Descubrí que la amabaLa conozco hace quince años, y recién ahora, lo descubrí.
Es que al verla mi corazón se aceleraba, mis pupilas se dilataban, mi cuerpo sudaba, todo en mi se volvía completamente loco.
Cada vez que ella rozaba su mano con la mía, lo sentía. Sentía ese roce y daba un respingo, y la miraba fijamente para descubrir que le pasaba lo mismo que a mi.
Ella reaccionaba igual que yo, cada gesto, cada movimiento, era igual que el mío.
Yo siempre dude de mis sentimientos hacia Luz, hasta ahora.
Desde chiquitos que somos inseparables, somos mejores amigos gracias a nuestra familia. Ellos se empeñaron en juntarnos, todos los días iba a su casa o ella a la mía, pero de alguna u otra forma, estábamos juntos.
Luz era la mejor persona que alguien pudo conocer. Ella es... es... ¡agh! No tengo palabras para describir cómo es ella, pero sé que es perfecta para mí -. Dije sonriendo de medio lado para continuar.
Recuerdo que cuando tenía seis años me había tropezado con una piedra. Estaba llorando muchísimo, porque al caer, me lastime la rodilla, entonces ella vino corriendo, se agachó y me abrazó; después "curó" mi herida cantando "sana sana, colita de rana, si no sana hoy, sanara mañana" y deposito un beso en mi mejilla.
Nuestros padres vinieron para curarme y Luz estaba abrazándome, hasta que con toda la inocencia del mundo, me dijo "te quiero" para luego reírse a la par mía.
Ese es el mejor recuerdo que tengo de los dos, cuando eramos pequeños.
Ella siempre fue mi compañera de aventuras, fue la persona que me ayudaba cuando tenía algún problema, fue mi confidente, mi fiel amiga, mi todo.
Hace unos meses ella me contó que estaba enamorada de alguien y que necesitaba consejos de mi parte, yo estaba triste, pero no sabía el por qué. Se supone que somos mejores amigos y la tengo que ayudar en todo. Pero no iba a soportar que ella estuviese con otro que no fuera yo.
Odio con toda mi alma que ella me lo haya dicho por carta que estaba enamorada de mí -dejé escapar algunas lágrimas para continuar leyendo-, me sentí tan estúpido por creer que le interesaba otro.
Hace unos días estaba a punto de declararme. Estaba preparando todo para la cena "romántica" hasta que me llaman de un número desconocido.
Atiendo y mi sonrisa se borra al instante que escucho la palabra "hospital". Salgo corriendo de mi casa, me subí al auto y conduje lo más rápido que pude para llegar a aquél lugar.
Cuando llegué me dijeron que ella no resistió y que en el trayecto al hospital sufrió un paro cardíaco, trataron de reanimarla, pero no lo lograron.
Me sentía tan mal. Luz no se enteró que yo la amo, que siempre lo hice, ella demostraba interés en mí al igual que yo.
Odio que ese idiota la haya atropellado.
Odio que se haya ido de mi lado.
Odio amarla tanto.
Pero lo que más odio es tener que referirme a ella en pretérito cuando me gustaría que fuese en presente.