi casa. Mis padres estaban discutiendo otra vez, mi hermano se encontraba en su habitación con sus tontos video juegos y yo en mi habitación intentando ignorar los gritos que vienen de la sala.
Me recosté en mi cama y observe el techo. Mañana se llevaría a cabo la caza anual. Es una tradición en este país. Cada año las personas dejan de lado sus modales, toman un arma y salen a cazar todo lo que se atraviese en su camino. No importa especie, raza, edad, género o posición social; durante esa noche, no existen apellidos o nombres importantes, si te descuidas, te cazan.
Si me preguntan, creo que es una bestialidad, es el siglo 21, no el 16, existen leyes y debemos respetarlas. Pero los humanos también somos animales y los más peligrosos. También necesitamos sacar nuestro lado primitivo de vez en cuando. Yo por mi parte, no participo, nunca lo he hecho y nunca lo haré. Tengo muchos amigos que, al igual que yo, prefieren permanecer en casa viendo películas, pero otros se "divierten", así lo llaman ellos, toman sus mejores armas , las cargan y recorren las calles en busca de una víctima.
Uno de los fanáticos más fieles de esa noche, es Kai ,mi novio. Él y yo hemos estado juntos desde hace 2 años. Se preguntaran que hace una chica buena como y con un admirador de la caza, bueno, con el tiempo aprendí a aceptar el hecho de que eso lo atrae y el comprendió que a mi no, por lo tanto el día de la caza, lo pasa junto a mi hasta el anochecer, luego de eso, se sube a su auto y no lo veo hasta la mañana siguiente en la universidad.