9 Días Con Lu → HunHan

día cuatro

Posesivamente, perfectos

Despertar había sido una osadía, un reto; faltaban apenas unas dos horas para darle la bienvenida al medio día y Luhan y Sehun seguían siendo un desorden de extremidades en el piso de la sala con todas las ventanas cerradas y una risa sarcástica viniendo de la cocina.

Luhan fue el primero en abrir los ojos cuando se topó con el suave y delgado cuerpo de Sehun a su lado, con sus piernas y cabeza situados en su estómago.

La misma risita seguía resonando. Era Jongin, riendo con un vaso de jugo de naranja en las manos.

-Nunca amaneciste en mi cama, pero amaneces en la cama de Sehun -comentó a modo risa-. O en su piso, mejor dicho.

Luhan lo ignoró rodando los ojos, se levantó a duras penas sacándose de encima a Sehun, escuchando apenas un leve quejido y nada más, no se inmutó por el movimiento y en su lugar se acurrucó más en las sabanas.

-¿Cómo entraste? -preguntó Luhan.

-Tengo llaves de este lugar.

Luhan lo miró mal, no puedo evitarlo hacerlo por semejante confesión. Jongin soltó una risa bastante graciosa.

-Hyung, es para este tipo de escena en las que Sehun amanece en los brazos de alguien más y no puede despertarse, no pienses cosas locas.

Si Kim Jongin creía que diciendo es iba a lograr que Luhan dejara de esas ideas locas y errantes que maquinaba en su mente pues estaba equivocado, porque ahora había mucha información innecesaria que no estaba ayudando para nada.

-Digo, yo uh -Que inteligente es Jongin, pescando la hostilidad cuando se es presentada-. Yo t-te traje esto.

Nervioso le mostró un bolso que reposaba en el sofá de la casa, Luhan entendió que eran sus cosas, las que tanto necesitaba, como el resto de medicamentos que solía tomar para sus alergias, ropa y su móvil ya que si no se reportaba con Minseok, el fabuloso e ingenioso plan de Jongdae libre de imperfectos no iba a dar resultados y lo iba a mandar directo al hospital con heridas graves, causadas por el mismo Minseok.

-Gracias -respondió secamente ignorando olímpicamente la oleada de furor que se concentró en su pecho ante las palabras anteriores de Jongin.

Luhan se dirigió a la habitación por una ducha, quería quitarse todo la suciedad de encima, si es que pudiese tener alguna, es decir, ayer se había bañado y no estaba taaaan sucio, era simple costumbre. La ducha fue rápida, salió del baño y se puso algo cómodo y cuando regresó Jongin seguía en la sala, encima de Sehun, tocándole el pelo.

No pudo haber peor imagen.

-¡Yah ¿qué mierdas haces?!

Jongin saltó en su lugar cayendo por inercia encima de Sehun, aplastándolo y espantando, mismo que a su vez lo lanzó con todas sus fuerzas fuera de él.

Sehun empezó a abrir los ojos notando la escena con somnolencia, Jongin estaba a un lado, quejándose de dolor, y Luhan estaba exaltado con el ceño fruncido y con sus puños apretados.

-¿Qué sucede? -preguntó desorientado.

Jongin gruñó un ayyy largo quejándose del dolor que le había provocado ser tirado por Sehun al otro lado de las colchas. Luhan no dijo nada y se dirigió a la cocina, a tirar y lanzar trastos por doquier.