-Me llegó mi carta para Hogwarts- suspiramos a la vez.
-¿Qué?- exclamo sorprendida.
-Lo que escuchaste.
Todavía no puedo procesarlo, es mejor de lo que pensé.
5 minutos antes.
Salí del aula y le hice una seña a mi amigo para que me siguiera.
-Tengo algo importante que decirte- solté sin saber como reaccionaría: probablemente se alegraría por mí, ya que no era muy celoso. Sabría comprenderme, sabiendo o imaginando lo contenta que estoy, toda mi vida esperé esta carta.
-Yo también.
-Vos primero.
-No, vos
-No, vos.
-A la vez.
-Está bien.
-1...
-2...- le sigo
-3...
-Me llegó mi carta para Hogwarts.
...
-¿En serio? - le pregunté.
-Totalmente.
Enseguida lo abracé. Estaba muy contenta. Hoy era el último día de clases, por tanto, en 2 meses iría a Hogwarts, ¡con mi mejor amigo! ¡Y conoceré a los Potter!
El resto de las clases no pude concentrarme, pero como era el último día de escuela Muggle para mí, no me importaba, tras mucho suplicar a mis padres, habían accedido a que vaya a la secundaria de mis sueños, y en un mes iría al Callejón Diagon con James (porque resulta que mis padres estaban enterados de su carta pero no me lo habían dicho).
El mes pasó volando. En este momento estoy comprando con James, nuestros padres están intercambiando más dinero muggle por más dinero mágico.
Cuando pasamos por la heladería, y compramos helados, una señora nos interrumpió y dijo:
-Que lindo par de gemelos- y se fue.
Nosotros nos reímos por la confusión.
- ¡Que asco ser gemela tuya! - bromeé.
-Tienes que admitir que sería el gemelo alfa.
-¡No! ¡Yo sería la gemela alfa!
- Mentir está mal- me guiñó un ojo.
Yo reí. En eso, llegaron nuestros papás.
Las compras fueron como yo esperaba. Pero todavía faltaba lo más importante: la varita.
Fuimos a Ollivander's donde me imagino que algún descendiente suyo nos atendió.
Primero le flexible. mes una de acebo.
El trató de firmar chispas, pero rompió un vidrio. Luego de un par de varitas más se decidió por una buena para Transformaciones.
A mí, me dió primero las que le había dado a James, consiguiendo los mismos efectos. Después intenté con una de núcleo de pelo de unicornio bastante flexible. Casi le quemo en vestido a mi mamá.
Finalmente, en señor me dio una que funcionó a la perfección, no se explicarlo, solo sabía que esa era la correcta. Pude hacer chispas y todo.
- Es de saúco, una rareza.
Abrí los ojos como platos. Saúco, había dicho saúco como la varita Invencible, la vara Letal.
-¿¡Saúco!?- Exclamamos yo y James a la vez. Sonrío por la reacción de James.
ESTÁS LEYENDO
Chole y el anillo encantado
RandomChloe es fanática de Harry Potter. Tiene 11 años. Ella cree que vive rodeada de Muggles, y piensa que ella también lo es. Ella se sorprende cunado le llega su carta de Hogwarts, no solo a ella, sino a James, su mejor amigo, nombrado así por la saga...